La revoluci¨®n rusa e Irlanda

Con su ¨ªmpetu en adentrarse por el lado m¨¢s oscuro de la II Guerra Mundial y pararse despu¨¦s en el Siglo de las Luces, John Boyne es un escritor irland¨¦s at¨ªpico. No responde al clich¨¦ de nieto de James Joyce, ni hermano literario devoto de John Banville. Le interesan la acci¨®n y el puro entretenimiento m¨¢s que la exploraci¨®n literaria. Busca la ¨¦pica frente al intimismo y la introspecci¨®n sin ning¨²n complejo.

Ahora termina una nueva novela sobre la revoluci¨®n rusa en la que ha estado inmerso a?o y medio. Esta vez, la historia est¨¢ contada desde los ojos de un joven que vivi¨® todo con 17 a?os y que lo rememora ya anciano en Londres. "Me he adentrado en el mundo ruso y me va a ser dif¨ªcil salir. Me ha gustado tanto, que creo que podr¨ªa escribir otra novela sobre la misma ¨¦poca", asegura Boyne.

?Y para cu¨¢ndo un libro sobre Irlanda? "No lo s¨¦. No es que no encuentre mi pa¨ªs suficientemente ¨¦pico; es que quiero pasearme por el mundo. Pero creo que alg¨²n d¨ªa lo har¨¦". John Boyne no oculta su resquemor con un pa¨ªs al que ve un tanto despegado de su entorno. El resultado beligerante contra Europa del ¨²ltimo refer¨¦ndum le ha molestado. "A veces tenemos un alma celta muy rica, pero una mentalidad demasiado peque?a", comenta el escritor. "Con respecto a Europa, nuestra posici¨®n es ego¨ªsta. Lo queremos todo de ella sin dar nada a cambio".

Para Boyne, en la consulta sobre el tratado de Lisboa se han impuesto las fuerzas m¨¢s reaccionarias de un pa¨ªs demasiado volcado en la religi¨®n cat¨®lica. "Asustan a los votantes con mensajes mentirosos. Creen que si decimos que s¨ª a Europa, tendremos aborto y otras cosas que tanto asustan a la Iglesia. Pero la gente debe despertar y saber que si nos echan de la Uni¨®n, tendremos que buscarnos la vida".