"Espero que ya hayamos dejado atr¨¢s lo peor de la crisis"
"Por credibilidad, creo necesario que revisemos el nivel actual de los tipos"
El economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), J¨¹rgen Stark, de 60 a?os, habla sobre el peligro en aumento de la inflaci¨®n, de las subidas previstas de los tipos y de las consecuencias de la crisis financiera.
Pregunta. La tasa media de inflaci¨®n en la zona euro est¨¢ en el 3,7%, muy lejos del objetivo del BCE del 2%. ?Ha perdido el banco la lucha contra la inflaci¨®n?
Respuesta. Est¨¢ claro que en el Consejo del BCE hemos debatido largo y tendido sobre esta evoluci¨®n. En los pr¨®ximos 18 meses va a haber una tasa de inflaci¨®n m¨¢s elevada porque los precios globales del petr¨®leo y de los alimentos est¨¢n subiendo mucho. Respecto a esto, poco podemos hacer desde el Banco Central. Pero tenemos que vigilar que no haya efectos de segunda ronda. ?stos surgen cuando las empresas incrementan los precios o cuando los que establecen los convenios colectivos acuerdan aumentar considerablemente los salarios.
"Hay subidas de precios en el sector servicios que no podemos permitir"
"Veo burbujas rotatorias, que pasan de un sector al siguiente"
P. El precio del biocombustible ha aumentado un 57% respecto al a?o pasado. En Alemania, en el ¨²ltimo a?o, los alimentos han subido cerca de un 8%. Por tanto, es comprensible que los sindicatos, en una situaci¨®n as¨ª, exijan una subida salarial.
R. Tenemos que tener cuidado de que no engorden esos efectos de segunda ronda. Desde finales de 2007, en muchas regiones de la zona euro, hemos visto c¨®mo los salarios han aumentado considerablemente, aunque el crecimiento en esos pa¨ªses se ha debilitado. Al mismo tiempo, las empresas del sector servicios, en el que est¨¢ claro que la competencia no es tan alta, est¨¢n incrementando much¨ªsimo los precios. Esto no lo podemos permitir.
P. ?No habr¨ªa usted aumentado los tipos hace mucho tiempo para luchar contra la inflaci¨®n?
R. En los ¨²ltimos 10 a?os, la tasa media de inflaci¨®n estaba en el 2,1%. Este resultado es visible. A partir de diciembre de 2005 y en contra de las numerosas cr¨ªticas de los pol¨ªticos y de otros bancos centrales, hemos aumentado los tipos. Tiene que pasar tiempo hasta que este medicamento haga efecto.
P. La ¨²ltima subida de tipos fue hace justo un a?o.
R. Nos hemos topado con numerosas turbulencias en los mercados financieros. Por eso tuvimos que esperar un poco al principio y recopilar m¨¢s informaci¨®n. Ahora estamos mirando hacia el frente y hemos de reconocer que hay muchos riesgos en la estabilidad de precios.
P. "Algunos de nosotros cre¨ªamos que deb¨ªamos aumentar los tipos. Otros tambi¨¦n estaban a favor, pero m¨¢s adelante. Y otros dec¨ªan que no era necesario en absoluto". As¨ª describi¨® Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, la diversidad de opiniones en la ¨²ltima reuni¨®n del Consejo del Banco Central. La unidad en la lucha contra la inflaci¨®n no tiene esta pinta.
R. Antes nos criticaban siempre que dec¨ªamos que una decisi¨®n se hab¨ªa tomado por unanimidad. En la actualidad seguimos estando en proceso de reflexi¨®n. Es obvio que hay diversidad de opiniones. Nadie sabe con exactitud qu¨¦ efectos va a tener todav¨ªa la crisis financiera. Pero hay muchos indicios que apuntan a que se va a solucionar muy pronto.
P. ?Entiende usted los argumentos de aquellos que, preocupados por la situaci¨®n de los mercados, exigen incluso una bajada de los tipos?
R. Lo importante es el crecimiento econ¨®mico sostenido. Esto no lo pueden conseguir con una tasa de inflaci¨®n superior al 3%. Pero los ciudadanos notan que su poder adquisitivo se resiente. Est¨¢ claro que tenemos que tener mucho cuidado de que no se llegue a una espiral de salarios y de precios al alza.
P. La gente piensa que est¨¢ del lado de los halcones que quieren la subida de tipos cuanto antes. ?Es verdad eso?
R. Algunos hasta hacen una diferenciaci¨®n entre halcones y superhalcones. No comento ese tipo de cosas. No somos ornit¨®logos.
P. Pero, ?defiende usted como economista jefe del BCE que se aumenten pronto los tipos?
R. Por motivos de credibilidad del BCE, considero necesario, en vista de las elevadas expectativas de inflaci¨®n, que comprobemos en serio el nivel actual de los tipos de inter¨¦s.
P. Los mercados de capital cuentan incluso con dos cambios de los tipos por parte del BCE.
R. Hasta principios de a?o, los augurios presupon¨ªan todav¨ªa que en cualquier caso bajar¨ªamos los tipos. En vista de las incertidumbres, hemos llevado a cabo una pol¨ªtica calmada. Ahora lo primero va a ser la decisi¨®n sobre los tipos que tomar¨¢ el Consejo del BCE a principios de julio. No vamos a limitarnos a un periodo de tiempo m¨¢s largo, sino que decidiremos caso por caso lo que es necesario para garantizar la estabilidad de precios a medio plazo.
P. En Estados Unidos los precios han subido a¨²n m¨¢s que en Europa. Sin embargo, el banco central estadounidense ha bajado los tipos. ?Ha sido un error?
R. No quiero hacer comentarios al respecto. Nosotros somos responsables de nuestra zona monetaria. La estabilidad de precios comienza en casa.
P. No obstante, est¨¢n empezando a notar las consecuencias de la pol¨ªtica monetaria estadounidense. La pol¨ªtica del dinero f¨¢cil bajo el entonces presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, ha provocado la actual crisis de los mercados financieros. Aunque con otras circunstancias, se est¨¢ repitiendo lo mismo.
R. Hay principios de la pol¨ªtica monetaria que tienen validez siempre. Irving Fisher dijo ya en 1993 que el dinero f¨¢cil era la causa de todas las exageraciones. Hemos tenido mucho tiempo unos tipos mundiales demasiado bajos.
P. ?Est¨¢ surgiendo en Estados Unidos, por causa del dinero barato, otra burbuja, esta vez en los mercados de materias primas?
R. Todos los indicadores se?alan que, en el ¨¢mbito mundial, hay mucha liquidez disponible. Este dinero est¨¢ en constante movimiento entre los diferentes tipos de fortuna. Lo que est¨¢ haciendo esfuerzos por salir del sector inmobiliario est¨¢ yendo hacia el ¨¢mbito de las materias primas. Yo veo burbujas rotatorias, es decir, exageraciones peligrosas que pasan de un sector al siguiente.
P. ?Est¨¢ viendo usted una evoluci¨®n similar a la de los a?os setenta?
R. La comparaci¨®n no est¨¢ nada mal. La explosi¨®n del precio del petr¨®leo de 1973 a 1979 vino acompa?ada tambi¨¦n de un fuerte aumento del precio de los alimentos. Por esa ¨¦poca, Estados Unidos tambi¨¦n llev¨® a cabo una pol¨ªtica salarial, monetaria y de gastos expansiva. La consecuencia fue una ola inflacionaria internacional. Y eso se ve hoy tambi¨¦n. El efecto de la bajada de los precios derivada de la globalizaci¨®n est¨¢ desapareciendo. En lugar de ello, las tasas de inflaci¨®n aumentan en todo el mundo, y los expertos hablan de una tendencia a la reflaci¨®n. Los banqueros centrales no podemos permitirlo, tenemos que mantenernos alerta.
P. El tipo de cambio del d¨®lar frente al euro ha ca¨ªdo en picado en los ¨²ltimos meses. ?Qu¨¦ le parece una acci¨®n concertada de los bancos centrales para reforzar el d¨®lar?
R. Tenemos que ocuparnos de la estabilidad interna y, por tanto, no tenemos un objetivo en el tipo de cambio. No podemos ver ¨²nicamente la parte negativa de que los productos de los exportadores se encarezcan en el extranjero, sino que tambi¨¦n nos podemos alegrar del efecto positivo del euro fuerte. Desde principios de a?o, el precio del petr¨®leo ha aumentado un 40% tomando el d¨®lar como base y un 30% tomando el euro. El tipo de cambio del d¨®lar ha perdido relevancia en los ¨²ltimos a?os para la econom¨ªa de la exportaci¨®n y la importaci¨®n. Ahora, los c¨¢lculos internacionales se presentan cada vez m¨¢s no en d¨®lares, sino en euros.
P. Hay muchos que piensan que EE UU se ha librado de una recesi¨®n profunda. ?Usted tambi¨¦n?
R. El BCE no ha juzgado la situaci¨®n de Estados Unidos de forma tan dram¨¢tica como algunos analistas. Hemos calculado que la financiaci¨®n del consumo privado con m¨¢s y m¨¢s deudas -sobre la que se basa en gran medida el crecimiento en Estados Unidos- no puede seguir as¨ª siempre. La correcci¨®n est¨¢ ahora mismo en plena actividad. Pero no presuponemos que la econom¨ªa estadounidense se vaya a derrumbar y luego se recupere igual de r¨¢pido, como suele pasar en cambio en ese pa¨ªs. En lugar de eso esperamos que despu¨¦s de la recesi¨®n haya una recuperaci¨®n gradual. Estados Unidos tiene probablemente una fase m¨¢s larga de crecimiento d¨¦bil ante s¨ª.
P. ?Cree que la crisis de los mercados financieros ya se ha superado?
R. En Estados Unidos ha tenido y tiene lugar una crisis, en la zona euro nos enfrentamos en todo caso a turbulencias. Ahora nos encontramos en el und¨¦cimo mes de estas turbulencias. Es un periodo de tiempo muy largo. Pero ya en septiembre del a?o pasado estaba claro que el proceso de adaptaci¨®n ser¨ªa as¨ª. Algunos segmentos del mercado est¨¢n volviendo a la normalidad, pero otros siguen buscando un nuevo equilibrio. Esto va a requerir todav¨ªa un poco de tiempo y, hasta ese momento, puede que el mercado siga fluctuando. Pero espero que lo peor ya lo hayamos dejado atr¨¢s. -
? Der Spiegel.
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