El 'cambiazo' en inmigraci¨®n
La pol¨ªtica de retorno y la directiva europea materializan el giro ante los extranjeros
Desde que tom¨® posesi¨®n del Ministerio de Trabajo e Inmigraci¨®n, Celestino Corbacho ha aportado unas cuantas "reflexiones" a la pol¨ªtica desarrollada por su antecesor, Jes¨²s Caldera. Entre ellas, excluir a padres y suegros de la reagrupaci¨®n familiar y ofrecer incentivos a los inmigrantes para que vuelvan a sus pa¨ªses.
El titular de Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, ha a?adido a los anuncios de Corbacho su intenci¨®n de aumentar de 40 a 60 d¨ªas el plazo de retenci¨®n de los extranjeros que entran en Espa?a de forma irregular. Y el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, ha respaldado una directiva europea de retorno que ha generado una fuerte pol¨¦mica por su dureza con los sin papeles.
"Corbacho da a entender que los inmigrantes tenemos que ver con la crisis"
Todas estas acciones parecen evidenciar un cambio radical en la pol¨ªtica de inmigraci¨®n llevada a cabo por el Gobierno durante la ¨²ltima legislatura. En aquellos cuatro a?os, los empresarios importaron a 727.821 extranjeros con contrato laboral, a los cuales hay que sumar otros 600.000 que los mismos patronos regularizaron en el proceso de normalizaci¨®n promovido por el Ejecutivo en 2005.
A pesar de estas pruebas, ning¨²n miembro del Gobierno admite que se est¨¢ llevando a cabo un cambio en la pol¨ªtica de inmigraci¨®n. No lo admite el ministro Corbacho ("El primer d¨ªa ya le expres¨¦ a Zapatero mi voluntad de continuar la excelente labor llevada a cabo hasta ese momento"), no lo admite el ex ministro Caldera ("La f¨®rmula sigue siendo la misma: m¨¢xima firmeza en la defensa de la legalidad y m¨¢xima firmeza en la integraci¨®n"), y tampoco lo admite el eslab¨®n entre ambos: la secretaria de Estado de Inmigraci¨®n y Emigraci¨®n, Consuelo Rum¨ª: "No hay una nueva pol¨ªtica. Estamos desarrollando una pol¨ªtica flexible, capaz de adaptarse a las circunstancias, que ¨¦sas s¨ª son nuevas", explica.
Esa pol¨ªtica "flexible" se apoya en cuatro brazos: vinculaci¨®n con el mercado laboral, lucha contra la inmigraci¨®n ilegal, integraci¨®n de los extranjeros y relaci¨®n con la cooperaci¨®n al desarrollo. ?Cu¨¢l de esas patas cojea ahora? El mercado laboral, que comienza a ser diezmado por "la crisis m¨¢s compleja de la historia", en palabras del vicepresidente econ¨®mico, Pedro Solbes.
La madre de todas las crisis ha volcado a los responsables de inmigraci¨®n en "el reajuste del mercado interno". Dicho de otro modo: "El objetivo es ordenar dentro antes de contratar fuera": recolocar a los trabajadores (espa?oles y extranjeros) que se vayan sumando a las listas de parados. Parad¨®jicamente, eso no supondr¨¢ la suspensi¨®n de las contrataciones en origen, "porque", se?ala Rum¨ª, "seguir¨¢ habiendo sectores que necesiten mano de obra especializada".
Pero no todas las iniciativas del Gobierno caben en la "f¨®rmula flexible" dise?ada durante la pasada legislatura. Medidas como la exclusi¨®n de los mayores de la reagrupaci¨®n familiar ("El Estado de bienestar no se puede estirar hasta el infinito", ha declarado Corbacho) o el apoyo a la segregaci¨®n de alumnos inmigrantes en Catalu?a ("Una iniciativa valiente", la ha calificado el ministro) s¨®lo parecen justificables si el Gobierno est¨¢ yendo m¨¢s all¨¢ de la "f¨®rmula flexible" y se dispone a abordar un cambio de filosof¨ªa frente a la inmigraci¨®n.
Corbacho suele apoyar sus iniciativas con profusi¨®n de ejemplos extra¨ªdos de su experiencia como alcalde. Pero, como se?ala el portavoz de la asociaci¨®n hispano ecuatoriana Rumi?ahui, Ra¨²l Jim¨¦nez, "las pol¨ªticas estatales y europeas van mucho m¨¢s all¨¢ de las pr¨¢cticas de L'Hospitalet". La secretaria de migraciones de UGT, Almudena Fontecha, coincide en el an¨¢lisis: "Esto no es una escalera de vecinos. El ministro se dar¨¢ pronto cuenta de que determinadas cosas no son posibles". Y el secretario confederal de migraciones de CC OO, Julio Ruiz, apostilla: "Propuestas como la eliminaci¨®n de la reagrupaci¨®n familiar a los ascendientes pueden rozar la vulneraci¨®n de derechos". Con todo, tanto los representantes de UGT y CC OO como el portavoz de Rumi?ahui y el presidente de la asociaci¨®n marroqu¨ª ATIME, Kamal Rahmouni, no se atreven a afirmar que est¨¢ en marcha un cambio de pol¨ªtica. Por el momento, s¨®lo se arriesgan a certificar un cambio de discurso.
Quien no tiene dudas al respecto es el portavoz parlamentario del PP en Inmigraci¨®n, Rafael Hernando. "Han hecho un cambio radical y me parece absurdo que no lo reconozcan", se indigna. "Han pasado del papeles para todos de Caldera al maletas para todos de Corbacho".
En su repaso a los anuncios (y a los hechos) del Ejecutivo en sus primeros 100 d¨ªas, Hernando incluye el incremento del plazo m¨¢ximo de retenci¨®n de los extranjeros acusados de entrar en Espa?a irregularmente. Pero esa decisi¨®n no puede ser considerada una sorpresa, porque figuraba en el programa electoral del PSOE.
Tambi¨¦n alude Hernando al respaldo socialista a la directiva europea de retorno, un asunto que ha motivado duras cr¨ªticas al Gobierno. En p¨²blico, los socialistas la presentan como el primer paso hacia una pol¨ªtica com¨²n de la UE y explican que no influir¨¢ en la legislaci¨®n espa?ola. Pero, en privado, algunos hilvanan una teor¨ªa distinta: la situaci¨®n geopol¨ªtica de Espa?a es muy comprometida, y mal podr¨ªa pedir ayuda a sus socios europeos, casi todos conservadores, frente a crisis como la de 2006, cuando miles de inmigrantes llegaron en cayucos a Canarias, sin haber apoyado antes la pol¨¦mica directiva.
Aparte de esas dos cuestiones -el aumento del plazo de retenci¨®n y el apoyo a la directiva de retorno-, que poco o nada tienen que ver con el ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n, el discurso de Celestino Corbacho preocupa a los sindicatos y a las organizaciones de inmigrantes. "Est¨¢ dando a entender que los inmigrantes tenemos algo que ver con la crisis", se?alan el marroqu¨ª Rahmouni y el ecuatoriano Jim¨¦nez. Su temor es que esas palabras alimenten la xenofobia, algo que tendr¨ªa dif¨ªcil reparaci¨®n.
Como advierte un personaje de Sciascia, "las palabras no son como los perros, a los que se les puede silbar para que vuelvan".
La paradoja del paro
La crisis econ¨®mica ha comenzado a alimentar las colas en las oficinas del paro. Una primera impresi¨®n podr¨ªa hacer creer que son los inmigrantes los primeros afectados por la p¨¦rdida de empleos. Pero, curiosamente, sucede justo al contrario. La mayor capacidad de adaptaci¨®n para cambiar de sector o de provincia les otorga m¨¢s capacidad de supervivencia en los malos tiempos. Un inmigrante expulsado por la crisis de la construcci¨®n en Valencia puede reconvertirse r¨¢pidamente en jardinero en C¨¢diz, algo impensable en el caso de un espa?ol.
El n¨²mero de desempleados extranjeros ha aumentado hasta 184.756 el pasado junio. Pero esa cifra es casi irrelevante frente al total nacional de parados: 2.390.424.
Adem¨¢s, la cifra de inmigrantes afiliados a la Seguridad Social sigue creciendo, tras un ligero baj¨®n experimentado en 2007. El pasado junio sumaban 1.402.437 cotizantes.
Cinco alarmas
- Reagrupaci¨®n. Corbacho anuncia su intenci¨®n de excluir de la reagrupaci¨®n familiar a los padres y a los suegros de los inmigrantes
- Retorno. El ministro ofrece entrega de todo el paro a los inmigrantes que renuncien a sus permisos de residencia y de trabajo y vuelvan a sus pa¨ªses
- Educaci¨®n. Corbacho califica de "valiente" la iniciativa de la Generalitat para segregar del sistema escolar a los alumnos inmigrantes
- Internamiento. Rubalcaba anuncia la intenci¨®n del Gobierno de aumentar desde 40 a 60 d¨ªas el plazo m¨¢ximo de internamiento de quienes entren en Espa?a de forma irregular
- Europa. Los socialistas espa?oles apoyan en el Parlamento Europeo una directiva de retorno que permite a los Veintisiete internar a los sin papeles hasta 18 meses
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