Un congreso de te¨®logos apuesta por el laicismo

"La ¨¦tica s¨®lo puede ser laica, es aut¨®noma y es la expresi¨®n de la raz¨®n humana y de la conciencia individual y social", dijo anoche la fil¨®sofa Victoria Camps ante el congreso de te¨®logos que se celebra este fin de semana, organizado por la Asociaci¨®n Juan XXIII. El tema de los debates -Cristianismo y laicismo- es candente, con la actitud del Episcopado espa?ol en el punto de mira por sus enfrentamientos con el Gobierno y el Parlamento. Al congreso, el vig¨¦simo octavo de esta organizaci¨®n, est¨¢n convocados casi un centenar de personas, en su mayor¨ªa mujeres y personas dedicadas a la ense?anza de la religi¨®n en las escuelas p¨²blicas y concertadas. Se celebra en la sede central del sindicato Comisiones Obreras.

La posici¨®n laicista de la profesora Camps fue ratificada por el tambi¨¦n fil¨®sofo Jos¨¦ Antonio Marina. "El tema de la laicidad, que parec¨ªa resuelto o al menos olvidado, ha recobrado inter¨¦s por una serie de acontecimientos hist¨®ricos, unos internacionales y otros nacionales. La fuerza de Estados teocr¨¢ticos, la belicosidad pol¨ªtica de movimientos integristas, un desconcierto en democracias que no han sabido recorrer sin da?o el camino de la laicidad y a?oran seguridades antiguas, son algunos de los fen¨®menos internacionales", dijo.

Marina sostiene que "en Espa?a vuelven a o¨ªrse tambores de guerra, y de nuevo se habla de laicidad, laicismo, no confesionalidad, persecuciones de la religi¨®n, necesidad de defender la religi¨®n, apelaciones a la privatizaci¨®n de la vida religiosa, y rechazo a considerar la religi¨®n como un asunto privado".

Libertades de opini¨®n

Si para la profesora Camps "la moral es previa a la religi¨®n" -"no puede estar fuera de la raz¨®n humana", dijo citando a Kant-, en opini¨®n de Jos¨¦ Antonio Marina "la laicidad no es, por supuesto, irreligiosidad". "Es una manera, a mi juicio la adecuada, de concebir y organizar las libertades, en especial las libertades de opini¨®n, conciencia y creencia. Se trata pues de un modo de interpretar las relaciones entre poder pol¨ªtico y poder religioso, entre verdades privadas y verdades universales, y entre esfera p¨²blica y esfera privada", a?adi¨®.

Ambos pensadores consideran el debate del laicismo embarullado por una densa y conflictiva historia y de "tanto calado" que moviliza toda la filosof¨ªa pol¨ªtica y gran parte de la teor¨ªa ¨¦tica.