Regantes y 'hippies' pugnan por el agua

Los regantes de la Alpujarra granadina y los hippies que viven en la zona desde hace d¨¦cadas est¨¢n enfrentados por el agua. La sequ¨ªa contribuye a que la cantidad de agua que tiene la acequia con la que se abastecen las tierras situadas entre los municipios de ?rgiva y C¨¢?ar disminuya.

El uso que de ella hacen los hippies provoca que la situaci¨®n sea "catastr¨®fica" en el campo, seg¨²n los agricultores de Las Barreras, un anejo de ?rgiva.

"?ste es mi domicilio. No he comprado la casa, pero es que no tengo dinero"

As¨ª al menos lo considera el presidente de la comisi¨®n de riegos de la Comunidad de Regantes de Las Barreras, Miguel Orellana, quien asegura que cerca de 500 hect¨¢reas de tierras dejan de recibir m¨¢s de 70.000 litros de agua a la hora por el uso "indebido" que hacen las personas asentadas en la zona, que son entre 200 y 300.

Los hippies niegan esa acusaci¨®n y defienden su derecho a consumir el agua del r¨ªo. Seg¨²n Orellana, son ¨¦stos los que la derivan al r¨ªo para hacer uso del agua del manantial cuya concesi¨®n es de los regantes. "La utilizamos para consumo propio: beber, lavar y regar el peque?o huerto que nos abastece de comida", manifiesta Javier, conocido como El Sirio, que vive en la comuna Beneficio desde hace m¨¢s de una d¨¦cada.

El problema es antiguo y cada verano los regantes acuden al paraje y cortan las gomas con las que los hippies toman el agua del r¨ªo, esa que dicen que "no es de nadie". Los agricultores sostienen que si gastaran s¨®lo el agua necesaria para consumo propio no habr¨ªa problema, pero que la utilizan para otras cosas. "La echan por el r¨ªo, mientras vemos secar nuestras tierras", arguyen los agricultores.

Olivos, naranjos y otros ¨¢rboles frutales se abastecen con el agua que ahora pierden, dicen los regantes, que aseguran que la sequ¨ªa ha reducido de 32 a 20 litros por segundo la capacidad de la acequia. Los hippies que viven en este paraje en invierno y verano, la mayor¨ªa extranjeros, achacan el problema a la escasez de lluvia porque argumentan que el uso que hacen es simplemente el necesario.

El pasado domingo, seis agentes de la Guardia Civil acompa?aron a los regantes que acudieron a cortar las gomas enganchadas al r¨ªo. "Habr¨¢ que volver a ponerlas porque no nos vamos a quedar sin agua para lavar", comenta Javier, quien est¨¢ "fastidiado" por los 40 o 50 euros que tiene que gastar de nuevo para volver a utilizar el agua del r¨ªo.

"Tengo dos hijos de once y siete a?os a los que no voy a dejar sin agua", dice. "?ste es mi domicilio. No he comprado la casa, pero es que no tengo dinero. ?Qu¨¦ voy a hacer?", agrega Javier. Como ¨¦l, unas 60 familias viven en este paraje, ubicado en el Parque Natural de Sierra Nevada, en furgonetas, tiendas de campa?a o casas hechas con barro y madera.

"El problema es que el agua no la pueden coger", se quejan los regantes, que han solicitado una reuni¨®n con el subdelegado del Gobierno en Granada, Antonio Cruz. Si no hay pronto una soluci¨®n, los agricultores prev¨¦n iniciar acciones judiciales contra la Administraci¨®n.

Por su parte, los miembros de la comuna mantienen que "el agua que est¨¢ en la naturaleza no es propiedad de nadie". As¨ª lo cree Vicente, un belga que explica su versi¨®n mientras limpia los platos en un peque?o fregadero instalado en Beneficio.

Tal y como est¨¢ la situaci¨®n, puede que todo desemboque en un cruce de denuncias. Algunos de los hippies no est¨¢n conformes con el modo de actuar de los regantes, al cortar las gomas, y ¨¦stos no pueden, seg¨²n manifiestan, soportar m¨¢s el uso "indebido" que hacen las personas asentadas en Beneficio del agua que necesitan sus ¨¢rboles para vivir.