Los editores catalanes impulsan un potente foro para recuperar imagen

La pol¨¦mica de la Feria del Libro de Francfort, donde la pasada edici¨®n Catalu?a fue la invitada de honor, el anuncio de la suspensi¨®n del Sal¨®n del Libro de Barcelona y la sensaci¨®n de que la ciudad va perdiendo porcentaje y aura (que no las cifras absolutas) de la capitalidad editorial espa?ola son suficientes se?ales de alarma como para que el sector reaccione y emprenda medidas para reforzar su papel social y econ¨®mico.

As¨ª lo entiende el Gremio de Editores de Catalu?a, que como primera medida ultima el F¨®rum Atl¨¢ntida, un paquete de seminarios y conferencias con grandes figuras nacionales e internacionales del sector que tendr¨¢ lugar a principios de noviembre en Barcelona, a rebufo de la Nit de l'Edici¨®, su encuentro profesional.

Un presupuesto cercano a los 300.000 euros, un comit¨¦ organizador de lujo -con los editores Josep Maria Boixareu (Marcombo), Daniel Fern¨¢ndez (Edhasa), Jorge Herralde (Anagrama), Claudio L¨®pez Lamadrid (Mondadori), Carlos Rev¨¦s (Planeta) y Jaume Vallcorba (Quaderns Crema / Acantilado)- y una baraja de nombres de post¨ªn como posibles participantes -Alberto Manguel, Peter Mayer, Roberto Calasso, Francisco Rico...- son los argumentos con los que se pretende abordar la primera edici¨®n, que tendr¨ªa como eje la aportaci¨®n del libro a la cultura occidental.

"Si conservamos a¨²n cierto peso en Espa?a es porque hemos mantenido el cluster [grupo de empresas del mismo sector que crean sinergias entre ellas] editorial, pero no ha habido una pol¨ªtica de conservaci¨®n por parte de las instituciones de esa hegemon¨ªa que tuvimos claramente hasta la d¨¦cada de 1970", apunta Antoni Comas, presidente del gremio. El error de estrategia de la Generalitat habr¨ªa sido, en su opini¨®n, el desequilibrio entre la protecci¨®n a la edici¨®n en catal¨¢n frente al resto. "No se trata de pedir un soporte gen¨¦rico para la edici¨®n en castellano en Catalu?a, pero s¨ª de no dejar tan de lado la edici¨®n en esa lengua porque, en el fondo, es lo que da el swing y la internacionalidad a la edici¨®n catalana: aqu¨ª se publican 8.000 t¨ªtulos en catal¨¢n, mientras que en castellano se hacen 30.000", expone. En esa l¨ªnea, Comas recuerda que, como sector, "ya hemos tenido que ir directamente a hacer de lobby a Madrid porque aqu¨ª en Catalu?a no sirve de nada", y remacha: "Tengo pendiente desde hace un a?o una entrevista con el consejero de Cultura".

Comas, como presidente del sector, admite tambi¨¦n la autocr¨ªtica, que centra en el fracaso del Sal¨®n del Libro de Barcelona: "No se pod¨ªa mantener un evento en el que no estaban todos los editores y en el que se perd¨ªa dinero porque no cerramos bien filas en el sector con ofertas atractivas". Sobre la presencia catalana en la feria de Francfort, mantiene que fue "una oportunidad perdida: se organiz¨® ignorando el sector editorial y mostrando s¨®lo una parte de lo que somos, cuando nuestro ingl¨¦s es el castellano".