Renace la ciudad perdida de Sech¨ªn
Arque¨®logos alemanes cifran en 5.500 a?os la antig¨¹edad de las ruinas peruanas
El hallazgo no es del todo nuevo, pero su dataci¨®n le concede nueva relevancia. Seg¨²n sus descubridores, la edificaci¨®n m¨¢s antigua de Am¨¦rica tiene 5.500 a?os y est¨¢ en el valle del Casma, al norte de Per¨².
El templo m¨¢s antiguo est¨¢ cubierto con un 'graffiti' prehist¨®rico
Un equipo alem¨¢n de arque¨®logos lleva 16 a?os excavando en Sech¨ªn Bajo por encargo de la Universidad Libre de Berl¨ªn (FU). Su director, Peter Fuchs, explic¨® ayer en una rueda de prensa el resultado de sus labores. Junto a una construcci¨®n piramidal de Sech¨ªn Bajo, que data del segundo milenio antes de Cristo y cuya base abarca 125 por 185 metros, los berlineses hallaron un edificio de piedra y adobe mucho m¨¢s antiguo, que ofrece nuevas pistas sobre la procedencia de algunos de los s¨ªmbolos culturales que pervivieron en todo Per¨² hasta la llegada de los espa?oles.
Su uso era, seguramente, ritual o religioso. Tras usarlo durante siglos, sus desconocidos moradores lo abandonaron, sellaron los accesos y destruyeron las escaleras. Despu¨¦s, cubrieron los muros exteriores con una suerte de graffiti prehist¨®rico, unas 130 figuras de seres mitol¨®gicos, animales y m¨¢scaras. Seg¨²n relat¨® a este peri¨®dico la arque¨®loga Renate Patzschke, aquellos hombres renunciaron al edificio hace unos 3.500 a?os y lo sepultaron con ceremonia, "igual que se entierra un cad¨¢ver".
Acompa?ado del embajador de Per¨² en Alemania, Federico Kauffmann-Doig, Fuchs expuso en el Instituto Latinoamericano de la Universidad Libre de Berl¨ªn, donde es docente, la importancia del templo como posible cuna de una concepci¨®n del mundo que perdur¨® durante milenios. Su colega Renate Patzschke se refer¨ªa a los relieves ceremoniales como origen arcaico de una iconograf¨ªa asumida incluso por los incas, cuya cultura floreci¨® casi 5.000 a?os m¨¢s tarde. Igual que los cristianos reconocen el s¨ªmbolo de la cruz a trav¨¦s de los siglos y de los dr¨¢sticos cambios sociales y culturales de los ¨²ltimos 20 siglos, algunas figuras de las halladas en Sech¨ªn Bajo sobrevivieron al pueblo que las grav¨® en las paredes hace 5.500 a?os. As¨ª, por ejemplo, seres fabulosos mezcla de caim¨¢n, felino y ar¨¢cnido. Otro motivo repetido es las serpientes. Se desconoce su significado o si se mantuvo durante tanto tiempo.
El edificio consta de una serie de patios contiguos. El primero es el mayor y el m¨¢s bajo, seguramente de acceso p¨²blico. Los relieves en sus muros muestran personas con los brazos abiertos que cumplen una procesi¨®n ritual o quiz¨¢ bailan. Agitan o sostienen un objeto alargado en la mano derecha que podr¨ªa ser una maza. En la izquierda portan algo redondo con cabeza de ofidio. Los dos ¨²ltimos patios son menores y se elevan seis metros m¨¢s que los primeros. Estaban reservados seguramente a un grupo selecto. Patzschke cuenta que, de momento, no se han encontrado muchos utensilios en el interior del complejo.
A Patzschke, due?a de una veterana empresa de prospecciones arqueol¨®gicas que colabora con la Universidad, se le notaba al tel¨¦fono la emoci¨®n al describir el momento en que "tras semanas de retirar cientos de kilos de escombros surge de pronto una pared de adobe y despu¨¦s descubres que tiene nichos, que tiene esos estupendos relieves...".
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