"Me prestaron un personaje y me sent¨ª libre"

Paula Blanco ha protagonizado una gran aventura en el escenario. Esta joven actriz ensayaba en Barcelona una producci¨®n teatral de peque?o formato de Rey Lear en catal¨¢n cuando la llamaron de urgencia para preguntarle si se atrev¨ªa a sustituir a una colega madrile?a lesionada que hac¨ªa su mismo papel -el de Cordelia, nada menos, la hija buena de Lear- en otro montaje de la obra de Shakespeare, en castellano. No lo dud¨® y ha representado ocho funciones prestada en el espect¨¢culo ajeno, el Lear del Centro Dram¨¢tico Nacional, en el que ha sustituido a Myriam Gallego. Aparece este mediod¨ªa Paula en el bar del patio g¨®tico del antiguo Hospital de la Santa Creu, con aspecto de estudiante, ropa suelta y un aire despistado. Nadie imaginar¨ªa que hace un rato, a pocos metros, en el local de ensayo, viv¨ªa una tragedia de a¨²pa y acababa ahorcada.

La actriz ha vivido un sue?o de teatro: sustituir a una veterana y triunfar

Coloca la carpeta que lleva sobre la mesa y en vez de caf¨¦ pide -tras cruzar una mirada recabando absurdamente permiso- una copa de vino blanco. En el preciso momento en que empezamos a hablar estalla un trueno y comienza a llover, como en la escena central de Rey Lear. Estamos s¨®lo relativamente a cubierto: nos protege a medias un toldo y el agua va mojando la mesa y su lado, as¨ª que corre su silla y sube los pies encima. Est¨¢ muy cerca. Tiene los ojos inquietantemente oscuros y melena rizada que enmarca facciones casi de ni?a. Enciende un cigarrillo. "Estaba a¨²n insegura con mi Cordelia cuando me propusieron hacer la otra. ?Y tanto que s¨ª!, dije. Me queda todo por hacer, as¨ª que ?por qu¨¦ iba a tener miedo?".

Da una larga calada. "Fue una locura, todos me ayudaron mucho y que confiaran en m¨ª fue lo mejor. El primer d¨ªa la sensaci¨®n fue muy bonita, de desnudez absoluta". ?No es esa la pesadilla del actor, el llegar sin el texto aprendido, sin ensayos suficientes? "Me pasaban el texto por un auricular y toda la compa?¨ªa se volc¨® en m¨ª. El p¨²blico estaba advertido, aunque no me lo dijeron. El miedo viene m¨¢s, creo, cuando te has preparado bien. Yo me sent¨ªa muy libre. Y al no ser conocida, con muy poco que perder. Primaba la ilusi¨®n y la aventura".

La lluvia arrecia y Paula se encoje para evitar las salpicaduras. Es tan joven y vital que casi duele. ?Son diferentes las dos Cordelias? "Esta a¨²n no puedo decir c¨®mo es (dirigida por Oriol Broggi, se estrenar¨¢ el 27 de junio en el festival Grec) y la otra no debo, porque no es m¨ªa, es de Myriam". Paula habl¨® con ella por tel¨¦fono. "Estaba en el hospital, me dio muchos ¨¢nimos. De actriz a actriz. Me prest¨® su Cordelia. Nos hicimos un favor mutuo". Paula acab¨® hace un a?o Interpretaci¨®n en el Instituto del Teatro y debut¨® en La pla?a del Diamant. A¨²n siente una sensaci¨®n irreal en el escenario. Su familia no es del medio, pero su padre, dice, la llevaba al teatro. Se le enciende la mirada al hablar de ¨¦l.

?Qu¨¦ cree que pasa entre Cordelia y Lear? "Cordelia es sincera. La sinceridad es importante. Aspiro a mantenerme firme, honesta. Mi madre es comadrona y me ha dado ejemplo de integridad. ?Por qu¨¦ es tan dif¨ªcil mantenerse hoy ¨ªntegro? Perdona, quiz¨¢ hablo mucho y eso es muy arrogante cuando me queda tanto por vivir. Tengo 23 a?os... ?No, ya 24!, los cumpl¨ª ensayando un Lear y representando otro. Soy charlatana, te dec¨ªa, pero no puedo hacer que, como Cordelia, el coraz¨®n me venga a la boca. Me cuesta decir lo que siento profundamente. Aprender¨¦".