Revuelta del mundo acad¨¦mico contra la Ciudadan¨ªa de Camps

La imagen era ins¨®lita. Varios cientos de miembros de equipos directivos de los institutos p¨²blicos se concentraron a media tarde de ayer ante el Palau de la Generalitat Valenciana, tras una pancarta que rezaba "Treball en condicions" ("Trabajo en condiciones"), para protestar contra la orden de impartir Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa en ingl¨¦s, la esperp¨¦ntica f¨®rmula que el Gobierno de Francisco Camps ha encontrado para boicotear una materia contra la que se ha expresado el PP en reiteradas ocasiones. Apenas media hora despu¨¦s, fueron 3.000 profesores, de la ense?anza p¨²blica en Valencia, otros 3.000 en Alicante y un millar en Castell¨®n los que se manifestaron, apoyados por padres y alumnos y convocados por una plataforma unitaria para reclamar la retirada de la orden y pedir la dimisi¨®n del consejero de Educaci¨®n, Alejandro Font de Mora. En Valencia, una cadena rode¨® cinco veces el Palau de la Generalitat. La Education for Citizenship ha puesto en pie de guerra a los institutos, que acogieron la noche del jueves encierros previos a las protestas de ayer.

La propuesta biling¨¹e cuesta 8,5 millones de euros, seg¨²n la consejer¨ªa

Una cadena humana rode¨® cinco veces el Palau de la Generalitat

"Desde los a?os setenta, nunca los equipos directivos, que son parte fundamental de la administraci¨®n educativa, se hab¨ªan enfrentado a una Administraci¨®n auton¨®mica, como es el caso del Gobierno de Francisco Camps", se?al¨® la Comisi¨®n Permanente de Directores de Secundaria, que representa a los equipos directivos de los 363 institutos p¨²blicos valencianos, despu¨¦s de que Camps mantuviera en el pleno de las Cortes, celebrado por la ma?ana, que su posici¨®n de dar Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa en ingl¨¦s es "coherente".

"Algunos llevamos trabajando m¨¢s de 20 a?os en la educaci¨®n p¨²blica y nunca desde la transici¨®n hab¨ªamos asistido a un proceso de involuci¨®n pol¨ªtica" como la ocurrida en Valencia con la "obstinaci¨®n" del presidente de mantener a toda costa su singular versi¨®n de Ciudadan¨ªa bajo "el disfraz de que es un programa pluriling¨¹¨ªstico", resumi¨® Josep Lluis Peris, director del instituto Ravatxol, de Valencia.

"En una comunidad como la nuestra, donde en 20 a?os la Administraci¨®n no ha sido capaz de garantizar el correcto biling¨¹ismo en todas las etapas del sistema educativo, hablar de triling¨¹ismo", en opini¨®n de Vicent Baguetto, director del instituto Joan Fuster, de Sueca (Valencia), "es una trampa".

"Es como si yo quisiera ma?ana dar todas las clases de matem¨¢ticas de segundo curso de la ESO en ingl¨¦s", a?adi¨® Ximo Carri¨®n, del instituto Juan de Garay, de Valencia. "No digo que no implante el ingl¨¦s. Pero si no tengo los medios, ni los profesores, ni s¨¦ si los alumnos me entender¨¢n, no puedo dar la clase. Es absurdo. Los directores somos los m¨¢s perjudicados por toda esta situaci¨®n, porque estamos presionados por arriba por la propia administraci¨®n educativa y por abajo por los claustros de profesores que no aceptan los cambios de normativa y el caos en los horarios".

La Consejer¨ªa de Educaci¨®n ha hecho desde junio cuatro "instrucciones" diferentes sobre c¨®mo deben implantar los equipos directivos la Ciudadan¨ªa en ingl¨¦s, pese a la suspensi¨®n cautelar parcial por parte del Tribunal Superior de Justicia, que rechaz¨® la obligaci¨®n de que la asignatura se eval¨²e en un idioma extranjero.

"Lo que no se puede hacer es usar a los alumnos para una batalla pol¨ªtica y partidista contra el Gobierno central, porque la Administraci¨®n auton¨®mica no puede secuestrar a los alumnos de esta forma", concluy¨® Peris.

Nadie sabe a¨²n c¨®mo acabar¨¢ el choque frontal que existe en este momento entre la Generalitat y los diversos estamentos de la comunidad educativa, incluido un sector importante de los inspectores que se han negado -a trav¨¦s de un manifiesto p¨²blico difundido por la asociaci¨®n profesional mayoritaria Adide- a ejercer de "comisarios pol¨ªticos". Los 123 inspectores rechazan volver a entrar en las aulas de secundaria "como en los tiempos franquistas", en mitad de una clase, para interrogar al profesor delante de sus alumnos, cumpliendo con las "instrucciones" dadas por escrito.

La duplicidad de recursos movilizados por la Generalitat hacia Citizenship, para que un profesor de ingl¨¦s traduzca al encargado de impartir la materia, tiene un coste estimado en documentos internos de la propia consejer¨ªa de unos 8,5 millones de euros, mientras hay institutos donde faltan profesores de matem¨¢ticas o de m¨²sica y no se cubren las bajas.

La amenaza de expedientes disciplinarios a quienes no se plieguen a las instrucciones por la Generalitat, que son la mayor¨ªa de los docentes, llev¨® a los profesores de Ciudadan¨ªa a declarar la guerra a Camps y amenazar desde concurridas asambleas con paralizar la ense?anza p¨²blica si se expedienta a alguien. Las protestas de ayer son las primeras de un calendario que proseguir¨¢ las pr¨®ximas semanas.

Gemma Piqu¨¦, presidenta de la federaci¨®n de padres y madres de alumnos, que ley¨® el manifiesto en la concentraci¨®n de ayer ante la Generalitat, replic¨® a Camps y dijo que "la pol¨ªtica educativa del PP no es precisamente un ejemplo de coherencia. El PP quiere disfrazar de programas pluriling¨¹es su propio fracaso normativo. Para ellos, es como si la comunidad educativa no existiera".