No todo sabe igual en Bilbao
Cuando me dispon¨ªa a enviar el texto de esta columna, me entero de la ¨²ltima barbaridad de ETA en Santo?a y el alma se me cae a los pies, y me parece que hoy cualquier tema puede sonar a fr¨ªvolo, a insensible. Sin embargo, me resisto a que ETA pueda tambi¨¦n mediatizar el contenido de un art¨ªculo. Afortunadamente, todav¨ªa en Euskadi siguen ocurriendo tantas cosas positivas y negativas, alegres y tristes como en cualquier otro lugar.
Uno de esos temas era recogido hace unos d¨ªas en las p¨¢ginas de este mismo diario: una norteamericana no hab¨ªa encontrado nada que beber en Bilbao "porque todo sab¨ªa igual". Reconozco que al principio pens¨¦ que se trataba de una errata, que donde cre¨ªa haber le¨ªdo "Bilbao" pon¨ªa en realidad "Macao" o alg¨²n otro lugar ex¨®tico. Pero no, por desgracia, el escenario del desastre era nuestro querido Bocho.
Me resisto a que ETA pueda tambi¨¦n mediatizar el contenido de un art¨ªculo
Ante una situaci¨®n de este cariz, no entiendo c¨®mo no ha habido ninguna reacci¨®n por parte de los responsables municipales, forales o auton¨®micos de turismo. ?De qu¨¦ nos sirve el Guggenheim o el Euskalduna, si obligamos a nuestros visitantes a convertirse en abstemios ante el poco inter¨¦s que les despierta nuestra oferta vin¨ªcola?
Uno, que practica semanalmente la mala costumbre del poteo, no alcanza a comprender c¨®mo Alice Feiring, que as¨ª se llama la damnificada, ha podido verse impulsada a una indeseada huelga de sed en su visita a nuestra tierra. Por muy modesta que sea una tasca bilba¨ªna, a buen seguro que no van a faltar en ella alg¨²n cosechero de maceraci¨®n carb¨®nica, varios crianzas riojanos (incluso alg¨²n Somontano o Ribera), alg¨²n rosado navarro o de Cordov¨ªn, txakoli y alg¨²n verdejo de Rueda. Hay que tener las papilas gustativas y el olfato muy atrofiados para que todos estos caldos sepan igual.
No parece ser el caso de nuestra simp¨¢tica neoyorquina, que ha escrito un libro cuyo t¨ªtulo traducido es La batalla por el vino y el amor o C¨®mo salv¨¦ al mundo de la Parkerizaci¨®n, para el que busca editor en espa?ol. Quiz¨¢, en su visita a nuestra ciudad, y en un intento de integrarse en el paisanaje, la Feiring se incorpor¨® a una cuadrilla de genuinos txikiteros, de los de grueso vaso de cristal y vino pele¨®n. Tal vez ello explique la carencia de matices en el morapio.
En la entrevista que le realiz¨® Roc¨ªo Ayuso, Alice Feiring lamentaba tambi¨¦n el exceso de sulfitos en los vinos de hoy en d¨ªa. Quejarse de la existencia de sulfito en el vino es como criticar que haya aceite en una lata de bonito. Sin los sulfitos -el socorrido "meta" (metabisulfito) de los cosecheros riojanoalaveses- ser¨ªa pr¨¢cticamente imposible conservar el vino embotellado. Me apunta un en¨®logo amigo que rara vez se superan los 30 miligramos de sulfuroso libre por litro.
Si en los ¨²ltimos a?os hemos tenido que sufrir la parkerizaci¨®n de los vinos, parece que ahora llega el momento de los desparkerizadores. En 2007 cinco marcas espa?olas alcanzaron los 100 puntos en la clasificaci¨®n del famoso ex abogado y catador de Baltimore. El m¨¢s barato de estos productos se vende a 400 euros la botella y el m¨¢s caro a 1.100. Con semejantes precios, creo que tengo la enorme suerte de estar a salvo de los consejos de Parker, sin necesidad de salvadores.
Feiring se quejaba en la entrevista de la "muerte del Rioja". ?Estaremos bebiendo cad¨¢veres? Si el Rioja est¨¢ muerto, con su todav¨ªa excelente relaci¨®n calidad-precio, ??¨®mo est¨¢n las denominaciones vivas y a qu¨¦ coste? ?A 6 euros la copa?
Mucho m¨¢s positivo se mostraba esta pasada semana Francis Ford Coppola, quien no s¨®lo produce pel¨ªculas, sino tambi¨¦n vinos. El director de El Padrino alab¨® los caldos de uva Monastrell elaborados en Alicante, donde ha estado rodando Tetro. ?Menos mal que todav¨ªa existen sitios en los que no todo sabe igual! Urge invitar a Coppola a unos potes en Bilbao.
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