El ex alcalde de Barrika admite vertidos clandestinos en un relleno

El ex alcalde de Barrika, Jos¨¦ Mar¨ªa Ezpeleta (PNV), ha admitido en un juzgado que "puede que se hayan realizado vertidos clandestinos" por un constructor que fue presidente del PNV de esta localidad. Ezpeleta compareci¨® el pasado 10 de junio como imputado en el caso de un posible delito ecol¨®gico que investiga el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de Getxo.

La denuncia la formul¨® en 2006 el grupo ecologista Txipio Bai, que acus¨® a Jon Larrazabal (constructor y presidente del PNV en Barrika cuando en 2002 pidi¨® una licencia para actuar en esa zona) de desglosar el proyecto de acondicionamiento de unos terrenos para uso agr¨ªcola cerca de la playa de la localidad en dos superficies de m¨¢s de 4.000 metros cuadrados. Con esta trampa evit¨® que la actuaci¨®n fuera considerada un relleno (cuando el ¨¢rea supera los 5.000 metros cuadrados), que requiere la autorizaci¨®n de la consejer¨ªa de Medio Ambiente, y precis¨® ¨²nicamente del permiso municipal. En la demanda se imputa a Ezpeleta por tramitar el permiso sin los informes del Gobierno y obviando, como record¨® Medio Ambiente, que la zona est¨¢ incluida en el cat¨¢logo de espacios naturales relevantes. El pasado a?o el Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa comprob¨® que en las tierras utilizadas en los rellenos hab¨ªa concentraciones elevadas de ars¨¦nico y cadmio (hasta el triple del umbral legal de afecci¨®n a los ecosistemas).

En su declaraci¨®n, el ex alcalde reconoci¨® la posibilidad de los vertidos clandestinos, "pero no s¨®lo por Larrazabal", precis¨®, "sino por algunos otros desconocidos". Aleg¨® que el consistorio coloc¨® unos carteles en la zona con la prohibici¨®n de realizar vertidos y que los estudios medioambientales del Ayuntamiento dicen que "no hay contaminaci¨®n de tierras".

El constructor Jon Larrazabal, quien compareci¨® el mismo d¨ªa tambi¨¦n como imputado, no respondi¨® a las preguntas sobre c¨®mo llegaron los residuos t¨®xicos de cadmio y ars¨¦nico. Dijo desconocer si se hab¨ªan pagado tasas y una fianza al Ayuntamiento por el acondicionamiento de los terrenos, y deleg¨® cualquier responsabilidad de lo ocurrido en la empresa Exbasa, a la que traspas¨® la licencia para realizar los vertidos. "A partir de entonces [del traspaso] toda relaci¨®n con el Ayuntamiento debi¨® ser por parte de Exbasa", afirm¨® Larrazabal. La constructora, quien en 2006 neg¨® que participara en los rellenos, a¨²n tiene que declarar.