Levantamiento
En su libro dedicado a Milena Jesensk¨¢ -periodista checa que fue compa?era de Kafka- Margarete Buber Neumann dedica p¨¢ginas especialmente significativas al tiempo que ambas pasaron en el campo de concentraci¨®n de Ravensbr¨¹ck, donde se conocieron y donde Milena muri¨® el 17 de mayo de 1944. Yo recordaba muchos de los sucesos y de las reflexiones que contiene ese libro, pero tras los ¨²ltimos atentados de ETA y el asesinato de Luis Conde he querido volverlo a leer, para encontrarme de nuevo, como si fuera la primera vez, con algunas escenas; y especialmente con esa en la que se nos cuenta c¨®mo algunas de las prisioneras se jugaban la vida para, desafiando las prohibiciones nazis, poder juntarse a cantar y a bailar. "En el ¨²ltimo rinc¨®n del maloliente retrete -nos dice Buber Neumann- ejecutaban danzas de las estepas mientras sus amigas vigilaban en la entrada para protegerlas del control de las SS".
Pero esa palabra significa tambi¨¦n rebeld¨ªa, contestaci¨®n, ponerse de pie, alzar la mirada
En momentos bajos, cuando estoy como quien dice en la reserva de optimismo o esperanza y necesito con urgencia repostar, mi mente suele orientarme hacia esa escena, hacia ese combustible de dignidad humana, hacia ese mensaje de desaf¨ªo contra la barbarie que consiste en decirle: quieres doblegarme pero no me doblego, quieres amedrentarme pero no me dejo, quieres arrasarme en mi felicidad pero yo mi felicidad la busco a¨²n, la intento a¨²n en el entorno m¨¢s horrendo, en el peor momento, la intento y la defiendo a¨²n. Despu¨¦s de conocer la noticia de las bombas de ETA y del asesinato de Luis Conde, y despu¨¦s de ver c¨®mo su hijo hac¨ªa ante las c¨¢maras un gesto tan de vida, tan de recuerdo vivo, al decir que su padre hab¨ªa muerto "haciendo lo que m¨¢s le gustaba, que era viajar". Despu¨¦s de escuchar c¨®mo ese joven hu¨¦rfano recordaba ante las c¨¢maras la felicidad de su padre; c¨®mo, en unas circunstancias en las que se puede pensar cualquier cosa, ¨¦l pensaba en los momentos en que su padre estaba m¨¢s contento y disfrutaba m¨¢s. Despu¨¦s de todo eso, he abierto la biograf¨ªa de Milena y repasado las haza?as de Ravensbr¨¹ck, contenidas en peque?os gestos que val¨ªan la vida: los encuentros y las conversaciones a pesar de la prohibici¨®n; la cucharada de m¨¢s para la compa?era enferma; los botones que devuelves a la ropa porque atarlos es atarte a la supervivencia y a la dignidad, y adem¨¢s representarlas a los ojos de todos como un aliento para el resto de las prisioneras; y para los carceleros, como una r¨¦plica o un levantamiento.
Esa es la expresi¨®n acu?ada, el lugar com¨²n para describir la operaci¨®n de retirar un cuerpo del lugar donde ha quedado: "levantamiento del cad¨¢ver", decimos. Y como tantas veces, las palabras son aliadas de lo humano; incluyen en la sombra que invocan como un punto de luz; o en el bloque de la desolaci¨®n que expresan una grieta de consuelo. Porque levantamiento es, del modo m¨¢s literal, la acci¨®n que su nombre indica. Pero significa tambi¨¦n rebeld¨ªa, contestaci¨®n; ponerse de pie, alzar la mirada contra quienes pretenden que nos mantengamos encogidos y con los ojos bajos. "Mi padre ha muerto haciendo lo que m¨¢s le gustaba, que era viajar". Incluso en ese momento este joven hu¨¦rfano quiere recordar a su padre contento. Y yo le escucho y le admiro, y le deseo un futuro feliz, levantamientos de felicidad tan juntos, tan seguidos, que le parezcan un continuo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.