Porros que alejan de clase

Empez¨® a los 13 a?os. A los 18 se puso en tratamiento. El principal problema de Santi (nombre ficticio) ha sido el cannabis, aunque no el ¨²nico. "Los porros y el tabaco van bastante ligados. El problema de la mayor¨ªa es la mezcla de drogas, la mezcla con alcohol, la coca¨ªna y el MDMA, droga parecida al ¨¦xtasis", dice Santi. Junto a ¨¦l, escuchando atentamente sus palabras, su padre, Joan: "Ve¨ªamos que hab¨ªa cambiado su actitud. En principio piensas que es algo pasajero, pero ves que no es as¨ª", afirma. Santi, que ha tenido que cambiar de estudios, contesta las preguntas de los periodistas sin pudor: "Ya lo he dejado. Hace 10 meses que estoy en tratamiento, voy dos d¨ªas a la semana y hago terapia de grupo durante tres horas".

Santi es uno de los j¨®venes que acude a la ONG Proyecto Hombre dedicada al tratamiento y la prevenci¨®n de las drogodependencias, en Montgat. El fracaso escolar afecta al 81% de los consumidores de cannabis y coca¨ªna entre 14 y 18 a?os. Este es uno de los datos que puso ayer sobre la mesa la ONG en referencia a una muestra de 50 j¨®venes que fueron tratados en el centro catal¨¢n durante 2007. Un tercio de ellos hab¨ªan abandonado completamente los estudios y el resto suspend¨ªa cuatro o m¨¢s asignaturas regularmente, seg¨²n el informe de la organizaci¨®n. Otros datos significativos son que el 10% de los adolescentes ha cometido acciones delictivas y que el 34% padece un trastorno psicol¨®gico definido. En total, solicitaron ayuda a Proyecto Hombre 284 familias con adolescentes con adicci¨®n a las drogas, lo que supone un aumento del 25% respecto a 2006.

No piden ayuda

"La mayor¨ªa vienen a pedir ayuda por el consumo de cannabis, pero te das cuenta de que tambi¨¦n consumen otras sustancias espor¨¢dicamente como la coca¨ªna y las drogas de dise?o", explica el portavoz de Proyecto Hombre, Oriol Esculies. "La realidad es que los menores no piden ayuda para dejar las drogas. No estamos llegando a la mayor¨ªa de adolescentes, hemos de acercarnos a las escuelas y no basta con dar manuales a los profesores", denuncia Esculies.

Esta organizaci¨®n tambi¨¦n ha constatado un porcentaje minoritario de adolescentes con adicciones a las nuevas tecnolog¨ªas como el tel¨¦fono m¨®vil, el chat y el sexo por Internet.