'Papillon' revivir¨¢ en Canarias
Branko Lustig, ganador de dos 'oscars', producir¨¢ en las islas un 'remake' del cl¨¢sico carcelario de los setenta
"La industria cinematogr¨¢fica se parece a la b¨²squeda de oro", dice Branko Lustig. Sabe de lo que habla. Este productor de Hollywood ha tocado ya dos veces el oro que ba?a la estatuita de los Oscar con La lista de Schindler y Gladiator, dos de las pel¨ªculas que figuran en su haber. "Y ahora es el momento de buscar oro en Canarias", a?ade. Ha empezado la b¨²squeda junto a la empresa Atlantia Canarias. Juntos quieren producir all¨ª un remake de Papillon, la novela de Henri Charri¨¨re sobre su experiencia en un campo penitenciario en la Guayana francesa que ya llev¨® al cine el director Franklin J. Schaffner.
"Es la historia de un hombre que es condenado sin raz¨®n, en busca de su libertad", recuerda Lustig, que explica que "mucha gente joven ya no conoce esta pel¨ªcula", rodada en 1973, "ni muchos otros cl¨¢sicos". Entonces el filme fue un gran ¨¦xito en taquillas. Las ganas de repetirlo y el mensaje impactante del filme son los motivos que han llevado a los productores, entre los que est¨¢n John Nelly y Manuel Corbi adem¨¢s de Lustig y Atlantia, a lanzarse con este proyecto. Cuenta con un presupuesto de unos 90 millones de d¨®lares (57,8 millones de euros), se empezar¨¢ a rodar en oto?o y llegar¨¢ a las pantallas a finales de 2010, "el mejor momento si queremos ganar premios en todo el mundo", apunta Lustig.
El filme se basa en la vida en un campo penitenciario de la Guayana francesa
Lustig pretende convertir el archipi¨¦lago en un plat¨® internacional
Lo cuenta en Barcelona, junto a Vicente Mora y Roger Corbi, los socios de Atlantia. Se han reunido all¨ª para seguir preparando el proyecto. Se est¨¢ escribiendo el gui¨®n y es posible que haya actores espa?oles, aunque los productores a¨²n no han decidido ni qui¨¦n dirigir¨¢ la pel¨ªcula ni qui¨¦nes ser¨¢n sus protagonistas. "Dustin Hoffman
[estrella del anterior reparto junto a Steve McQueen] es ya demasiado viejo para el papel", bromea Lustig. De momento, los trabajos se han concentrado en conseguir los derechos de la pel¨ªcula para hacer el remake. Y seg¨²n Mora, no ha sido f¨¢cil porque hac¨ªa mucho tiempo que hab¨ªa gente interesada en volverla a filmar.
Lo que s¨ª que qued¨® claro en el momento en que Atlantia consigui¨® hacerse con los derechos es que se rodar¨ªa en las islas Canarias. "En cuatro de ellas", precisa Mora. "En esta b¨²squeda de oro somos pioneros. Viejos", bromea Lustig, nacido en la antigua Yugoslavia hace 76 a?os, "pero pioneros al fin y al cabo". Y ahora se disponen a colocar el archipi¨¦lago en un lugar importante del mundo de buscadores de oro de la industria cinematogr¨¢fica. ?ste es el objetivo con el que se fund¨® la productora Atlantia, y Papillon es el primer gran paso en este proyecto. La pel¨ªcula, dice Mora, "es toda una declaraci¨®n de principios". Lo que quieren, a?ade, es rodar en Canarias cintas "con calidad, para el mundo entero, involucrando la industria internacional y s¨®lo con financiaci¨®n privada, sin depender se subvenciones".
Si con Papillon han conseguido un buen instrumento para publicitar Canarias, con Branko Lustig, incorporado al proyecto hace dos meses, han encontrado a alguien experto en encontrar nuevos destinos de rodaje. "Es el mejor", comenta Mora contento. Escenas de su producci¨®n Gladiator se rodaron en Malta y en Marruecos. Y eso atrajo otras productoras, pero sobre todo muchos turistas, explica Lustig. "Ahora, las Canarias tienen 12 millones de visitantes. No se lo pueden imaginar, pero van a llegar muchos m¨¢s. Tantos, que van a tener que ampliar las islas", asegura divertido.
Lustig est¨¢ encantado con el futuro, pero tambi¨¦n con el presente de Canarias, que visit¨® por primera vez cuando empez¨® la colaboraci¨®n con Atlantia. Dice que las condiciones para establecer una industria cinematogr¨¢fica potente son ¨®ptimas: disiente del estereotipo de unas islas ¨¢ridas y volc¨¢nicas, y explica que el archipi¨¦lago ofrece una variedad de paisajes tan grande que se puede rodar cualquier pel¨ªcula. En Papillon se simular¨¢ la Guayana francesa, pero se podr¨ªan poner en escena decorados que van desde Marte a las monta?as suizas, explican los productores. Mora subraya tambi¨¦n la disponibilidad de la Administraci¨®n auton¨®mica para fomentar esta industria, con facilidades fiscales y la creaci¨®n de una ciudad del cine.
"Tabernas no es exactamente el s¨ªmil", dice Mora, porque Canarias no s¨®lo ofrece un paisaje del Oeste. Pero s¨ª esperan volver a atraer a la industria internacional como lo hizo el desierto almeriense hace ya muchos a?os. El ¨¦xito de la empresa, reconocen, ir¨¢ unido al ¨¦xito del nuevo Papillon.
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