Tabakalera como referente de debate
Ocho profesionales reflexionan en el centro donostiarra sobre el buen maridaje entre arquitectura y cultura
La primera reacci¨®n que tuvo el arquitecto Michiel Riedijk (Geldrop, Holanda, 1964) cuando recorri¨® ayer por primera vez el edificio de Tabakalera, en San Sebasti¨¢n, fue: "Quiten esa caja tan fea que hay en la entrada y el resto d¨¦jenlo como est¨¢". Pero sabe que no conviene dejarse llevar por la primera impresi¨®n, que "hay que avanzar e ir m¨¢s all¨¢". "Este edificio tiene muchos elementos sorprendentes y me parece apasionante la tarea de saber c¨®mo reinterpretarlo", coment¨® ante los periodistas al mediod¨ªa, tras su visita.
Unas horas despu¨¦s abri¨® all¨ª Nuevas arquitecturas para la cultura, unas jornadas organizadas por Tabakalera justo unas semanas antes de sacar a concurso su proyecto arquitect¨®nico. La vieja factor¨ªa de tabaco se convertir¨¢ en una f¨¢brica de cultura visual. Por ello, los responsables del nuevo centro donostiarra han citado para estos encuentros, que se alargar¨¢n hasta esta tarde, a profesionales de ¨¢mbito internacional que en los ¨²ltimos a?os han intervenido en museos, bibliotecas u otras infraestructuras culturales y han logrado un buen maridaje entre la arquitectura y la actividad de esas instalaciones.
"Son unas jornadas para debatir. No esperamos llegar a unas conclusiones", advirti¨® el director de Arquitectura de Tabakalera, I?aki Galarraga. "Cuando se conoce el edificio sorprende lo abierto que est¨¢ a diferentes interpretaciones y estrategias", subray¨® el tambi¨¦n arquitecto I?aki ?balos, coordinador de la reuni¨®n.
El primero en llegar al edificio fue Riedijk. En su opini¨®n, Tabakalera tendr¨ªa que empezar por "elaborar una historia", en la que se primen "las relaciones" con el contiguo parque Cristina Enea, con el r¨ªo, con la catedral del Buen Pastor, con el centro urbano,... Todos estos puntos se ven desde el tejado del inmueble. Es "una panor¨¢mica que habr¨ªa que poner en valor de alguna manera", indic¨®.
Propuso tambi¨¦n definir unos usos diferenciados para cada uno de los cuatro grandes cuadrados que conforman el edificio. Y no se olvid¨® de la vertiente econ¨®mica, que lig¨® a la decisi¨®n de intervenir en todo el inmueble o s¨®lo en puntos concretos. Despu¨¦s de Riedijk fueron llegando los dem¨¢s invitados: la polaca Renata Sentkiewicz, el alem¨¢n Finn Geipel y los espa?oles Josep Llin¨¤s, Alejandro Virseda, I?aqui Carnicero e Ignacio Vila.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.