Espa?a permitir¨¢ donar el ri?¨®n a un desconocido
Si un enfermo tiene un posible donante, pero ¨¦ste resulta incompatible, podr¨¢ 'intercambiarlo' con el de otro afectado
Cuando un enfermo necesita un ri?¨®n y cuenta con un donante vivo, sea un familiar o amigo, gana tiempo por partida doble. Por un lado, a?os de vida, ya que el ¨®rgano de una persona viva est¨¢ en mejores condiciones. Por otro, acorta su permanencia en la lista de espera -de hasta 18 meses-, con lo que su cuerpo tambi¨¦n se encuentra mejor para la intervenci¨®n. Pero m¨¢s all¨¢ de la voluntad, este gran acto de amor cuenta con un importante obst¨¢culo: donante y paciente deben ser compatibles. La Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes (ONT) se ha propuesto solucionarlo con un sistema cruzado: la persona que necesite un ri?¨®n y cuente con un donante que sea incompatible podr¨¢ intercambiarlo con otra pareja que est¨¦ en la misma situaci¨®n.
Matesanz: "La donaci¨®n de vivo es mejor. Se evita la di¨¢lisis"
Se rompe as¨ª una firme cautela en el sistema espa?ol de trasplantes: no cabe la donaci¨®n de un ¨®rgano por un vivo salvo en el entorno de la familia y amigos m¨¢s ¨ªntimos. Desde ahora, podr¨¢ darse un ri?¨®n a un desconocido.
El plan podr¨ªa empezar a funcionar en 2009, y se espera que suponga un impulso para que Espa?a -l¨ªder mundial en donaci¨®n de ¨®rganos de cad¨¢ver- aumente sus tasas de donaci¨®n de vivo. El a?o pasado, s¨®lo el 6,2% de los trasplantes que se realizaron fueron de este tipo. La media europea es de un 15%. Precisamente la abundancia de ¨®rganos de cad¨¢ver ha frenado las donaciones vivas. "Hasta ahora, no se hab¨ªan visto como necesarias, pero en los ¨²ltimos cinco a?os la situaci¨®n ha cambiado. Tiene que pasar a ser la primera opci¨®n", dice Rafael Matesanz, presidente de la ONT. M¨¢s de 4.000 personas esperan recibir un ri?¨®n.
"Los resultados son mejores. Adem¨¢s, cada vez tenemos menos donantes de cad¨¢ver j¨®venes, ya que la tasa de accidentes de tr¨¢fico ha descendido. En 2007 fue de un 7%, cuando hace dos era del 14%", a?ade. Los donantes envejecen. "El 43% tiene m¨¢s de 60 a?os. La esperanza de vida del ¨®rgano trasplantado de vivo m¨¢s joven es de unos 16 a?os, porque ha sufrido menos. El de cad¨¢ver es de 10 a?os, porque ha sufrido la muerte", seg¨²n Matesanz.
El a?o pasado se realizaron en Espa?a 137 trasplantes de ri?¨®n de vivo. Las nuevas t¨¦cnicas de cirug¨ªa de m¨ªnima invasi¨®n tambi¨¦n han permitido que la extracci¨®n del ¨®rgano sea cada vez m¨¢s sencilla. Pero una tercera parte de las donaciones de vivo que ya tienen pareja no se pueden materializar, por tener grupos sangu¨ªneos diferentes o por incompatibilidad. Luis Guirado, nefr¨®logo de la Fundaci¨®n Puigvert en Barcelona, se?ala que en este centro hay 24 parejas incompatibles que podr¨ªan intercambiarse con otras con el mismo problema si existiese un banco de datos nacional.
La propuesta de la ONT y varios hospitales se presentar¨¢ el mi¨¦rcoles a la comisi¨®n de trasplantes del Consejo Interterritorial de la ONT, que nombrar¨¢ un grupo para desarrollar el reglamento. Jos¨¦ Luis L¨®pez del Moral, juez de la audiencia de Cantabria, no ve ning¨²n impedimento. "La ley s¨®lo proh¨ªbe la donaci¨®n cuando el donante se ve forzado por motivos econ¨®micos o sociales", explica. "En el caso de la donaci¨®n cruzada, cada parte aporta un donante libremente, hay reciprocidad".
El modelo se basa en el de pa¨ªses como Estados Unidos, Holanda o Corea del Sur. En este ¨²ltimo, la mayor¨ªa de trasplantes se realizan con donantes vivos; el de cad¨¢ver resulta casi imposible porque su cultura no acepta la muerte cerebral. El 80% son por intercambio, que muchas veces supone encajar hasta a ocho parejas. En Espa?a, "empezar¨¢ a funcionar en cuatro o cinco hospitales que ya tengan una gran experiencia en trasplante renal", dice Matesanz.
Para Guirado, lo ¨²nico que podr¨ªa requerir un ajuste es el anonimato. La ley establece que el donante de vivo debe declarar ante el juez el nombre y los apellidos de la persona a la que dona su ¨®rgano y cumplimentar una solicitud. Adem¨¢s, la donaci¨®n cruzada prev¨¦ la donaci¨®n in situ. Por tanto, el anonimato es dif¨ªcil.
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