El ministro m¨¢s listo
EL S?NDROME DE DENEB. Cortometraje. 2008.
Director: V¨ªctor Garc¨ªa Le¨®n. Int¨¦rprete: Juan Diego Botto.
Se llama s¨ªndrome de Deneb al que suelen padecer algunas personas que han sido los primeros de la clase en su ¨¦poca de estudiantes y luego, pasados los a?os, lanzan desaf¨ªos, compiten, se miden y rivalizan con quienes les rodean, incluidos familia, trabajo y amigos. La estrella Deneb es la m¨¢s brillante del cielo, pero se consume m¨¢s r¨¢pidamente que ninguna otra. De todas maneras, a¨²n le quedan unos millones de a?os para desaparecer.
V¨ªctor Garc¨ªa Le¨®n ha dejado de ser una promesa del cine espa?ol para colocarse, tras su segunda pel¨ªcula, Vete de m¨ª, entre los directores m¨¢s interesantes de la nov¨ªsima generaci¨®n. Quiz¨¢ los espectadores desconozcan, en cambio, su primera obra, El elefante del rey (2003. Int¨¦rpretes: Nacho Vigalondo, Juan Echanove), en el que se mezclan la ficci¨®n y el testimonio sobre el cad¨¢ver de un enorme elefante, pieza cobrada por la escopeta del rey Alfonso XIII. El paquidermo se puede contemplar hoy, convenientemente disecado, en el Museo de Ciencias Naturales de Madrid. En ese mediometraje pod¨ªamos apreciar el valor real de un despojo y el cambio sem¨¢ntico al convertirse en trofeo. El s¨ªndrome... es modestamente definido por su realizador como "un juguete para mayores". Sin embargo, en sus 14 minutos de duraci¨®n encierra una mutaci¨®n del viejo cine pol¨ªtico y cr¨ªtico, entre la b¨²squeda de sentido y la p¨¦rdida del significado. El cortometraje nos presenta la jornada de un ministro muy brillante y que al mismo tiempo es un excelente padre de familia. Da gusto verle compatibilizar un cargo de tanta responsabilidad con el estricto -y cari?oso- cumplimiento de sus deberes de padre. El ministro est¨¢ separado de su primera esposa, como todo el mundo. Y tambi¨¦n podemos ver que es coqueto, que sabe sacar partido de su atractivo. Por ejemplo, en la elecci¨®n de su corbata. Aunque al principio ha sacado una de Missoni, decide devolverla al corbatero, porque las corbatas con tanto zigzag producen distorsiones en la pantalla del televisor. Y esa noche tiene que dar una conferencia ante las c¨¢maras, en el hotel Ritz. Es una velada importante en su vida, mucho m¨¢s importante que el d¨ªa en el que fue llamado al Gobierno de la naci¨®n. ?Qu¨¦ es un ministerio si se lo compara con la humanidad! ?l es ambicioso, pero la estrella que gu¨ªa su vida, Deneb, le permite tambi¨¦n ser generoso. Y ¨¦l se preocupa tanto de los pa¨ªses problem¨¢ticos, sacudidos por la escasez y la discordia interior, como de los asuntos de su propio ministerio. V¨ªctor Garc¨ªa Le¨®n no se demora mucho en describir al personaje en su quehacer cotidiano, porque enseguida nos muestra que el ministro gesta algo importante dentro de s¨ª. Algo le da vueltas en su interior. ?Un malestar g¨¢strico? ?Una decisi¨®n que est¨¢ a punto de convertirse en decreto? Llegan las nueve de la noche y se encienden las luces del sal¨®n del Ritz. Se espera de ¨¦l una cosa nueva, distinta, que cambie nuestro incierto rumbo. Para eso es el ministro m¨¢s listo de Europa, seg¨²n la Fundaci¨®n Alternativas. Saldremos de dudas en unos minutos. Antes de entrar en el sal¨®n, el conferenciante, en una antesala a oscuras, mira por la ventana al cielo de la noche. Las luces de Madrid no le permiten observar su estrella favorita, pero all¨¢ arriba estar¨¢, solitaria y ¨²nica.
Pero a nuestro pol¨ªtico le sobreviene un arrebato, una alteraci¨®n cerebral y corporal... Comienza a emitir un ahogado sonido, una especie de cloqueo. Y all¨ª, a oscuras, emprende un corto vuelo de ave de corral hasta encaramarse al ropero. Se le busca, y un botones se?ala la silla a¨²n caliente en la que ha estado sentado:
-?El ministro ha puesto un huevo!
Desde lo alto del ropero viene un cacareo de satisfacci¨®n. Al final del cortometraje se casca el huevo y se muestra su contenido, pero, para conocerlo, habr¨¢ que esperar a su estreno. En los mejores cines.
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