Una generaci¨®n diferente

Tras la "Generaci¨®n X", una nueva generaci¨®n de j¨®venes acaba de irrumpir en la vida p¨²blica. Nacidos a partir de 1988, los m¨¢s veteranos est¨¢n ya en la veintena. Pero no es una nueva generaci¨®n m¨¢s, sino la "Generaci¨®n Einstein". Ni m¨¢s altos, ni m¨¢s guapos, ni m¨¢s fuertes, pero s¨ª diferentes. Son la primera generaci¨®n de j¨®venes desde la Segunda Guerra Mundial que se identifica como grupo con caracter¨ªsticas positivas: sociabilidad, cooperaci¨®n, inteligencia e implicaci¨®n, entre las m¨¢s importantes. Estos j¨®venes tienen una nueva mentalidad que exigir¨¢ de nosotros un esfuerzo para entenderlos y adaptarnos a su forma de ver la vida.

El autor de esta obra -licenciado en Arte y cofundador de la agencia de comunicaci¨®n Keesie, l¨ªder mundial en el target infantil y juvenil- analiza las diferencias entre la "Generaci¨®n X" (1960-1985), a la que describe como una generaci¨®n anal¨®gica que vino a descubrir Internet en edad adulta y que lo utiliza principalmente como fuente de informaci¨®n -y que estuvo marcada por la depresi¨®n econ¨®mica de los a?os ochenta-, y la "Generaci¨®n Einstein" (1988-actualidad), nacida en una ¨¦poca de crecimiento y prosperidad econ¨®mica que foment¨® en ella un esp¨ªritu positivo de confianza en el futuro y en sus posibilidades personales. Pero, sobre todo, subraya Boschma, es la primera generaci¨®n digital por excelencia. "Crecieron en la sociedad de la informaci¨®n, acostumbrados a consumir informaci¨®n anywhere, anytime and anyplace". Este hecho diferenciado respecto a cualquier otra generaci¨®n de la historia tiene unas importantes consecuencias.

Entre ellas, el autor se?ala el cuestionamiento de la autoridad: el acceso a m¨²ltiples fuentes de informaci¨®n contrastables ha desautorizado ante ellos a los tradicionales monopolios del conocimiento sustentados por los medios de comunicaci¨®n, el profesorado y las autoridades en general. Para la "Generaci¨®n Einstein" son ¨²nicamente una fuente m¨¢s de informaci¨®n entre muchas otras. No aceptan imposiciones, s¨®lo respetan las pruebas.

Adem¨¢s, estos j¨®venes son pr¨¢cticos y cr¨ªticos: conscientes de que hay m¨¢s informaci¨®n de la que pueden asimilar, la discriminan con rapidez prestando atenci¨®n a la que consideran relevante. Son consumidores funcionales y muy cr¨ªticos. La palabra pierde predicamento ante la imagen.

Para la "Generaci¨®n Einstein", el ordenador ha dejado de ser una refinada m¨¢quina de escribir para convertirse en una herramienta de socializaci¨®n: chats, mensajer¨ªas instant¨¢neas, blogs, comunidades virtuales... Es decir, estos j¨®venes son tanto consumidores de informaci¨®n como emisores y fuentes de informaci¨®n en la red.

En consecuencia, esta habilidad para manejar informaci¨®n y crearla les confiere un poder inusual y ¨²nico como consumidores: pueden castigar a las empresas en sus weblogs, hacer caer en picado o hacer popular una marca a trav¨¦s de sus redes sociales digitales.

En definitiva, concluye el autor, los j¨®venes Einstein conocen perfectamente los medios de comunicaci¨®n y las intenciones de los responsables de marketing y s¨®lo creen en aquello que se demuestre con pruebas, no s¨®lo con esl¨®ganes atractivos. Y esta actitud se traslada a cualquier otro ¨¢mbito de la vida p¨²blica y privada: pol¨ªtica, amigos, familia, escuela...