La crisis penaliza la inversi¨®n y el I+D en las cuentas del Estado

Al vicepresidente Pedro Solbes le gusta decir que todo Gobierno es una coalici¨®n entre el ministro de Hacienda y los dem¨¢s. El primero aplica la tijera a las expectativas de sus compa?eros y de esa forma cuadra el Presupuesto. La met¨¢fora es estos d¨ªas m¨¢s real que nunca. Econom¨ªa se esfuerza por cerrar unas cuentas para 2009 que dejan fuera muchos anhelos de varios ministerios. La crisis obliga a dar prioridad al gasto social y a compartir las sobras entre las dem¨¢s pol¨ªticas.

S¨®lo el cap¨ªtulo social de los Presupuestos mantendr¨¢ el vigor de otros a?os

Econom¨ªa ha dispuesto 1.500 millones para hacer frente al alza del paro

Aunque el Gobierno es reacio a hablar de ganadores y perdedores, s¨®lo el cap¨ªtulo social (pensiones, desempleo, acceso a la vivienda...) mantendr¨¢ el vigor de otros a?os. El resto (parte de las inversiones, pol¨ªticas de agricultura, de industria, gasto corriente...) sufrir¨¢ el impacto de la crisis. Frente a las mejoras de dos d¨ªgitos observadas en presupuestos anteriores, s¨®lo la pol¨ªtica de infraestructuras subir¨¢ por encima del 4,5%. Este cap¨ªtulo resulta crucial en la negociaci¨®n parlamentaria que mantiene el Gobierno para sacar adelante el proyecto. Los grupos nacionalistas miran con lupa la inversi¨®n prevista en su comunidad para apoyar o no al Ejecutivo.

Las dem¨¢s partidas aumentar¨¢n por debajo de ese 4,5% y algunas incluso decrecer¨¢n, seg¨²n confirman en el Ministerio de Econom¨ªa, que reh¨²sa concretar las perdedoras. Hacienda incluye entre las v¨ªctimas de los recortes el gasto en investigaci¨®n y desarrollo -una de las estrellas de la anterior legislatura-, pese a que varias fuentes indican que el I+D crecer¨¢ en torno al 10%, una cifra que el equipo de Solbes rechaza de plano. Otra pol¨ªtica que el Gobierno ha exhibido como bandera social, la atenci¨®n a la dependencia, dispondr¨¢ en 2009 de pocos m¨¢s recursos. Los 1.000 millones de euros adjudicados suponen un avance del 15%, muy lejos de la decisi¨®n de duplicar la dotaci¨®n adoptada para este a?o.

Con esas premisas, el Ejecutivo intenta la cuadratura del c¨ªrculo: mejorar las pensiones, que suponen casi la mitad del Presupuesto, afrontar el mayor gasto en desempleo, subir el sueldo a los funcionarios y salir airoso del resto. Todo ello con unos ingresos que se est¨¢n desplomando por la crisis. "Es una situaci¨®n complicad¨ªsima. No se puede llamar a eso Presupuesto restrictivo", apunta Miguel ?ngel Garc¨ªa, del sindicato CC OO, uno de los asistentes al encuentro que mantuvo Solbes con los agentes sociales el pasado mi¨¦rcoles para informarles de las cuentas de 2009.

La prioridad del Gobierno es proteger a tres colectivos clave del electorado, especialmente sensibles a la merma de rentas: pensionistas, parados y funcionarios suman m¨¢s de 13 millones de personas con unos ingresos en general modestos.

La partida m¨¢s vulnerable a las desviaciones presupuestarias es la de desempleo. Hasta el punto de que el Gobierno diferencia entre el aumento del gasto sin ese cap¨ªtulo (un 3,5%) y con ¨¦l (un 4,5%). Por primera vez en mucho tiempo, Econom¨ªa ha dispuesto un desembolso de 1.500 millones para hacer frente al alza del paro. En a?os anteriores no se aportaba un solo euro a esa pol¨ªtica, sufragada con el super¨¢vit que generan las cotizaciones a la Seguridad Social. En todo caso, esos 1.500 millones son una estimaci¨®n, ampliable en caso de que el mercado de trabajo se deteriore m¨¢s de lo previsto.

En pensiones, el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, ha comprometido ya un aumento medio del 6% en las m¨ªnimas, similar al de este a?o. El resto se revalorizar¨¢ con la inflaci¨®n, como manda la ley. Afortunadamente para el erario p¨²blico, los precios empiezan a arrojar s¨ªntomas de moderaci¨®n, pero es probable que superen el 4% en noviembre, mes de referencia para el pago de pensiones.

Zapatero tampoco ha querido que sean los funcionarios quienes paguen las consecuencias de la crisis. Ver¨¢n crecer sus salarios m¨¢s del 3%, como en los ¨²ltimos a?os. Aun as¨ª, los sindicatos reprochan al Ejecutivo que recorte un 70% la oferta de empleo p¨²blico para 2009. "La austeridad presupuestaria no es incompatible con el empleo p¨²blico", sostiene C¨¢ndido M¨¦ndez, l¨ªder de UGT.

M¨¢s all¨¢ de los recortes, cuadrar el Presupuesto requerir¨¢ de ciertas artima?as. Hay un truco al que suelen recurrir los Ejecutivos (tanto el actual como el anterior del Partido Popular). Consiste en contabilizar algunos gastos como activos financieros, una f¨®rmula que permite destinar dinero a proyectos sin incurrir oficialmente en d¨¦ficit presupuestario. Aun as¨ª, Econom¨ªa cuenta ya con un desequilibrio del 0,34% del Producto Interior Bruto (PIB), aunque la cifra puede ser superior.

La otra opci¨®n es que el Presupuesto -que el Gobierno presentar¨¢ en menos de dos semanas- quede superado por la realidad, con unas cifras imposibles de cumplir tanto en el cap¨ªtulo de ingresos como en el de gastos. Supondr¨¢, en ese caso, la metamorfosis de un Solbes excesivamente prudente durante la anterior legislatura en otro con un punto de osad¨ªa en sus previsiones.