Espa?a se vuelve loca
Decenas de miles de personas jalean a la selecci¨®n y festejan la victoria en las calles
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Primero fueron las pantallas gigantes, las banderas rojigualdas al viento, las camisetas rojas y los gritos de aliento. Luego, la fiesta. Los chapuzones en las fuentes, los petardos, las bocinas de los coches, el "?campeones, campeones!", las calles cortadas al tr¨¢fico, la celebraci¨®n. El alcohol y alg¨²n que otro incidente. Cientos de miles de espa?oles salieron ayer a las calles de las principales ciudades a animar a la selecci¨®n y, cuando el ¨¢rbitro pit¨® el final del partido, a celebrar la hist¨®rica victoria.
Alrededor de 65.000 personas atestaron la plaza de Col¨®n, de Madrid, centro neur¨¢lgico de los aficionados durante toda la Eurocopa por arte de la cadena Cuatro. La euforia empuj¨® a varios grupos de seguidores a cortar la Castellana tras el partido. La polic¨ªa inform¨® de que 90 personas hab¨ªan sido atendidas por el Samur y 14 trasladadas a distintos hospitales hasta la medianoche, la mayor¨ªa v¨ªctimas de mareos, heridas y contusiones leves. Entre ellas, s¨®lo una sufri¨® un traumatismo craneoencef¨¢lico grave.
"Es la mejor manera de compartir la ilusi¨®n", dec¨ªa un hombre con su hijo
En Valencia se anim¨® a Villa, gran ausente de la final e ¨ªdolo de Mestalla
Espa?a, en la Eurocopa |
Torres marc¨® en la final |
Revive el partido ante Alemania |
"A las cinco, donde siempre, en Col¨®n", rezaba el mensaje lanzado desde el messenger de Beatriz a sus amigas. Las cinco adolescentes de 16 a?os, ataviadas con los colores de la selecci¨®n, eran una mota entre los millares de j¨®venes que se hab¨ªan congregado en Col¨®n desde primeras horas de la tarde. La mayor¨ªa de los asistentes eran j¨®venes como ellas, pero tambi¨¦n hab¨ªa adultos. Miguel Herance, 40 a?os, no quiso que su hijo, Julio, de cinco, se perdiera "un hecho hist¨®rico": "?sta es la mejor manera de compartir la ilusi¨®n, m¨¢s all¨¢ de nacionalismos ni historias".
- Pa¨ªs Vasco. Cerca de un millar de personas celebraron el triunfo en la plaza de Moyua, de Bilbao. "?No estamos todos, falta el lehendakari!", gritaron algunos.
Mucho antes, en el minuto 14 del partido, la localidad vizca¨ªna de Ermua vibr¨®. Ra¨²l Gonz¨¢lez, un camarero malague?o agit¨® con fuerza la bandera espa?ola y grit¨® "???Uyyyyyy!!!" Llevaba la camiseta de la selecci¨®n, pa?uelo rojigualdo escondiendo la melena. En el m¨®vil, la ense?a nacional protegiendo la pantalla. La selecci¨®n hab¨ªa llegado por primera vez con peligro. Antes los ermuarras hab¨ªan te?ido de rojo la plaza de San Pelayo con sus camisetas. En el centro, una pantalla gigante. Unas 1.000 personas secundaron el llamamiento del alcalde, el socialista Carlos Totorika. "?Podemos!", acababa el bando.
La camiseta de la Escuela de F¨²tbol de Ermua CD (roja), la de los donantes de sangre de Elorrio (roja tambi¨¦n), la bandera de Vietnam (roja con la estrella amarilla), la de la comparsa del pueblo y hasta el toro de Osborne se hizo un sitio en un pueblo de 16.200 habitantes. Silvia, Jone y Tania lo ten¨ªan claro. A sus 11 a?os, hab¨ªan empleado parte del d¨ªa en hacer una minipancarta con un solo lema: "?Espa?a va a ganar!"
-?Est¨¢is seguras?
-Es lo que va a pasar.
Las tres saltaron entre gritos cuando Torres col¨® el bal¨®n. En Euskadi pr¨¢cticamente s¨®lo se instal¨® otra gran pantalla. Lo hizo el restaurante alem¨¢n Ein Prosit de Bilbao. Unas 600 personas, algunos alemanes, acudieron a su llamada.
- Catalu?a. En Barcelona, Las Ramblas y Canaletes se convirtieron en el epicentro de la espont¨¢nea celebraci¨®n de miles de aficionados catalanes.
El Ayuntamiento de Barcelona decidi¨® no habilitar pantallas gigantes para la final y los aficionados, despu¨¦s de ver el partido en casa o en algunos de los bares y cines en los que se congregaron para presenciar el segundo t¨ªtulo espa?ol en la historia de la Eurocopa, se echaron a la calle para festejarlo. La Guardia Urbana cort¨® el tr¨¢fico en Las Ramblas y tambi¨¦n en la Plaza de Espa?a, donde se produjeron algunos incidentes. Tanto all¨ª como en las calles adyacentes se dejaron o¨ªr las bocinas de los coches y los c¨¢nticos de muchos aficionados, la mayor¨ªa de ellos enfundados en la camiseta roja de la selecci¨®n.
"Es rid¨ªculo que no hayan preparado nada", se reprochaba al Ayuntamiento desde algunos foros de Internet. Los bares tiraban de reclamos -"Los espa?oles tienen sitio" o "Anima a la Roja"- y muchos veh¨ªculos luc¨ªan banderas espa?olas. En varias poblaciones colindantes se cit¨® a la gente en carpas, como en Barber¨¤ del Vall¨¨s; cines, como en Sant Cugat, escuelas o espacios p¨²blicos como en Sant Adri¨¤ del Bes¨®s.
- Andaluc¨ªa. Los m¨¢s de 40 grados que se alcanzaron en Sevilla, C¨®rdoba y Ja¨¦n no fueron la causa de la desolaci¨®n de las calles andaluzas. La raz¨®n, el partido. Las playas se vaciaron y hasta la feria de Algeciras (C¨¢diz) tuvo que esperar al final del encuentro para recuperar visitantes. Numerosos ayuntamientos instalaron pantallas. Una hora antes ya se encontraban casi llenos los recintos, que atrajeron a miles de personas. Los gobiernos locales establecieron planes especiales de vigilancia, limpieza y tr¨¢fico.
En Granada la fiesta reuni¨® a 30.000 personas.
- Galicia. En Galicia todo el mundo recuerda que Luis Aragon¨¦s se comprometi¨® a hacer el Camino de Santiago si Espa?a ganaba. Ayer en algunas ciudades se agotaron las camisetas de la selecci¨®n, que los hinchas lucieron todo el d¨ªa. En Santiago, los peregrinos pasearon sin rumbo fijo por la ciudad esperando el partido. El Ayuntamiento hab¨ªa instalado una pantalla gigante en la Praza Roxa y hab¨ªa desviado el tr¨¢fico. En muchos balcones de toda la comunidad, carteles con el lema de "?Podemos!" y m¨¢s banderas rojigualdas que en el d¨ªa del patr¨®n.
Muchos pueblos, como el orensano de Mel¨®n y el lucense de Vilalba, y todas las ciudades salvo Lugo y Ferrol (donde el partido se vio en la intimidad de bares, clubes y domicilios) tuvieron pantallas gigantes. La viguesa plaza de Estrella y la pontevedresa de A Ferreir¨ªa fueron los escenarios m¨¢s concurridos, tanto como el barrio de San Pedro de Visma, en A Coru?a, de fiestas patronales. Ourense escogi¨® la elegancia y solemnidad. El partido: el ayuntamiento organiz¨® la retransmisi¨®n en el Teatro Principal.
- Valencia. En Valencia, el p¨²blico m¨¢s joven y con m¨¢s ganas de fiesta abarrotaba los alrededores de Mestalla. Pronto empezaron los c¨¢nticos: "?Yo soy espa?ol, espa?ol, espa?ol!" o "?Alem¨¢n el que no bote". Llegaban ataviados de banderas, al viento, a modo de capa o de pareo, vestidos de rojo y pintados los brazos, las piernas, y hasta el torso pintados con los colores de la bandera espa?ola. Y cargados con litros de cerveza para el botell¨®n menos problem¨¢tico de los ¨²ltimos a?os.
Antes del partido hubo ruido. Mucho ruido. Hubo silbidos para Alemania. Y gritos de apoyo para el gran ausente e ¨ªdolo de Mestalla "?Illa, illa, Villa, maravilla!". Y con Torres, volvieron los c¨¢nticos. Y la p¨®lvora. Que se dej¨® oler y sentir como en las Fallas.
Esta informaci¨®n ha sido elaborada por Aitor Guenaga, Jordi Quixano, Arcadio Silvosa y Nadia Tronchoni.



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