Los Celtics, con todas las de la ley
El equipo de Pierce y Garnett fulmina a los Lakers y vuelve al trono 22 a?os despu¨¦s
Los Celtics vuelven a ser los reyes de la NBA. Han tenido que batir el r¨¦cord de partidos disputados en unos playoffs, 26, superar contratiempos f¨ªsicos como los de Pierce y Perkins, y actuaciones basura, como el propio Garnett calific¨® la suya tras el quinto partido. Pero 22 a?os despu¨¦s han vuelto a la cima. Todo tras un duelo legendario y largamente esperado, frente a un rival de lujo, los Lakers de Kobe Bryant y Pau Gasol, que lleg¨® a la cita a todo trapo y al que tritur¨® en la segunda mayor paliza en la historia de las finales: 131-92. Los 39 puntos de margen reflejan su aplastante superioridad en el sexto partido con el que zanjaron la serie. S¨®lo los Bulls de Michael Jordan hab¨ªan logrado una proeza similar al ganar por 42 puntos de margen (96-54) a Utah en 1998.
BOSTON CELTICS 131 - L. ?. LAKERS 92
Boston Celtics: Rondo (21), R. Allen (26), Pierce (17), Garnett (26) y Perkins (2) -cinco inicial-; House (9), Posey (11), Brown (6), Powe (8), Davis (3) y T. Allen (2).
Los ?ngeles Lakers: Fisher (7), Bryant (22), Radmanovic (6), Odom (14) y Gasol (11) -cinco inicial-; Farmar (12), Walton (8), Vujacic (7), Ariza (3) y Turiaf (2).
?rbitros: Salvatore, Crawford y Rush. Se?alaron falta t¨¦cnica a Doc Rivers.
18.624 espectadores en el TD Banknorth Garden de Boston. Sexto partido de la final. Boston se proclam¨® campe¨®n de la NBA (4-2).
4? CUARTO
3? CUARTO
2? CUARTO
1? CUARTO
24-20
34-15
31-25
42-32
Especial NBA |
La respuesta colectiva ante la adversidad define casi tan bien como su pegada y eficacia al equipo que mejor ha defendido en la Liga. El big three, Garnett, Pierce y Ray Allen, ha sabido sobreponerse a momentos cr¨ªticos: algunos gatillazos individuales y varios colectivos, como su primera derrota en casa ante los Pistons o su incapacidad para vencer en las canchas de los Hawks y de los Cavaliers. Curiosamente, el mejor equipo defensivo acab¨® regalando a su afici¨®n el t¨ªtulo en una exhibici¨®n de juego de ataque, con la fant¨¢stica colaboraci¨®n de todos sus reservas, que han cumplido las tareas espec¨ªficas encomendadas por su entrenador, Doc Rivers, en otro de los muchos aspectos que han marcado la diferencia respecto a los Lakers.
El sexto partido fue un infierno para el equipo de Los ?ngeles. No dieron una a derechas. Kobe Bryant empez¨® a toda pastilla pero se apag¨® a medida que se dibuj¨® la tremenda superioridad de los Celtics en todos los rincones de la cancha; es decir, a las primeras de cambio. Ni Gasol resisti¨® el previsible y feroz desquite de Garnett tras su floj¨ªsimo partido en el Staples Center, ni Odom afin¨® en el tiro, ni Fisher dio el ritmo adecuado al juego, ni Radmanovic una a derechas, ni los reservas enmendaron la plana.
Lo peor para los Lakers fue su palmaria inferioridad en los indicadores colectivos: ni se sincronizaron, ni corrieron, ni rebotearon como los Celtics. O lo que es lo mismo, son peor equipo se mire por donde se mire. Al menos, en la serie. De ah¨ª ese abismo: 14 rebotes y 14 robos de bal¨®n m¨¢s y 12 p¨¦rdidas menos que su rival. Un mundo. Con Garnett a la cabeza, firmando su revancha con 26 puntos y 14 rebotes, Pierce como siempre con 17 puntos y 10 asistencias, Ray Allen en sus n¨²meros, 26 puntos, y hasta un discreto tirador como Rondo tambi¨¦n acertado con 21 puntos, completaron los Celtics una tunda fenomenal. Pierce cerr¨® la serie de su vida siendo designado MVP de la final.
Con tal panorama, resulta l¨®gico que Pau Gasol, el hombre que hizo rebrotar la esperanza de que algo grande pod¨ªa pasar en Los ?ngeles cuando los Grizzlies lo soltaron el pasado 1 de febrero, abandonara el vestuario visitante del Garden con un regusto especialmente amargo y repitiendo una consigna muy clara: "Pasar¨¢ un tiempo hasta que nos repongamos pero no debemos olvidar el sentimiento que ha provocado en todos nosotros esta derrota". "En el segundo cuarto nos derrumbamos y ellos rompieron el partido. Ellos estaban c¨®modos y fueron creciendo mientras que nosotros nos hund¨ªamos. Han jugado muy bien y se han merecido el t¨ªtulo", admiti¨®.
No tuvo historia el partido que, tras un primer cuarto igualado (24-20), con 11 puntos de Kobe Bryant y un mal arranque de Pierce que hizo un parcial de una canasta en 6 lanzamientos, empez¨® a romperse en el segundo (58-35) y acab¨® de quedar a salvo de cualquier duda en el tercero (89-60). No hab¨ªa remontada posible a pesar de las que se hab¨ªan producido a lo largo de la serie. Pero hasta en eso ganaron los Celtics, que protagonizaron la mayor de ellas en el cuarto encuentro, en Los ?ngeles, al superar 24 puntos de desventaja. "Aquello fue determinante", reconoci¨® Gasol. La hendidura por la que empez¨® a decantarse el playoff. Kobe Bryant se qued¨® otra vez sin anillo y se despidi¨® con 22 puntos. S¨®lo Farmar (11) y Odom (14) aguantaron ligeramente el tipo mientras que Pau Gasol, el primer espa?ol que disputa una final, se qued¨® en 11 puntos y 8 rebotes en 32 minutos, en los que evidenci¨® lo justo de fuerzas que lleg¨® al envite del Garden, donde los p¨ªvots de casa le esperaban con el cuchillo entre los dientes. Pese a todo, el 16 de los Lakers razon¨®: "Tenemos margen de mejora. Hay que aprender de los errores. Espero tener m¨¢s oportunidades de estar en la final".
La paliza en el sexto partido no hizo sino confirmar que los Celtics, 22 a?os despu¨¦s de lograr su ¨²ltimo anillo, vuelven a honrar de la mejor forma posible a sus leyendas, a Russell, a Cousy, a Auerbach, a Bird y tantas leyendas como cuenta, con el 17? t¨ªtulo en su historia, de largo, el equipo que m¨¢s acumula en la NBA.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.