'Like a rolling stone'
Las piedras en el camino nos ense?an que el destino del arte es rodar y rodar. Saber llegar ya es otro tema, acaso una ranchera. Un modo de hacerlo ser¨ªa la exposici¨®n La construcci¨®n del paisaje contempor¨¢neo, en el Centro de Arte y Naturaleza (CDAN), ya que obliga a pensar y leer la naturaleza como fuerza nerviosa y controlada a trav¨¦s del trabajo de una quincena de artistas que indagan en el enigma, las tensiones y las memorias rituales que se construyen -o se producen- en ella. El paisaje entendido como experiencia o tr¨¢nsito que permite interpretar en clave cultural -?y pol¨ªtica?- las cualidades de un lugar, un paraje.
Las piezas seleccionadas por los comisarios Javier Maderuelo y Mar¨ªa Luisa Mart¨ªn de Argila son pr¨¢cticamente incuestionables. Y aunque las salas del centro oscense no sean el marco ideal donde exhibir mejor sus ambivalencias, en la mayor¨ªa de los casos la imaginaci¨®n del visitante ha de hacerlas profundas y plenas, considerarlas documentos o "¨ªndices", antes que "valiosos, originales, exclusivos, desfuncionalizados objetos que se adquieren en el prometedor mercado del arte". Pues uno de los m¨¦ritos de esta colectiva est¨¢ en el hecho de reunir trabajos de autores cuyas ideas no llegaron a calar en una sociedad que demandaba una escultura ligada a la objetualidad, la masa y las formas definidas perseguidas por los m¨¢s tradicionalistas, como David Smith, Henry Moore o Anthony Caro.
La construcci¨®n del paisaje contempor¨¢neo
CDAN. Fundaci¨®n Beulas
Avenida del Doctor Artero, s/n. Huesca
Hasta el 28 de septiembre
La influencia de John Cage y sus ideas acerca de la indeterminaci¨®n de la obra de arte fue confirmada por artistas del Land Art como Walter de Maria, Robert Morris, Robert Smithson o Richard Long. Este ¨²ltimo (A Circle in Huesca, 1994) es quiz¨¢s quien mejor representa la teor¨ªa de like a rolling stone (la obra se hace andando). David Nash aporta una de las piezas m¨¢s esenciales, Wooden Boulder (1978-2003), que describe a trav¨¦s de fotograf¨ªas, dibujos y un v¨ªdeo el viaje azaroso de un gran trozo de madera con forma esf¨¦rica, desde que es impulsado por el arroyo hasta que se pierde en el oc¨¦ano. De Smithson se exhiben las im¨¢genes del proceso de creaci¨®n de uno de los emblemas de los earthworks, la Spiral Jetty (Gran Lago Salado de Utah, 1970). Los Seascapes (1990) de Hiroshi Sugimoto, los paisajes de lava de Lanzarote (2004) de Axel H¨¹tte, los Campos de Batalla (1995-6) de Bleda y Rosa, la serie de Jardines Bot¨¢nicos de Burdeos (2000-2004) de Catherine Mosbach y las heliograf¨ªas de los paisajes canarios (1971) de Richter son una representaci¨®n completa de la capacidad pict¨®rica del lenguaje fotogr¨¢fico: horizontes, luz, el sublime...
Paolo B¨¹rgi abandona al espectador con el hilo en el laberinto de su Proyecto para un jard¨ªn en Hannover (2002), la ruina de un lugar hoy desaparecido. Ulrich R¨¹ckriem es aqu¨ª el escultor m¨¢s "tradicional", con los planos y una de las veinte estelas de granito del proyecto Siglo XX (1996) en Abiego. Isamu Noguchi firma la maqueta en bronce, United Nations Playground (1952), uno de los primeros earthworks con finalidad, por as¨ª decir, pr¨¢ctica. Los trabajos de Alberto Carneiro, Jes¨²s Mari Lazkano e Isidro Blasco, menos contundentes (?m¨¢s posmodernos?), cierran el recorrido por los artificios de la naturaleza, donde monta?as, ¨¢rboles y tierra se pueden volver a nombrar. -
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.