Imagine una melod¨ªa y sonar¨¢
El artista Mick Grierson idea un casco que detecta la actividad cerebral generada al pensar en una nota musical - El ordenador recibe la se?al y la ejecuta
Mick Grierson, un artista experimental fichado por el Goldsmith College de la Universidad de Londres, ha desarrollado una interfaz -un sistema de comunicaci¨®n directa entre el cerebro y el ordenador- que permite tocar notas musicales con s¨®lo pensar en ellas. Su principal objetivo es ayudar a "los compositores que sufren de esclerosis m¨²ltiple u otras discapacidades, y quieren seguir haciendo m¨²sica", declar¨® ayer a la BBC.
El usuario debe ponerse un casco el¨¢stico -parecido a un gorro de ba?o- que est¨¢ cubierto de electrodos. El fundamento del sistema es el mismo que en los electroencefalogramas: los distintos tipos de actividad cerebral estimulan a distintos subconjuntos de electrodos a trav¨¦s del cr¨¢neo. La se?al no es muy precisa, pero s¨ª lo suficiente para algunas aplicaciones como ¨¦sta, donde basta con una discriminaci¨®n muy cualitativa.
Su fin es ayudar a "los compositores que sufren de esclerosis m¨²ltiple"
El principal inconveniente es la lentitud para lograr un resultado preciso
El casco no puede distinguir entre las actividades cerebrales asociadas a "pensar do" y "pensar re". En lugar de ello, los nombres de las notas van apareciendo en la pantalla del ordenador. Cuando la que aparece coincide con la que el usuario quiere tocar, la actividad cerebral experimenta un cambio inconsciente que -esta vez s¨ª- es de la suficiente magnitud como para ser registrado por los electrodos. El ordenador se encarga entonces de ejecutar la nota.
Por el momento, la interfaz ha logrado acertar seis de cada ocho notas pensadas por el usuario. Grierson presentar¨¢ estos resultados en la International Computer Music Conference (ICMC), que se celebrar¨¢ en Belfast del 24 al 29 de agosto. Su ponencia se titula Composing with brainwaves (componiendo con ondas cerebrales).
Los sistemas de control de un ordenador mediante ondas cerebrales son un campo de investigaci¨®n incipiente, pero prometedor para las personas con graves discapacidades en las que el cerebro ha quedado desconectado de los nervios motores (como en los tetrapl¨¦jicos), o bien esos nervios han degenerado (como en la esclerosis).
La interfaz de Grierson se basa, como otras ensayadas desde 1996, en una onda electroencefalogr¨¢fica muy bien caracterizada, llamada p300. La onda es un registro agregado de la actividad el¨¦ctrica de un enorme n¨²mero de neuronas situadas en los l¨®bulos temporales (bajo las sienes) y frontales, zonas del cerebro implicadas en la atenci¨®n y la toma de decisiones.
La onda p300 se puede activar mediante un est¨ªmulo procedente de cualquiera de los sentidos, pero s¨®lo si el sujeto lo utiliza para alguna tarea consciente o toma de decisi¨®n. El ejemplo t¨ªpico es pedir al sujeto que piense en una carta, y despu¨¦s irle mostrando la baraja: cuando la carta mostrada coincide con la pensada, se activa la onda p300. Es exactamente la estrategia utilizada por Grierson con las notas.
La principal ventaja de la onda p300 es que no hace falta ninguna t¨¦cnica invasiva para detectarla, pero tambi¨¦n tiene otras. Por ejemplo, la forma y las caracter¨ªsticas de la onda son altamente reproducibles, y se corresponden de manera fiable con la presentaci¨®n del est¨ªmulo en cuesti¨®n. Adem¨¢s, sus propiedades son muy similares en todas las personas, por lo que el sistema no requiere mucho reajuste individual.
Su principal inconveniente es que la se?al debe promediarse sobre varias tomas para que el resultado sea preciso, y esto supone una considerable lentitud a la hora de usarla como base de una interfaz en tiempo real. Presentando cuatro caracteres (notas u otros s¨ªmbolos) por minuto, el ¨ªndice de acierto puede alcanzar el 95%. A mayor velocidad, la precisi¨®n se resiente.
La Universidad Keio de Tokio ha desarrollado un sistema experimental similar para controlar unas manos rob¨®ticas con la mente. Las investigaciones con monos han logrado resultados notables, pero utilizan t¨¦cnicas invasivas. Por su parte, la compa?¨ªa estadounidense Emotiv tiene previsto lanzar un videojuego controlado por un casco con electrodos al final de 2009.
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