'La M¨¢s Bella' y alternativa

Una Talking Head de Juan Carlos Elijas, el poeta, nos dec¨ªa que debemos "coger el todo por los cuernos". A ello: el color asalmonado que hoy luce la que fuera la imprenta de El Imparcial, el peri¨®dico que fundara Ortega y Gasset, trata de ocultar su presente de cine porno. No es tanto un problema moral como una cierta toma de conciencia del modo en el que la transmisi¨®n del conocimiento, hasta ahora a trav¨¦s de la palabra escrita, est¨¢ cada d¨ªa m¨¢s en manos de la imagen, unas veces en movimiento, otras est¨¢tica, otras objetualizada, tambi¨¦n met¨¢fora.

Esta batalla se desarrolla de manera cruenta desde la segunda mitad del siglo XX con la aparici¨®n de nuevos medios de comunicaci¨®n, aunque, en el caso de la edici¨®n de arte contempor¨¢neo, las disputas vienen de m¨¢s lejos. Los libros de artista o las revistas ligadas a la creaci¨®n visual, hist¨®ricamente, han tendido a traspasar la frontera del texto con la intenci¨®n de aportar contenidos visuales complejos m¨¢s all¨¢ de la palabra.

No hay que olvidar que el urbanismo cambi¨® el destino pol¨ªtico de Madrid

La M¨¢s Bella (www.lamasbella.org) es, como sus autores la definen, un soporte de experimentaci¨®n editorial que se publica regularmente desde 1993. Sus editores, Pepe Murciego y Diego Ortiz, son dos artistas que llevan m¨¢s de 15 a?os implicados en la creaci¨®n contempor¨¢nea, la gesti¨®n cultural y los medios de comunicaci¨®n de Madrid a muy distintos niveles.

Desde su nacimiento, La M¨¢s Bella ha publicado m¨¢s de 30 ediciones. El n¨²mero de colaboradores a lo largo de todas estas ediciones ronda los 600, provenientes del medio art¨ªstico y cultural espa?ol en su mayor¨ªa. Como revista de colaboraciones, en cada nueva edici¨®n cuenta con el trabajo de lo que pueden llegar a ser cientos de creadores que desarrollan sus propuestas pl¨¢stica, audiovisual, conceptual o literariamente. La metodolog¨ªa de trabajo parte de la invitaci¨®n de los editores a abordar un tema monogr¨¢fico y un formato por ellos propuesto. Todos los colaboradores trabajan de forma completamente altruista, al tiempo que La M¨¢s Bella asume los procesos de producci¨®n, financiaci¨®n y distribuci¨®n de cada una de las ediciones.

El desarrollo experimental de la publicaci¨®n afecta tanto a sus contenidos como a su apariencia y formato, decant¨¢ndose por lo que se conoce como revista ensamblada o incluso el libro objeto que ha sido desarrollado por artistas y colectivos a lo largo del siglo XX. Esto les ha llevado a producir ediciones en una caja de pizza: La M¨¢s Bell¨ªsima n? 1 (1995); en una cartera de polipiel: La M¨¢s Bella T¨² (2003); en una bolsa de tela serigrafiada: La M¨¢s Bella Grandes ?xitos (2006), o en un delantal de tela vaquera: Manual de Instrucciones La M¨¢s Bella (2007), por citar s¨®lo algunos ejemplos.

La M¨¢s Bella se mantiene a s¨ª misma, que no a sus autores, a trav¨¦s de la venta de la publicaci¨®n en librer¨ªas especializadas y ferias, tanto de edici¨®n como de arte contempor¨¢neo, como Arco, a la que asisten, con su propio expositor, desde hace m¨¢s de 10 a?os. Es precisamente en este punto en el que surgen las otras dos patas que articulan el proyecto: la venta y distribuci¨®n de la publicaci¨®n les llev¨® hace algunos a?os a desarrollar Bellam¨¢tic y Bellascopio.

Bellam¨¢tic es una m¨¢quina -de las utilizadas habitualmente para vender alimentos o bebidas- expendedora de publicaciones y objetos de arte que se ha convertido en un espacio f¨ªsico de experimentaci¨®n art¨ªstica en s¨ª mismo. Sus autores la han utilizado para ampliar su ¨¢mbito de actuaci¨®n, programando en la m¨¢quina intervenciones de artistas o completos programas de arte de acci¨®n y performance. La din¨¢mica es sencilla, la Bellam¨¢tic viaja all¨ª donde es requerida: una galer¨ªa de arte, un museo, un centro cultural..., y alrededor de ella, bien los editores de La M¨¢s Bella o quien les haya invitado, programan una serie de actividades.

El Bellascopio es una ampliaci¨®n de la primera m¨¢quina, pero en este caso, destinada a la venta y visionado de piezas de videoarte.

Entre sus pr¨®ximas acciones, destacar su propuesta para La Noche en Blanco: BolaBellaMatic, una m¨¢quina expendedora de bolas de Plexigl¨¢s que contendr¨¢n peque?os proyectos de artistas y poetas visuales, y que se podr¨¢n encontrar, durante los d¨ªas previos al festival, en algunos espacios alternativos de la ciudad (Liquidaci¨®n Total, Off Limits, Espacio MenosUno y La Enana Marr¨®n) y en Matadero.