Ya somos m¨¢s de sesenta millones

Durante el siglo XXI, a?o tras a?o va aumentando la poblaci¨®n residente en Espa?a. Contra las opiniones que pronosticaban que la poblaci¨®n espa?ola no llegar¨ªa a 40 millones y tender¨ªa a disminuir, la realidad ha marcado una tendencia creciente inesperada, intensa y r¨¢pida. El motivo ha sido la entrada masiva de extranjeros que, por diversos motivos, han elegido Espa?a como su lugar de residencia. La mayor¨ªa son inmigrantes en busca de trabajo, bien sean procedentes de la UE (728.000 rumanos, 352.000 ingleses...) como de otras zonas del mundo (645.000 marroqu¨ªes, 420.000 ecuatorianos...).

Un asunto previo a cualquier comentario es el estad¨ªstico, ya que he podido observar las dudas que las cifras oficiales suscitan entre muchos ciudadanos. Cualquier observador acepta que el panorama socioecon¨®mico de la Espa?a actual ha cambiado con los inmigrantes, pero no hay tanta unanimidad a la hora de aceptar las cifras oficiales.

Los Gobiernos de la UE est¨¢n tomando decisiones que no van a solucionar los problemas de la inmigraci¨®n

En Espa?a disponemos de un padr¨®n continuo donde est¨¢n registrados todos los ciudadanos (espa?oles y extranjeros) que residen durante la mayor parte del a?o. Es necesario tener muy presente que, por ley, todas las personas residentes en Espa?a tienen el derecho y el deber de empadronarse en el municipio donde habitan la mayor parte del a?o. Lo ¨²nico que necesitan es documentar su identidad y el lugar donde residen.

Las cifras oficiales de poblaci¨®n residente parten de un registro administrativo, cuyo contenido est¨¢ regulado por ley y donde la labor de coordinaci¨®n del INE consiste en contrastar los datos que mensualmente env¨ªan los ayuntamientos (propietarios del padr¨®n) detectando los fallos en altas, bajas y posibles duplicidades entre los diferentes municipios. Esta labor de coordinaci¨®n es la que permite al Consejo de Empadronamiento proponer al Gobierno las cifras oficiales de poblaci¨®n para su aprobaci¨®n por el Consejo de Ministros.

Pues bien, el INE acaba de publicar la cifra provisional de residentes en Espa?a (antes de ser revisada y aprobada por el Consejo de Empadronamiento) y referida al 1 de enero de 2008. En esa fecha, la poblaci¨®n oficial super¨® los 46 millones (46.063.511). De ¨¦stos, el n¨²mero de extranjeros empadronados es de 5.220.000, equivalente al 11,3% de la poblaci¨®n total y de los que 2.096.000 son ciudadanos de la UE.

Las cifras de poblaci¨®n constituyen un indicador indispensable para la aplicaci¨®n correcta de las pol¨ªticas en las diferentes administraciones: pol¨ªtica de financiaci¨®n auton¨®mica, ense?anza y de sanidad, los c¨¢lculos de las pensiones en la pol¨ªtica presupuestaria y hasta en las necesidades de viviendas de los j¨®venes que van cumpliendo a?os. En el ¨¢mbito europeo, es un indicador de la representaci¨®n econ¨®mica (PIB per c¨¢pita) y pol¨ªtica (n¨²mero de diputados en el Parlamento Europeo) de cada pa¨ªs en la UE.

Desde el punto de vista social y de aplicaci¨®n de las normativas europeas hay que distinguir entre las diferentes situaciones en las que se encuentran los extranjeros en Espa?a. En el padr¨®n espa?ol est¨¢n incluidos no s¨®lo los extranjeros que tienen permiso de residencia (3.979.000 en diciembre de 2007) sino tambi¨¦n aquellos que aun estando en situaci¨®n irregular (sin permiso de residencia) se empadronan, derecho que les otorga la ley espa?ola. Por lo tanto, a la hora de analizar la situaci¨®n legal hay que diferenciar entre:

- Los ciudadanos de la UE, que tienen libertad de movimiento y residencia y que no necesitan permisos para residir ni trabajar en Espa?a (los rumanos y b¨²lgaros lo tendr¨¢n ¨ªntegramente a partir de enero de 2009). Los ciudadanos de la UE no necesitan tarjeta de residencia (aunque todav¨ªa la tienen 792.000), pero deben inscribirse en el registro de residentes comunitarios o disponer de una tarjeta familiar de ciudadano de la UE.

- Los ciudadanos extranjeros que est¨¢n regularizados (sean o no de la UE) cotizan a la Seguridad Social y pagan IRPF. Con datos de la Seguridad Social de febrero eran 2.041.000. Como consecuencia, tienen los mismos derechos que los ciudadanos espa?oles y si pierden el empleo tendr¨¢n cobertura de paro de la Seguridad Social.

- Los que no est¨¢n regularizados en el mercado laboral aunque est¨¦n empadronados. Con todas las reservas se pueden estimar en 800.000 (2.887.000 extranjeros de la EPA del primer trimestre menos los 2.041.000 de alta en la Seguridad Social). Aunque por estar empadronados tienen cubierta la sanidad y la educaci¨®n de sus hijos, no cotizan a la Seguridad Social y, por tanto, no tendr¨¢n derecho a cobertura de desempleo si se quedan sin trabajo.

Durante la etapa expansiva de la econom¨ªa espa?ola, el balance econ¨®mico de la inmigraci¨®n ha sido positivo tanto para la sociedad espa?ola como para los propios inmigrantes, pero ahora con el cambio de ciclo econ¨®mico vienen las dificultades. En etapas anteriores de crisis (a?os noventa), fueron las familias las que soportaron el peso de la situaci¨®n especialmente dura de los j¨®venes que no encontraban trabajo. Sin embargo, en la situaci¨®n actual, en la que presumiblemente muchos inmigrantes se est¨¢n quedando sin trabajo, el Estado podr¨¢ dar soporte s¨®lo a aquellos que hayan cotizado a la Seguridad Social pero no a los que, por estar en situaci¨®n irregular, no han cotizado y no tienen, por tanto, derecho a ninguna retribuci¨®n.

Es importante se?alar que en las cifras de poblaci¨®n de una mayor¨ªa de pa¨ªses de la UE, los extranjeros en situaci¨®n irregular (sin permiso de residencia) no est¨¢n contabilizados ni tienen derechos asistenciales. Parece claro que la hora de pensar en pol¨ªticas comunes de inmigraci¨®n es necesario disponer de cifras armonizadas en la UE. Pero las circunstancias particulares de cada pa¨ªs, los intereses de los Gobiernos nacionales y su forma de entender el fen¨®meno de la inmigraci¨®n est¨¢n llevando a tomas de decisiones, como la nueva directiva de la UE aprobada por el Parlamento Europeo, que no s¨®lo va a perjudicar a los derechos de los inmigrantes, sino que no va a solucionar ninguno de los problemas de fondo que la inmigraci¨®n puede generar en un momento econ¨®mico dif¨ªcil. -CARMEN

ALCAIDE

Carmen Alcaide es economista y ex presidenta del INE.