'Dietas milagro', o c¨®mo perder salud y dinero adem¨¢s de peso

Comer s¨®lo pi?a o alcachofas o l¨ªquidos... Ingerir alimentos ¨²nicamente antes de las 10.00 de la ma?ana. Guiarse por las fases de la luna para consumir cualquier tipo de nutriente. Todo para adelgazar. Cuatro de cada cinco personas ha utilizado estos m¨¦todos u otros similares para perder peso.

Muchos olvidan que el 'efecto rebote' o 'yoy¨®' no es un mito

La monoton¨ªa de los planes los hace insostenibles a medio plazo

M¨®nica B. aguant¨® s¨®lo una semana a base de sirope de savia de arce

Alicia reconoce que, en cuanto oye de un sistema nuevo, quiere probarlo

Dietas milagro con mucho riesgo f¨ªsico y poco contenido cient¨ªfico. Formas de alimentaci¨®n que prometen perder m¨¢s de cinco kilos al mes pero que, a largo plazo, causan m¨¢s perjuicio que beneficio. En la sociedad de lo inmediato, muchos abandonan una dieta equilibrada por parecer m¨¢s delgados en unas pocas semanas. Olvidan, adem¨¢s, que el llamado efecto rebote no es un mito. La mayor¨ªa del peso que se pierde se vuelve a recuperar.

Los expertos alertan contra esta forma peligrosa de alimentaci¨®n. El Ministerio de Sanidad y Consumo ha lanzado una campa?a para tratar de explicar los riesgos que conllevan, y fomentar una dieta equilibrada. Los efectos de estos reg¨ªmenes son muy claros: deficiencias en vitaminas y minerales, alteraciones del metabolismo y una monoton¨ªa que los hace insostenibles mucho tiempo. "Son restrictivos, rutinarios y aburridos. Se basan en un menor consumo de alimentos, es decir, son hipocal¨®ricos, y de ah¨ª viene la p¨¦rdida de peso", explica Mar¨ªa Victorina Aguilar, profesora de nutrici¨®n de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares (Madrid).

En los ¨²ltimos 20 a?os se ha duplicado en Espa?a la tasa de obesidad, y, con ella, "el uso y abuso de las denominadas dietas y productos milagro", dice Alberto Garc¨ªa Romero, presidente del Colegio Oficial de Farmac¨¦uticos de la Comunidad de Madrid (COFM). "Formas de alimentaci¨®n que pueden provocar patolog¨ªas irreversibles", apunta Aguilar.

Enfermedades cardiovasculares, da?os renales y hep¨¢ticos, disminuci¨®n de la masa muscular... Sin embargo, a pesar de conocer estos riesgos, Alicia Mart¨ªnez lleva desde los 16 a?os alternando una alimentaci¨®n normal con un sinn¨²mero de dietas m¨¢gicas. Ahora tiene 28. Nunca le ha servido de nada. El peso que pierde vuelve a recuperarlo. Con el regalito de alg¨²n kilo de m¨¢s.

El ¨²ltimo experimento lo hizo hace seis meses. Perdi¨® m¨¢s de seis kilos aliment¨¢ndose s¨®lo de barritas de prote¨ªnas. "Ten¨ªa que perder peso r¨¢pido. No hab¨ªa opci¨®n", dice. "Quer¨ªa adelgazar para mi boda". Perdi¨® demasiado peso. Una semana antes de la celebraci¨®n tuvo que llevar a arreglar su vestido de novia. Ahora el traje no le cabe. Se quit¨® seis kilos y ha ganado ocho. Pero este sistema no es el ¨²nico que ha probado. Antes pas¨® por la dieta de la pi?a, la de la fresa y la de la sopa quemagrasas, entre otras. "Con todas me sent¨ªa m¨¢s o menos igual: hecha polvo", cuenta. En la primera pas¨® dos semanas comiendo pi?a natural. La mayor¨ªa de veces sola. Otras, acompa?¨¢ndola de alg¨²n yogur o de un poco de fiambre de pavo. Un tipo de r¨¦gimen, denominado monodieta, basado en la ingesta de un s¨®lo alimento. La dieta de la fresa -con ella dur¨® s¨®lo 10 d¨ªas- es igual, cambiando de fruta. La tercera consist¨ªa en consumir, ¨²nicamente, la sopa quemagrasas, un brebaje elaborado con verduras y que promete una p¨¦rdida de peso "muy visible".

Alicia, como muchos otros, reconoce que no escarmienta. "Escucho hablar de una nueva dieta, leo algo en Internet o alguien me la recomienda y me decido a probarla", dice. Y es que la Red es una fuente inagotable de ideas peregrinas, muchas acompa?adas de productos que no llegan a ser medicamentos, pero que prometen a quienes los toman una rebaja de kilos r¨¢pida. "Farmacolog¨ªa y dietas milagro no son compatibles. Ese tipo de alimentaci¨®n puede desencadenar en grav¨ªsimos problemas de salud", dice Mar¨ªa Guinea, vicedecana de la facultad de Farmacia de la Universidad de Alcal¨¢. Eso sin contar con el desembolso econ¨®mico que suponen. Se calcula que en Espa?a se gastan unos 2.000 millones de euros en este tipo de dietas y productos milagro. Es decir, unos 60 euros por espa?ol al a?o.

El 34% de las madrile?as de entre 15 y 16 a?os y el 7% de los madrile?os de la misma edad utiliza productos milagro, seg¨²n datos del colegio de farmac¨¦uticos extrapolables al resto de Espa?a. Adem¨¢s de los j¨®venes, entre los seguidores de este tipo de dietas entran tambi¨¦n las mujeres de m¨¢s de 50 a?os.

Cada uno de ellos encuentra un sistema a su gusto. Con s¨®lo teclear "dietas m¨¢gicas" en uno de los buscadores m¨¢s utilizados de Internet aparecen m¨¢s de 400.000 resultados. A la famosa dieta de la pi?a o la de la sopa quemagrasas que prob¨® Alicia se a?aden otras monodietas; dietas hipocal¨®ricas muy desequilibradas, seg¨²n los expertos, como la de la Cl¨ªnica Mayo, que recomienda ingerir como m¨¢ximo 800 kilocalor¨ªas al d¨ªa, tomar entre cuatro y seis huevos y prescindir de los l¨¢cteos. Una forma de alimentaci¨®n que puede producir, seg¨²n Aguilar "d¨¦ficit de calcio, trastornos metab¨®licos, alteraciones gastrointestinales, dermatol¨®gicas o cardiocirculatorias, adem¨¢s de elevados niveles de colesterol".

Dietas pintorescas como la de las fases de la luna, que se basa en ingerir durante 26 horas s¨®lo l¨ªquidos sin az¨²car y ayunar en el inicio de la nueva fase lunar, sobre la idea de que las fases lunares regulan los fluidos corporales. O el "m¨¦todo paquistan¨ª", que consiste en ponerse una pulsera de hilo apretad¨ªsima para detectar cuando se est¨¢ engordando. Sus partidarios afirman que este sistema lo emplean tradicionalmente las mujeres paquistan¨ªes y creen que permite mantener siempre el mismo peso.

"Sistemas rid¨ªculos para perder peso, sin rigor cient¨ªfico y que s¨®lo fomentan un desequilibrio en la alimentaci¨®n de quienes las hacen", dice Mar¨ªa Victoria Mart¨ªn Hern¨¢ndez, nutricionista del Centro Cl¨ªnico Menorca. "Tanto las dietas basadas en un solo alimento como las que reducen mucho las calor¨ªas son, adem¨¢s, muy dif¨ªciles de llevar", sigue.

M¨®nica B. estuvo una semana a base de sirope de savia de arce. Una de las dietas m¨¢s famosas. "Estuve siete d¨ªas sin ingerir absolutamente nada m¨¢s que el dichoso jarabe", cuenta. No le sirvi¨®. "Adem¨¢s, me dol¨ªa el est¨®mago todo el tiempo y estaba muy nerviosa. Apenas pod¨ªa dormir", dice. "No s¨¦ muy bien qu¨¦ hace el preparado en tu organismo, pero a pesar de no comer ten¨ªa una energ¨ªa bestial". Perdi¨® poco m¨¢s de dos kilos. "Para adelgazar es absurdo. Engordas enseguida. Pero como te comen la cabeza con lo de que es 'muy sano' y que es muy bueno dar un descanso al aparato digestivo contin¨²as", explica. Tras la dieta tuvo problemas digestivos durante meses. A pesar de esto, muchas web est¨¢n inundadas de comentarios a favor de este r¨¦gimen. "Te ayuda a desintoxicar el organismo de todo lo que le sobra", dice uno de ellos. "Te deja un pelo y una piel preciosa. Lo hago una vez al a?o", dice otro.

Pero, ?c¨®mo distinguir una dieta milagro de una verdaderamente efectiva? La profesora Aguilar lo explica: "Las dietas m¨¢gicas sugieren ser r¨¢pidas, f¨¢ciles y saludables, las suelen prescribir personas ajenas al campo de la nutrici¨®n, presuponen que los alimentos cambian los procesos bioqu¨ªmicos y suelen prohibir o fomentar ciertos grupos de alimentos".

El verano es una de las ¨¦pocas de m¨¢s auge de este tipo de dietas. Tambi¨¦n los meses anteriores, en los que proliferan los que inician la llamada operaci¨®n bikini. El mayor n¨²mero de consultas sobre este tipo de alimentaci¨®n y sobre productos milagro se produce en mayo, seg¨²n el colegio de farmac¨¦uticos de Madrid. Y es que, la mayor¨ªa de personas que recurre a estos estrictos y poco cient¨ªficos reg¨ªmenes los acompa?an tambi¨¦n de productos milagro.

C¨¢psulas de frutas o de algas. Cremas y geles especiales como los que prob¨® Antonio. "Utilic¨¦ desde parches reductores hasta pastillas que promet¨ªan perder un mont¨®n de kilos", cuenta. Perdi¨® peso, pero luego, en cuanto volv¨ªa a una alimentaci¨®n normal, los recuperaba, "m¨¢s desanimado" si cabe. La nutricionista Elena Moreno Guillamont explica que este tipo de dietas producen un "efecto yoy¨®". Es decir, "provocan la r¨¢pida recuperaci¨®n del peso perdido debido a que una vez se abandona la dieta milagro el organismo pone en marcha mecanismos fisiol¨®gicos para compensar el periodo de restricci¨®n que se ha sufrido". Mientras se est¨¢ realizando la dieta milagro el organismo reacciona r¨¢pidamente y, como mecanismo de defensa, disminuye el metabolismo para contrarrestar la deficiencia energ¨¦tica. Cuando se vuelve a la alimentaci¨®n habitual el metabolismo ha disminuido, se come m¨¢s y se recupera m¨¢s peso del que se ha perdido y con mayor facilidad.

"Adem¨¢s, el peso perdido en tan corto espacio de tiempo se debe principalmente a la p¨¦rdida de agua y gluc¨®geno. Los dep¨®sitos de grasa corporal, que son los que realmente hay que perder cuando hay exceso de peso, se mantienen", dice

Nadie debe caer por tanto en la soluci¨®n que, a simple vista parece m¨¢s f¨¢cil. ?Qu¨¦ hacer? Los expertos coinciden: el ¨¦xito para perder peso de un modo saludable radica en la realizaci¨®n de una dieta hipocal¨®rica personalizada. "Es el especialista quien debe establecer un control para evitar d¨¦ficits y des¨®rdenes alimentarios. Tambi¨¦n combinar la dieta con ejercicio f¨ªsico moderado y regular. Una vez logrado el objetivo de peso se debe mantener mediante una alimentaci¨®n equilibrada y un estilo de vida saludable", remata Moreno Guillamont.