Montilla sit¨²a al hist¨®rico Isidre Molas en la presidencia del partido

Jos¨¦ Montilla ha encontrado la p¨®cima para mantener intactos en la c¨²pula del partido los siempre dif¨ªciles equilibrios entre las dos almas del PSC, la m¨¢s catalanista y la m¨¢s cercana a la tradici¨®n obrera. Isidre Molas, un veterano luchador antifranquista y abanderado de las posiciones m¨¢s catalanistas del partido, ser¨¢ el nuevo presidente del PSC, cargo que estaba vacante desde la precipitada marcha de Pasqual Maragall el a?o pasado.

Molas, que recibi¨® la oferta de Montilla ayer por la tarde, ser¨¢ la primera figura institucional del partido, en el que Montilla continuar¨¢ ejerciendo como primer secretario, m¨¢ximo cargo ejecutivo. Manuela de Madre, hist¨®rica alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, se mantendr¨¢ como vicepresidenta.

A Molas le incomoda que se diga que su nombramiento obedece al intento de evitar que los m¨¢s catalanistas queden borrados de la c¨²pula. "No he cre¨ªdo nunca en los equilibrios, aunque es cierto que en la vida es mejor no ser un desequilibrado", dijo poco despu¨¦s de ser propuesto. Y a?adi¨®: "Soy catalanista y socialista de la forma m¨¢s natural".

Procedente del Frente Obrero de Catalu?a (FOC), Molas coincidi¨® all¨ª con Pasqual Maragall, Alfonso Carlos Com¨ªn y Miquel Roca. Desde 2000 es senador por la Entesa Catalana de Progr¨¦s. Manuela de Madre lo present¨® ayer como "la voz propia del PSC en el Senado", como gesto hacia los que piden grupo propio tambi¨¦n en el Congreso.

Hasta ¨²ltima hora de la noche Jos¨¦ Montilla estuvo tejiendo la nueva ejecutiva del PSC con el complicado reto de integrar a las diferentes sensibilidades del partido, mantener la paridad de sexos y aumentar el peso de provincias, como Tarragona y Lleida, donde el PSC ha mejorado notablemente sus resultados electorales.

Varias fuentes daban por hecho que el sector af¨ªn a Maragall perder¨ªa algunos de sus representantes. En la ejecutiva saliente los m¨¢s firmes defensores del maragallismo han sido su hermano y consejero de Educaci¨®n, Ernest Maragall, y la consejera de Justicia, Montserrat Tura. Pero tambi¨¦n los ha habido en segunda fila, como el ex alcalde de Manresa Jordi Valls, cuya continuidad pend¨ªa de un hilo.

Se daba por segura la entrada de los alcaldes de Tarragona, Josep F¨¨lix Ballesteros, y de Lleida, ?ngel Ros. Tambi¨¦n podr¨ªan entrar diputadas como Meritxell Batet y Roc¨ªo Mart¨ªnez, o Albert Aixal¨¤, presidente de la Fundaci¨®n Campalans.