S¨®lo la escuela mixta recibir¨¢ dinero p¨²blico en Catalu?a

Coto a las escuelas que separan a los alumnos por sexos en Catalu?a. Los centros que practiquen la segregaci¨®n por g¨¦nero no recibir¨¢n m¨¢s subvenciones de fondos p¨²blicos, seg¨²n el proyecto de Ley de Educaci¨®n que el Gobierno de la Generalitat aprob¨® ayer. El texto especifica que los centros concertados deben ser mixtos. Los que incumplan esta condici¨®n quedar¨¢n excluidos del concierto econ¨®mico que ofrece la Administraci¨®n catalana.

La medida afecta a los 16 centros concertados de Catalu?a que admiten s¨®lo a escolares del mismo sexo -ocho de estas escuelas escolarizan exclusivamente a ni?as y las otras ocho a ni?os-. Estas escuelas, ligadas al Opus Dei, seg¨²n el Departamento de Educaci¨®n, dejar¨¢n de percibir las subvenciones cuando se revise el concierto econ¨®mico, proceso que se realiza cada cuatro a?os.

La futura ley otorga m¨¢s autoridad a los centros, que podr¨¢n fijar su programa y objetivos. A cambio, instaura un sistema de evaluaci¨®n interna por el que deber¨¢n dar cuentas de sus decisiones. El director de la escuela adquiere rango de autoridad p¨²blica y la ley le dota de mayor poder en caso de conflictos. La norma otorga a la Generalitat competencia exclusiva en el curr¨ªculo escolar, lo que seg¨²n el Gobierno catal¨¢n le exime de aplicar la tercera hora del castellano fijada por la Administraci¨®n central. Sortear¨¢ as¨ª la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la comunidad que le obligaba a ello.

La lengua vehicular es el catal¨¢n, pero, como ya establece la actual normativa, los padres podr¨¢n solicitar educaci¨®n en castellano. Durante el ciclo no obligatorio de la educaci¨®n infantil (de tres a cinco a?os) o en el primer curso de la escolarizaci¨®n b¨¢sica (a los seis a?os). En ambos casos, el centro deber¨¢ atender a los alumnos a trav¨¦s del propio profesor o mediante uno adicional. Nunca podr¨¢ dividirse a los alumnos por motivos ling¨¹¨ªsticos.

Los padres deber¨¢n solicitarlo a trav¨¦s de los impresos de inscripci¨®n escolar, que mantendr¨¢n una casilla sobre la opci¨®n del idioma. Este derecho se contempla desde 1998 pero la celda del castellano no apareci¨® en los formularios hasta 2006, lo que llev¨® a la Justicia a fallar que la Generalitat incumpl¨ªa su propia ley ling¨¹¨ªstica. El sistema catal¨¢n tiene 1,1 mill¨®n de alumnos y recibe una veintena de solicitudes al a?o para escolarizar en castellano.