La carrera, a medio curso por a?o

La crisis econ¨®mica llega a la universidad espa?ola, eminentemente p¨²blica, justo en el momento en el que debe adaptarse a Europa. Y el punto de partida es el de unos presupuestos que apenas se han movido en su porcentaje sobre el PIB en los ¨²ltimos a?os; los campus siguen perdiendo alumnos, los alumnos siguen estudiando cerca de su casa y su rendimiento tampoco es para tirar cohetes: s¨®lo aprueban el 61% de las asignaturas en las que se matriculan, seg¨²n el informe La Universidad en cifras 2008, presentado ayer por los rectores. Y ¨¦se es el resultado que obtienen sin llegar a matricularse de un curso completo, que constar¨ªa de 75 cr¨¦ditos acad¨¦micos: la media es que se dediquen a unos 59,5 cr¨¦ditos cada a?o. As¨ª que puede afirmarse que sacan la carrera a medio curso por a?o.

Las titulaciones sanitarias, las m¨¢s vocacionales, tienen un mayor ¨¦xito

Pero tampoco todos dedican el doble del tiempo estipulado para obtener su t¨ªtulo superior, son s¨®lo medias estad¨ªsticas. Adem¨¢s, hay unas enormes diferencias en la tasa de rendimiento entre unas titulaciones y otras. Los m¨¢s aplicados son los alumnos de Biotecnolog¨ªa (una de las carreras que m¨¢s nota requiere para acceder): aprueban el 85% de los cr¨¦ditos en que se matriculan; o los de Enfermer¨ªa (83%); en las ingenier¨ªas sacan la mitad de los cr¨¦ditos. Rondando el 80% de ¨¦xito, que no est¨¢ mal como media, destacan Bellas Artes, Publicidad y Relaciones P¨²blicas, algunas especialidades de Magisterio y, por supuesto, Medicina, Odontolog¨ªa y Fisioterapia.

En esta lista hay muchas carreras sanitarias porque los resultados tienen que ver con la vocaci¨®n, es decir, con la motivaci¨®n del alumno, record¨® ayer el director del informe, Juan Hern¨¢ndez Armenteros. Prueba de ello es que apenas hay diferencias entre una universidad y otra cuando se trata de estas carreras. En Ciencias Empresariales, con el componente vocacional claramente menos marcado, los alumnos aprueban algo menos de la mitad de las asignaturas en que se matriculan.

En torno a ese 50% est¨¢n las titulaciones experimentales (ciencias puras), como F¨ªsica o Estad¨ªstica. Aunque probablemente el ¨¦xito o fracaso en estos t¨ªtulos tambi¨¦n tiene que ver con la dureza de las materias, y probablemente el paradigma de esa dificultad recae en las ingenier¨ªas, en las que se aprueban el 54% de los cr¨¦ditos; y en un tercio de las carreras de ingenier¨ªas, la media baja de la mitad de aprobados. Bien es cierto que tradicionalmente el nivel de exigencia se ha mantenido muy alto en las ense?anzas t¨¦cnicas, casi como una se?a de identidad que consiste en suspender masivamente. En definitiva, otro indicador m¨¢s, que al igual que el del abandono (que ronda el 30% entre el alumnado seg¨²n c¨¢lculos oficiosos), se?ala en la misma direcci¨®n: la necesidad de orientar mejor a los estudiantes a la hora de elegir carrera y la revisi¨®n de las metodolog¨ªas docentes.

Por lo dem¨¢s, el n¨²mero de becarios, despu¨¦s de una ca¨ªda espectacular entre 1996 y 2004, creci¨® ligeramente en 2006, hasta alcanzar el 15,4% de los alumnos. Hern¨¢ndez Armenteros record¨® que en cualquier caso la cifra est¨¢ lejos del 25%, el indicador objetivo internacional. La media de las ayudas supera los 2.600 euros, pero a¨²n es escaso, asegur¨® Hern¨¢ndez Armenteros, si se quiere fomentar la movilidad de los estudiantes entre universidades. Ahora, en torno al 90% de los nuevos universitarios estudian en su provincia.

Y la movilidad es fundamental, dicen los expertos, para arreglar la desordenada y repetida oferta de t¨ªtulos que provoca situaciones de derroche, como que en una clase apenas haya una decena de alumnos o facultades medio vac¨ªas cuando la misma carrera se estudia desde hace a?os en una prestigiosa universidad unos kil¨®metros m¨¢s all¨¢.

La demanda para entrar en una titulaci¨®n de humanidades es de 54 nuevos alumnos cada curso como media, 20 menos que en 2000. Tambi¨¦n ha bajado en Ciencias Sociales (de 142 a 117), en las cient¨ªficas (de 93 a 60) y en las t¨¦cnicas (de 93 a 64) y s¨®lo ha aumentado en las sanitarias: de 119 a 121.