La Caixa, a por las empresas
La entidad busca equilibrar su cartera crediticia, copada por el riesgo hipotecario
La Caixa, tercera entidad financiera espa?ola por detr¨¢s de Santander y BBVA, alardea a menudo del liderazgo que ostenta en la banca minorista, que ha ido esculpiendo en paralelo a la conformaci¨®n de un conglomerado industrial y con creciente vocaci¨®n financiera, hoy encarnado por Criteria. Sin embargo, la entidad arrastra puntos flacos en su actividad bancaria, ¨¢reas de negocio donde el liderazgo le queda lejos, como banca de empresas, banca corporativa, banca personal y, hasta ahora, banca privada.
Colorear esas zonas grises es uno de los objetivos que el presidente de La Caixa, Isidre Fain¨¦, se ha propuesto en el plan estrat¨¦gico vigente de la entidad, que tiene como horizonte temporal el a?o 2010. Fain¨¦ lleva tiempo repitiendo que, si la caja es hoy banco de referencia de las familias, ahora debe convertirse en referencia de las empresas. Y este a?o ha iniciado su ofensiva.
La Caixa pasa por aumentar un 35% el volumen de negocio de empresas en 2010
"Es un tiempo m¨¢s que oportuno para ello. El negocio de la inversi¨®n crediticia inmobiliaria bien sabido es que decrece y la banca de empresas puede relevar parte de ese negocio", subraya Juan Mar¨ªa Nin, director general de La Caixa. Precisa que "lo ideal" ser¨ªa equilibrar la cartera crediticia de modo que el riesgo hipotecario bajara a un 60% (hoy supera el 80%) y que el cr¨¦dito al consumo y a empresas subiera al 40%.
No es un prop¨®sito original, ni f¨¢cil. Todas las entidades financieras, y particularmente las cajas de ahorros, m¨¢s volcadas en las hipotecas, buscan ese mismo efecto sustituci¨®n. Pero los tiempos de tormenta financiera e inmobiliaria que descargan pillan a La Caixa fuerte en liquidez (m¨¢s de 23.000 millones de euros) y, novedad, con un dispositivo que hace un a?o no ten¨ªa.
"Para lograr avances significativos en la banca de empresas hace falta un canal de distribuci¨®n especializado, recursos humanos tambi¨¦n especializados, bien formados, y un circuito de riesgos igualmente especializado", a?ade Nin, con un largo bagaje personal en esta ¨¢rea. A la primera caja incorpor¨® para desarrollar esta pata de La Caixa a un estrecho colaborador anterior como Juan Antonio Alcaraz, tras su paso fugaz por la inmobiliaria Astroc.
El verano ha llegado justo cuando la caja acaba de culminar la apertura de 68 centros espec¨ªficos para dar servicio a empresas, que depender¨¢n de los distintos directores territoriales y estar¨¢n integrados a la red comercial global. De esos centros, 66 est¨¢n concebidos para atender a empresas que facturen entre 10 y 200 millones de euros. Las otras dos, en Barcelona y Madrid, son centros de banca corporativa para compa?¨ªas con unas ventas superiores.
La capilaridad de la red de casi 5.500 oficinas de La Caixa, que se mueve con soltura entre las grandes corporaciones, le hab¨ªa permitido hasta ahora trillar el campo de la microempresa y el mercado de la peque?a empresa con una facturaci¨®n cercana a los 10 millones. Pero cojea en la empresa mediana y grande.
La subred comercial espec¨ªfica para empresas de La Caixa queda a¨²n muy corta respecto de los 154 centros que, s¨®lo en Espa?a, tiene desplegados con el mismo fin el Santander. O a¨²n m¨¢s de las 217 el segundo gran banco, el BBVA. Sin embargo, la puesta en marcha acelerada de una estructura que no exist¨ªa en el pasado -se hab¨ªan barajado otras f¨®rmulas anteriormente- ha equiparado en poco tiempo (seis meses) la plataforma de La Caixa a la red comercial para empresas de otras entidades financieras como Banc Sabadell, cuyo fuerte son precisamente las empresas, Caja Madrid (con 66 centros) o Bancaja (45).
"En este medio a?o hemos culminado s¨®lo una primera fase. Nuestros 68 centros son un dispositivo m¨ªnimo, que nos permite dar cobertura a las empresas medianas y grandes en toda Espa?a, igual que nuestros competidores", se?ala Nin. De los m¨¢s de 500 empleados de la entidad que se dedican a la nueva aventura (66 directores de centro, 206 gestores de cuentas, 66 analistas comerciales de empresas, 61 especialistas y 132 personas de apoyo operativo).
?ste es el plan: La Caixa se ha propuesto llegar a 2010 habiendo incrementado un 35% el volumen de negocio con empresas para alcanzar los 124.560 millones. Y ganar 150.000 clientes empresariales y situarse en el medio mill¨®n.
Pese a lo reciente de la apuesta empresarial, el director general de la caja asegura que ya se empiezan a ver sus "primeros frutos". Seg¨²n los datos proporcionados por la entidad, en diciembre pasado, un 44,3% de las peque?as empresas espa?olas ten¨ªan alg¨²n tipo de relaci¨®n contractual con La Caixa (aunque s¨®lo fuera, por ejemplo, la contrataci¨®n de un producto financiero con ella). Seis meses m¨¢s tarde, esa cuota ha subido ligeramente al 45,3%. Los porcentajes tambi¨¦n han subido (del 57,9% al 59%) en estos ¨²ltimos seis meses en el caso de las empresas medianas y grandes. Parecen porcentajes muy elevados, pero los bancos l¨ªderes tienen cuotas en torno al 85%.
La mayor¨ªa de empresas operan con varias entidades, as¨ª que La Caixa busca tener m¨¢s clientes, y sobre todo hacer m¨¢s negocio con los que capta. Aunque la cuota en las microempresas sea m¨¢s baja, del 18%, un 53% de todos los cr¨¦ditos de ese tipo de empresas s¨®lo opera con la primera caja de ahorros. Esa llamada cuota CIRBE (Central de Informaci¨®n de Riesgos del Banco de Espa?a) es m¨¢s baja a¨²n en el caso de las peque?as empresas (22,9%, un punto m¨¢s que en diciembre) y de s¨®lo el 8,7% en el caso de las medianas y grandes (tres d¨¦cimas m¨¢s que hace medio a?o).
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