El premio a la constancia
En un callej¨®n que da a la calle de los Caballeros, una se?ora madura la para y le dispara: "?Est¨¢s tan guapa como siempre!". No es un piropo. Forma parte de la rutina cotidiana de la alcaldesa.
?ngeles Mu?oz Oriol charla brevemente con ella y sigue su camino. "Si no te gusta que te aborden en la calle, mejor que te dediques a otra cosa", dice la regidora de Marbella.
Ha iniciado la ma?ana con una sesi¨®n fotogr¨¢fica en el callej¨®n de la Virgen de los Dolores. Vestida con pantal¨®n y blusa blancos, radiante su cabello rubio, brillantes sus ojos verdes, dos peque?as perlas en las orejas. La sonrisa a punto. ?Qu¨¦ distinta a la oronda figura de su antecesor, Jes¨²s Gil, el hombre que machac¨® esta hermosa ciudad centenaria!
Sac¨® 15 matr¨ªculas en Medicina. Una noche estudiaba; la siguiente dorm¨ªa
"Mis padres tuvieron claro que deb¨ªamos prepararnos para nuestro porvenir"
-Fue una mala ¨¦poca. Como ciudadana, aquellos a?os me apenaron mucho. Pero hay que olvidar, recuperar la ciudad con una buena gesti¨®n...
La entrevista se celebra en su despacho, conocido como el Sal¨®n de los Frescos.
-Buen nombre para sus antecesores, Gil, Juli¨¢n Mu?oz...
Sonr¨ªe. El sal¨®n-despacho sobrecoge: dos enormes murales cubren sus paredes. Uno de ellos, un gigantesco aguilucho negro con el escudo de Felipe II, encabezado por la leyenda Servire Deo regnare est ("Reinar es servir a Dios"). El otro, un monumental Cristo crucificado. ?sta era la sala de Justicia del Ayuntamiento, cuando se construy¨® hace m¨¢s de 400 a?os. El aspecto es sombr¨ªo. No es extra?o que la alcaldesa s¨®lo lo utilice para reuniones.
-El diagn¨®stico era claro: hac¨ªa falta una cirug¨ªa radical. El tratamiento que estamos aplicando es el correcto y la receta sencilla: sentido com¨²n y buena gesti¨®n. Marbella se va a recuperar.
Habla con la precisi¨®n de un m¨¦dico, porque ?ngeles Mu?oz Oriol lo es. Lo quiso ser desde que estudiaba bachiller en el colegio de las Esclavas del Sagrado Coraz¨®n de Mar¨ªa. Nacida en C¨®rdoba, en 1960, en el seno de una familia "de clase media". El padre, industrial. La madre, ama de casa. Cuatro hermanas y ella la mayor. Tambi¨¦n la ¨²nica que complet¨® estudios universitarios.
-Mis padres siempre tuvieron claro que, aunque fu¨¦ramos mujeres, deb¨ªamos prepararnos para tener nuestro porvenir resuelto.
?Y c¨®mo lo resolvi¨® su hija ?ngeles! A los 23 a?os hab¨ªa terminado los seis a?os de la licenciatura en Medicina por la facultad de C¨®rdoba con 15 matr¨ªculas de honor. Adem¨¢s, hizo un curso como interna de Pediatr¨ªa en el hospital cordob¨¦s y prepar¨® la tesina. ?De d¨®nde sacaba el tiempo? Sencillo: una noche estudiaba y la siguiente dorm¨ªa. As¨ª, los seis a?os que dur¨® la carrera. ?Pastillas?
-No, nos hinch¨¢bamos de caf¨¦. Me vino muy bien, porque cuando aprob¨¦ MIR (M¨¦dico Interno Residente), me hart¨¦ a hacer guardias.
Quer¨ªa ser pediatra, pero esa especialidad ten¨ªa que cursarla en Canarias. Se qued¨® en M¨¢laga, para ser m¨¦dico de familia, en el hospital Carlos Haya. Como deb¨ªa sobrarle tiempo, "cuando hac¨ªa el R3", es decir, estaba en tercer a?o del MIR, ?iba y ven¨ªa todos los d¨ªas a C¨®rdoba, donde paralelamente preparaba la especialidad de m¨¦dico de empresa! El secreto lo encierra en una palabra: constancia.
Todo culmin¨® felizmente y a los 26 a?os ten¨ªa el t¨ªtulo, dos especialidades y una plaza de m¨¦dico de familia que gan¨® por oposici¨®n en el SAS (Servicio Andaluz de Salud) en San Pedro de Alc¨¢ntara (Marbella). Una ciudad que iba a cambiarle la vida.
Cuando llevaba tres a?os ejerciendo, se present¨® un se?or que se llamaba Lasse. Era sueco. Poco despu¨¦s, se convirti¨® en su marido y en el padre de sus dos hijos.
Cuatro a?os m¨¢s tarde, otro se?or se cruz¨® en su camino. El presidente del PP de Marbella, Alfonso Carlos Guti¨¦rrez de Rav¨¦.
-El SAS funcionaba mal. Hab¨ªa problemas con los horarios, con las recetas... No militaba en ning¨²n partido, pero decid¨ª hablar con la gente del PP de Marbella. Quer¨ªa aportar mi experiencia en salud.
De momento, la colocaron en las listas de las elecciones municipales por Benahav¨ªs, donde tambi¨¦n pasaba consulta. Fue elegida concejal. Era 1995, ten¨ªa 35 a?os y emprend¨ªa una nueva vida dedicada a la pol¨ªtica. Doce a?os despu¨¦s, ganaba la alcald¨ªa de Marbella. Entre medias, otro hombre, Javier Arenas, entonces ministro de Trabajo, que tir¨® de ella a Madrid. En 1997, la nombran directora general de Ordenaci¨®n de las Migraciones del Ministerio de Trabajo. ?Qu¨¦ sab¨ªa de los problemas de los inmigrantes?
-?Nada!
La respuesta surge espont¨¢nea. Y sincera. Poco com¨²n en los pol¨ªticos. Aplic¨® su palabra m¨¢gica: constancia.
-Hice lo de siempre, estudiar y trabajar. Me estudi¨¦ todas las leyes que uno pod¨ªa imaginar, todos los procedimientos.
Cuatro a?os despu¨¦s, era la ponente en el Congreso de los Diputados de la nueva ley de Inmigraci¨®n. ?C¨®mo juzga la pol¨ªtica migratoria de Zapatero? Mal. Dice que improvisaron. Fallaron en el planteamiento y en la pol¨ªtica que siguieron.
La vida en Madrid fue otro doctorado intenso. Secretaria ejecutiva de Asuntos Sociales del PP, diputada nacional durante ocho a?os, portavoz de inmigraci¨®n en el Congreso. Pero sobre todo, portavoz popular en el Ayuntamiento de Marbella desde 2003.
?Mereci¨® la pena abandonar la medicina?
-Lo que soy ahora, se lo debo a la medicina. Soy m¨¦dico porque me gusta escuchar al paciente. Diagnosticar, hacer el seguimiento, ver c¨®mo se recupera. Y sobre todo, el tratamiento. No son s¨®lo medicinas. Sino c¨®mo explicas las cosas, que tengan confianza en ti. Es como un alcalde, que tiene que generar confianza...
Fuera, frente a la fachada principal del Ayuntamiento, los primeros turistas ocupan las mesas esparcidas en la Plaza de Los Naranjos. En la churrer¨ªa de Ram¨®n, al ladito de la cofrad¨ªa del Santo Cristo del Buen Amor, un grupo de ingleses se atiborra de churros. Al lado, un abuelo hojea un peri¨®dico gratuito. Marbella parece que recupera el pulso.
"No es bueno eternizarte en el cargo"
Una buena gesti¨®n en Marbella. Un cuarto tropez¨®n de Javier Arenas en sus aspiraciones de presidir la Junta de Andaluc¨ªa. ??ngeles Mu?oz podr¨ªa ser la siguiente candidata del PP a la presidencia regional?
Adivina la pregunta. Corta antes de que se complete.
-No, no, no... No entra en mis aspiraciones. De ninguna manera.
Echa la moviola atr¨¢s: "Yo estaba en Madrid en 2002, cuando gobernaba mi partido. Era diputada, portavoz de inmigraci¨®n en el Congreso, secretaria ejecutiva del PP... Y no quise seguir all¨ª. Uno est¨¢ en pol¨ªtica para cambiar cosas, y en Marbella pod¨ªa hacerlo".
Lo hizo. Primero en la oposici¨®n. Cuatro a?os. Desde el pasado a?o, en la alcald¨ªa. Con un adversario en las filas socialistas de peso, Paulino Plata, ex consejero de Turismo. ?Pens¨® en alg¨²n momento que pod¨ªa perder?
-Lo primero que tiene que tener una persona que se presenta a un cargo, son ganas y una motivaci¨®n. Cuando vi que Plata no iba a poner el coraz¨®n en esto, supe que no podr¨ªa ganarme. Por mucho que presionara la maquinaria del PSOE.
Los socialistas est¨¢n saliendo de la UVI. Estrenan portavoz, Susana Rad¨ªo. La duda es si estar¨¢n listos para el siguiente asalto. ?Hay alcaldesa para rato, se?ora Mu?oz?
-No s¨¦, no s¨¦. Cuando termine este mandato, veremos c¨®mo marchan los proyectos. Pero no creo que sea bueno eternizarte en el cargo...
-?Est¨¢ pensando en autolimitarse a dos mandatos, como Aznar?
No responde directamente. S¨®lo insiste: "Estar mucho tiempo en un cargo no es bueno". Por el momento, se ha marcado tres objetivos: 1) recuperar el buen nombre de Marbella, que vuelva el trabajo y la inversi¨®n; 2) sanear la econom¨ªa y poner orden en las cuentas p¨²blicas; y 3) impulsar los servicios p¨²blicos: residencias para mayores, viviendas de protecci¨®n oficial, colegios, infraestructuras.
Si acierta, 135.664 marbell¨ªes se lo agradecer¨¢n.
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