Guardiola toma la palabra

Con un sinf¨ªn de aspavientos, utilizando los brazos como molinillos, detuvo el juego. "?As¨ª no!", se arranc¨® Pep Guardiola. "?Puyi!, no hay que salir de la marca hasta que el bal¨®n empieza a rodar en el pase". Pero el capit¨¢n del Barcelona hizo lo que ninguno. "Lo he hecho porque el otro delantero hab¨ªa ganado la espalda al compa?ero", replic¨® al tiempo que invitaba a Tito Vilanova, el segundo entrenador, a participar del debate: "?A que s¨ª, Tito?". ?ste asinti¨® y Guardiola, tras una breve pausa, se corrigi¨®: "Tienes raz¨®n, pero...". Y le solt¨® un discurso bien largo y profundo sobre c¨®mo debe situarse en el campo. Una charla, en definitiva, como otra de las muchas que dio durante la semana pasada en Saint Andrews. "Utilizar¨¦ la palabra para seducir a los jugadores", advirti¨® el d¨ªa de su presentaci¨®n. En Escocia, al menos, lo intent¨®.

Met¨®dico, Guardiola quiere tenerlo todo en orden. Grab¨® alg¨²n que otro entrenamiento -lo hicieron los ojeadores Carles Planchart y Dom¨¨nec Torrent- y los dos partidos; organiz¨® por las noches dobles sesiones junto a Vilanova y el preparador f¨ªsico, Lorenzo Buenaventura, y solicit¨® al fisi¨®logo, Esteban Gorostiaga, que controlase la alimentaci¨®n de la plantilla. Con s¨®lo unos minutos para el descanso o beber agua o s¨®lo unos segundos para cambiar de ejercicio.

Hasta aqu¨ª, Guardiola se mantuvo en segundo plano, con los brazos en jarras y cuchicheando con los cuatro preparadores o los fisioterapeutas. Pero, cuando rod¨® el bal¨®n, recobr¨® la voz. "Todos sabemos jugar al f¨²tbol, pero muy pocos conocemos el que quiere practicar el t¨¦cnico", dice Alves. "Al principio, detiene mucho los entrenamientos para corregirnos, para explicarnos lo que quiere de nosotros", argumenta Piqu¨¦; "pero se lo agradecemos porque pronto estaremos coordinados y trasladaremos sus ideas al campo". Guardiola lo tiene claro: "Quiero que entiendan que pueden ser mucho mejores como equipo". Para eso necesita la palabra.

Cuando Guardiola descubri¨® a Johan Cruyff como entrenador, entendi¨® el f¨²tbol que le gusta. Cuando top¨® con Louis van Gaal, aprendi¨® el proceso de escuchar y decidir. "De todos los entrenadores que he tenido, Van Gaal es con el que m¨¢s he hablado de f¨²tbol", reconoce en su libro La meva gent, el meu futbol. Nada le gusta m¨¢s. Concentrado en Messi, a quien siempre corrige aspectos defensivos, ha charlado con todos en los campos de entrenamiento. "Nos falta ponernos un poco de acuerdo, pero esto tiene buena pinta", resuelve M¨¢rquez. "Es el m¨¦todo ideal para alcanzar ¨¦xitos", apostilla Xavi.