Gates se prejubila
El fundador de Microsoft deja el gigante inform¨¢tico a los 52 a?os para dedicarse de lleno a la filantrop¨ªa
Bill Gates, el gran icono del competitivo universo tecnol¨®gico, se despide hoy de Microsoft para dedicarse de lleno a la filantrop¨ªa. Han sido 1.712 semanas al frente del gigante inform¨¢tico de Redmond. Acaba as¨ª una era, 33 a?os, durante los que Gates ha sido la cara de la compa?¨ªa.
Y empieza otra, con nuevos actores que avanzan imparables en una nueva realidad, donde el acceso inmediato a los contenidos es clave para la supervivencia. Pero el cerebro de Microsoft no se despide del todo. Conservar¨¢ su puesto como presidente del consejo de administraci¨®n y seguir¨¢ trabajando un d¨ªa a la semana.
Junto a su socio Paul Allen, Bill Gates est¨¢ considerado como el creador de la industria de los programas que hacen funcionar los ordenadores personales. Del ingenio de ambos naci¨® hace tres d¨¦cadas Microsoft, con el objetivo de desarrollar la primera aplicaci¨®n para el Altair, el primer PC. El gran salto de la compa?¨ªa lleg¨® de la mano de su controvertido sistema operativo Windows y del paquete Office.
Seguir¨¢ como presidente del consejo y trabajar¨¢ un d¨ªa a la semana
Ballmer debe ahora dar continuidad a un monstruo al que le cuesta moverse
Despu¨¦s aparecer¨ªan la consola de videojuegos Xbox y el reproductor Zune. Las autoridades reguladoras en Estados Unidos y Europa no le han quitado el ojo de encima, por el dominio aplastante de Windows, que se come el 90% del mercado mundial. Para Gates, la presi¨®n es un elemento m¨¢s de su trabajo, hasta el punto de que consideraba que el negocio no era divertido si no hab¨ªa riesgos.
Gates, de 52 a?os, empez¨® a preparar su salida en la primavera de 2004. El fundador de Microsoft quer¨ªa dedicar m¨¢s tiempo a la fundaci¨®n que tiene junto a su mujer, Melinda, la instituci¨®n filantr¨®pica m¨¢s rica del planeta, con 37.300 millones de d¨®lares (23.693 millones de euros). Ya en 2000 deleg¨® la responsabilidad de consejero delegado en Steve Ballmer. En junio de 2006 formaliz¨® su retirada, tras recibir una multimillonaria donaci¨®n de Warren Buffett.
Ballmer deber¨¢ dar ahora continuidad al legado de Bill Gates, y no precisamente en un momento muy favorable para Microsoft, convertido en un gorila al que le cuesta moverse. Su eterna rival Apple, de Steve Jobs, y nuevos actores en el universo tecnol¨®gico, como el buscador Google o las comunidades virtuales MySpace y FaceBook, le est¨¢n obligando a adaptarse.
Microsoft sigue generando ingresos masivos, de 51.120 millones de d¨®lares (32.471 millones de euros) en 2007, gracias a los frutos que le aporta el monopolio creado durante las ¨²ltimas dos d¨¦cadas en el negocio de los programas inform¨¢ticos para PC. Paul Graham, uno de los gur¨²s de Internet, cree, sin embargo, que Microsoft est¨¢ muerta, porque no supo mutar su estructura de negocio.
La ¨²ltima versi¨®n de su sistema operativo, el Vista, est¨¢ siendo un desastre, hasta el punto de que muchos fabricantes de ordenadores est¨¢n pidiendo que le suministren el Windows XP para poder hacer funcionar sus PC. Adem¨¢s, obvi¨® durante a?os el lucrativo negocio de la publicidad en Internet, donde manda el buscador Google.
Microsoft intenta ahora recuperar terreno, reforzando su buscador MSN. De momento la estrategia de Ballmer est¨¢ dando m¨¢s disgustos que alegr¨ªas a los inversores. En un intento por dar un bocado m¨¢s grande a la suculenta tarta publicitaria, se lanz¨® en febrero a comprar Yahoo!. La tentativa fall¨® y, peor a¨²n, estrech¨® el v¨ªnculo comercial entre sus dos rivales.
En Wall Street intentan ver las cosas en positivo de cara al futuro, y creen que la salida de Bill Gates se produce en un momento oportuno y animar¨¢ a Microsoft a proceder a un cambio de cultura. Las esperanzas est¨¢n puestas en Ray Ozzie, el creador de Lotus Notes, encargado de desarrollar a partir de ahora las novedades tecnol¨®gicas del gigante de Redmond.
Ozzie cree que los nuevos competidores de Microsoft no son tan diferentes a otros del pasado. Y Ballmer, por su parte, dice sentirse c¨®modo y recuerda que Gates no desaparecer¨¢ de la faz de la tierra, porque tiene la intenci¨®n de pasar un d¨ªa a la semana por la oficina y estar¨¢ implicado en proyectos espec¨ªficos. Junto a ellos tambi¨¦n tendr¨¢ un papel m¨¢s relevante Craig Mundie, uno de los veteranos de Microsoft.
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