Con los deberes bien hechos

El objetivo de esta obra es analizar los cambios en la financiaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola y en su sistema financiero. El libro se compone de cinco cap¨ªtulos: sistema financiero, dinero, sistema bancario, mercado de valores e inversi¨®n colectiva. En el primero, los autores nos presentan la estructura del sistema financiero, de sus instrumentos, junto con un an¨¢lisis de la financiaci¨®n de la econom¨ªa; el segundo se centra en el dinero, la pol¨ªtica monetaria, los agregados monetarios y los tipos de inter¨¦s. El tercero, que destaca por su inter¨¦s y singularidad, se dedica al sistema bancario, analizando su estructura, el negocio bancario, los resultados, la eficiencia de las instituciones y la internacionalizaci¨®n de las mismas. Los dos ¨²ltimos cap¨ªtulos estudian el mercado de valores y la inversi¨®n institucional.

Se trata de un libro que describe la situaci¨®n y evoluci¨®n del sistema financiero, complement¨¢ndola con un estudio comparativo con otros pa¨ªses y con un an¨¢lisis de perspectivas. De su lectura, destacar¨ªa la excelente presentaci¨®n de los temas, con conceptos claros y precisos, el rigor en el an¨¢lisis, cuya comprensi¨®n se facilita con el recurso a gr¨¢ficos y tablas y la originalidad de los s¨ªmbolos que ayudan al lector, al precisar en todos los temas si se trata de conceptos, estudio de la evoluci¨®n, an¨¢lisis comparativo o perspectivas del sistema financiero.

Es un libro oportuno y necesario por el momento que vive nuestro sistema financiero. Nos ayuda a entender y explicar su dinamismo, saneamiento y eficiencia en un entorno de crisis de sistemas bancarios que eran hasta ahora un modelo de referencia.

Esta favorable situaci¨®n de nuestro sistema financiero viene explicada, en primer lugar por el trabajo del regulador, en cuanto que ha incentivado el rigor en la evaluaci¨®n de riesgos, la exigencia en las dotaciones y la eficiencia; en segundo lugar, por la singularidad de los instrumentos de financiaci¨®n, el sistema hipotecario, su informaci¨®n y seguridad jur¨ªdica, as¨ª como por el marco del cr¨¦dito al consumo y el limitado recurso a operaciones de ingenier¨ªa financiera, de tal forma que la falta de transparencia que se ha dado en otros sistemas acerca de los riesgos que incorporan los instrumentos no se ha dado en Espa?a; en tercer lugar, la apertura y liberalizaci¨®n del sistema bancario, anticip¨¢ndose a Europa continental, ha sido otro factor relevante, que ha conducido a dosis crecientes de competencia en el mercado dom¨¦stico, donde lo singular ha sido la labor de las cajas de ahorros en sus respectivos espacios, con crecientes cuotas de mercado, incentivando as¨ª la eficiencia del sistema, cuya mejora se refleja en la ca¨ªda de m¨¢rgenes y en la mejora del ratio de eficiencia; en cuarto lugar, la consolidaci¨®n sectorial y el proceso de internacionalizaci¨®n llevado a cabo en la banca, pendiente en las cajas de ahorro, que nos han permitido posicionarnos en los espacios internacionales (d¨®lar, euro, libra), en Iberoam¨¦rica y teniendo Asia como futuro.

La situaci¨®n actual de nuestro sistema bancario nos permite estar en una buena posici¨®n ante las tensiones de liquidez, que ha hecho que los bancos y cajas respondan con una salida a los mercados internacionales, a las facilidades del BCE, al tiempo que se produce una presi¨®n en la captaci¨®n del pasivo que pudiera afectar a sus precios y cuentas de resultados. La crisis que afecta a otros sistemas, dado nuestro nivel de eficiencia y saneamiento, nos permite una prudente espera, aunque sin duda de perdurar la crisis en el sistema real y el crecimiento de la morosidad tendr¨¢ consecuencias sobre el sistema financiero. Es de esperar que en un pr¨®ximo trabajo que dirijan Ontiveros y Valero sobre el sistema financiero analicen la relevancia de las variables que explican la eficiencia de nuestras instituciones, tanto en el sistema bancario como en la industria de los mercados de valores (BME), el proceso de consolidaci¨®n e internacionalizaci¨®n de la banca y el que cabe esperar en las cajas y la respuesta de las entidades a la crisis de liquidez y a los problemas de solvencia, que, en algunos casos, pudieran surgir de prolongarse la crisis.

Uno debe recordar que la internacionalizaci¨®n de nuestras instituciones, buscando espacios favorables para hacer negocios, ha favorecido tambi¨¦n la de nuestras empresas, y planteo como simple conjetura que el proceso se ha visto incentivado por las rigideces en nuestro mercado laboral, que han incentivado el cambio tecnol¨®gico y el desarrollo de nuevos negocios, y por la presi¨®n competitiva de las cajas de ahorro, que han incentivado la mejora de eficiencia en el sistema y por las capacidades empresariales de una generaci¨®n de bancarios y banqueros, en bancos y cajas, que han posibilitado la creaci¨®n y explotaci¨®n de innovaciones, la creaci¨®n de reputaci¨®n e imagen de marca, el desarrollo de modelos de negocio y la internacionalizaci¨®n de sus organizaciones.