Los alumnos extranjeros estar¨¢n un mes en aulas separadas especiales

El Departamento de Educaci¨®n ha corregido a la baja el proyecto piloto de creaci¨®n de aulas voluntarias de acogida separadas para aquellos alumnos extranjeros que se incorporan al sistema educativo. El proyecto levant¨® polvareda en julio por lo que de discriminaci¨®n supon¨ªa y sindicatos y asociaciones de inmigrantes se opusieron frontalmente a la idea de la Administraci¨®n catalana.

La novedad m¨¢s importante es que los alumnos extranjeros de entre 8 y 18 a?os estar¨¢n s¨®lo un mes en las aulas separadas, denominadas eufem¨ªsticamente espacios de bienvenida educativa (EBE), antes de su incorporaci¨®n a los centros educativos. Estas aulas empezar¨¢n este curso en tres centros de Reus y en uno en Vic.

En la pr¨¢ctica, y en funci¨®n de cada ni?o y de su bagaje cultural, los 30 d¨ªas pueden verse reducidos. Para aquellos inmigrantes que lleguen en el periodo de vacaciones estivales, su paso por los nuevos centros se alargar¨¢ hasta tres meses. El proyecto final, presentado ayer a la comunidad educativa de Vic, tambi¨¦n incluye un programa de atenci¨®n a las familias de 10 horas que tendr¨¢ car¨¢cter voluntario y que les ofrecer¨¢ informaci¨®n sobre el sistema educativo catal¨¢n, as¨ª como las caracter¨ªsticas sociales y culturales del municipio al que han llegado.

Otra de las concreciones que se expusieron en la jornada informativa de ayer es que se derivar¨¢n a los espacios de bienvenida a todos los reci¨¦n llegados en edad escolar sea cu¨¢l sea su pa¨ªs de procedencia, esto incluye tambi¨¦n a escolares llegados de pa¨ªses de la Uni¨®n Europea. En julio, el proyecto preve¨ªa que estas aulas acoger¨ªan s¨®lo a alumnos procedentes de culturas distintas de las europeas; es decir, a los alumnos pobres, preferentemente de pa¨ªses africanos, magreb¨ªes y pa¨ªses del Este de Europa y quedaban fuera de la EBE los de la UE y latinoamericanos.

En el caso de los latinoamericanos y los de la UE, la proximidad cultural puede favorecer que se reduzca su paso por los EBE. Cuando los responsables de estos espacios den el visto bueno a la escolarizaci¨®n de los ni?os, ¨¦stos pasar¨¢n a las aulas de acogida que ya existen en los propios centros educativos. Actualmente, funcionan m¨¢s de un millar de estas aulas en las escuelas p¨²blicas catalanas.

El objetivo del plan es mejorar el proceso de acogida de los futuros alumnos para obtener m¨¢s informaci¨®n de qui¨¦nes son y qu¨¦ necesidades requieren antes de su llegada a la escuela. Tambi¨¦n brindarles apoyo para que afronten su entrada al centro con menos temores.

El director de Innovaci¨®n, Enric Badia, explic¨® que los EBE pretenden aprovechar el tiempo hasta ahora vac¨ªo de contenido entre la llegada del alumno a una nueva ciudad y su escolarizaci¨®n. Este nuevo recurso se a?ade al plan de acogida municipal, as¨ª como a los actuales planes educativos del entorno, ambos pensados para facilitar la integraci¨®n de los extranjeros en la ciudad de acogida. Cada una de estas ventanas, junto con la Oficina Municipal de Escolarizaci¨®n, los servicios educativos de zona y los centros escolares, trabajar¨¢n de forma coordinada.

Vic dar¨¢ el 15 de septiembre, coincidiendo con el inicio escolar, el pistoletazo de salida a la prueba piloto con la puesta en marcha de uno de estos espacios de bienvenida. En Reus, el arranque se retrasa hasta octubre.

Las EBE cuentan con una coordinadora, una educadora social, una t¨¦cnica en integraci¨®n y una monitora. Sobre ellas recaen las tareas de evaluar la situaci¨®n acad¨¦mica, conocimientos y bagaje cultural de cada ni?o y en funci¨®n de ello organizar actividades adecuadas a cada situaci¨®n.