Una OT para jud¨ªos piadosos

La Operaci¨®n Triunfo israel¨ª en versi¨®n fundamentalista jud¨ªa est¨¢ vetada a las mujeres. Sus voces sobre un escenario ser¨ªan pecaminosas. Es una de las grandes diferencias de Hakol habaa (La voz que viene) con el formato original. Pueden cantar lo que quieran, pero dentro de unos l¨ªmites estrictos. En una de las primeras rondas descartaron a un participante que se present¨® con un tema de Celine Dion porque en el concurso s¨®lo se puede cantar a Dios. Esta OT, que no se emite por televisi¨®n -aparato vetado en los hogares jud¨ªos ortodoxos-, es Kosher. Cumple a rajatabla la ley religiosa hebrea.

"Cierto, casi nadie tiene televisi¨®n, pero en cada casa existe un ordenador", explica Menajem Toker, creador de la OT para jud¨ªos piadosos como ¨¦l. Un concurso grabado en CDs a la venta en tiendas de m¨²sica religiosa. Unos 60.000 israel¨ªes vieron su estreno. "Las primeras fases no se han emitido, ni se emitir¨¢n, porque muchos desafinaban y no nos queremos mofar de ellos", cuenta Toker. Su religi¨®n proh¨ªbe criticar o cotillear.

Las actuaciones se graban en un humilde estudio ante unos jueces ben¨¦volos. Cinco hombres tocados con kip¨¢s. S¨®lo hacen cr¨ªticas constructivas. "?Por qu¨¦ querr¨ªa insultar a un participante? Lo que hacemos es una mitzva [un mandamiento], damos una oportunidad a j¨®venes con talento", declar¨® uno de los jueces, Ken Burgess, al diario Haaretz. Este brit¨¢nico fue compositor de rock en los sesenta, antes de convertirse al juda¨ªsmo y mudarse a Israel.

Los diez finalistas, de entre 12 y 35 a?os, son estudiantes de yeshivas, centros donde se estudian los textos religiosos. La gran final, ser¨¢ en Hanuka (el 22 de diciembre) en un sal¨®n de Bnei Brak, ¨²nica ciudad israel¨ª donde casi todos los vecinos son ortodoxos. El p¨²blico elegir¨¢ al ganador, que grabar¨¢ un disco. Pueden votar por SMS -se han apuntado con frenes¨ª al m¨®vil desde que los rabinos los bendijeron- correo electr¨®nico o fax.

"El ganador ser¨¢ famos¨ªsimo en el mundo ortodoxo jud¨ªo, le contratar¨¢n para cantar en bodas y visitar enfermos aqu¨ª en Israel, en EE UU y Reino Unido", asegura Toker. ?C¨®mo est¨¢ tan seguro? "Porque somos clientes muy leales". Si el rabino da luz verde, los ortodoxos le siguen como corderos. Ya pas¨® con la Coca Cola y con Zara. Mientras, los laicos israel¨ªes ya disfrutan de la sexta temporada de la otra OT.