Victoria de oficio y beneficio
El Sevilla, sin sus delanteros habituales, vence al Almer¨ªa con un gol de Adriano
Al Sevilla le toc¨® picar piedra. Con la enfermer¨ªa repleta de jugadores habituales, los de Jim¨¦nez libraron un encuentro de pico y pala. El Almer¨ªa, un equipo que trata de continuar con Arconada la herencia del toque que dej¨® Emery, opt¨® por hacerse con el mando del encuentro. Pero se desmembr¨® y le entraron los nervios despu¨¦s de que Adriano adelantara al Sevilla.
Con tres delanteros de visita en la enfermer¨ªa (Kanout¨¦, Chevant¨®n y Kon¨¦) y otro en la sala de espera (Luis Fabiano), Jim¨¦nez rebusc¨® en el caj¨®n y encontr¨® a Acosta. Y el argentino plant¨® cara a Chico y Pellerano. Ante la falta de prestancia f¨ªsica, lejos de la corpulencia de Kanout¨¦, Acosta exprimi¨® al m¨¢ximo sus recursos. Su cuerpo menudo se desliz¨® por todo el ancho y el largo del ¨¢rea de Alves, pero el resultado fue m¨¢s bien infructuoso. Ni Romaric ni Maresca enlazaron con ¨¦l. Tampoco Navas ni Adriano, aposentados en las bandas, parec¨ªan acordarse del n¨¢ufrago Acosta.
ALMER?A 0 SEVILLA 1
Almer¨ªa: Diego Alves; Bruno, Chico, Pellerano, Man¨¦; Juanito, Soriano (Natalio, m. 73); Ortiz (Uche, m. 66), Julio ?lvarez, Corona (Solari, m. 83); y Negredo. No utilizados: Esteban; Acasiete, Carlos Garc¨ªa y Crusat.
Sevilla: Palop; Konko, Prieto, Escud¨¦, Fernando Navarro; Maresca (Fazio, m. 68), Duscher; Navas, Romaric, Adriano (Armenteros, m. 76); y Acosta (Fernando, m. 88). No utilizados: Javi Varas; Squillaci, Crespo y Carre?o.
Gol: 0-1. M. 52. Maresca bota un c¨®rner, que despeja Chico. El rechace lo aprovecha Adriano, que con una volea bate a Alves.
?rbitro: Daud¨¦n Ib¨¢?ez. Amonest¨® a Navas, Natalio, Romaric y Fernando.
Unos 20.000 espectadores en el estadio Juegos Mediterr¨¢neos.
El Almer¨ªa se mimetiz¨® con el juego del Sevilla. Los de Arconada olvidaron que los goles dan la victoria y dejaron a Negredo, m¨¢s s¨®lo que la una, para que se buscara las casta?as entre la solidez que demostraron ayer Escud¨¦ y Prieto. Quiso el Almer¨ªa amoldar el bal¨®n a las botas de Soriano y Julio ?lvarez, que bailaron en el centro del campo hasta la extenuaci¨®n. Pero los metros que ganaban en horizontal los dejaban de ganar en la vertical. Mientras tanto, Negredo, a verlas venir. El madrile?o, que est¨¢ registrando un buen inicio de temporada, recurri¨® a la fuerza de sus envites desde fuera del ¨¢rea. Ni con ¨¦sas Palop, resguardado bajo los palos, mostr¨® s¨ªntomas de preocupaci¨®n.
El descanso le vali¨® a ambos equipos para sacudirse la galbana. La mordiente de la que carecieron los delanteros del Sevilla y el Almer¨ªa en el primer tiempo resurgi¨® a la vuelta de los vestuarios. Los de Jim¨¦nez subieron de marcha y el Almer¨ªa se desubic¨® en siete minutos. El tiempo que tard¨® Adriano en despertar del letargo y adelantar a su equipo.
Arconada busc¨® un reactivo con la entrada de Natalio y Uche. Los rojiblancos recuperaron la posici¨®n en el campo y rondaron con m¨¢s frecuencia el ¨¢rea de Palop. Cuando el partido vir¨® hacia lo atl¨¦tico, Jim¨¦nez reforz¨® el Sevilla con Fazio. El Almer¨ªa se march¨® en tromba en busca del empate, pero los sevillistas pusieron el cerrojo. A punto estuvieron los almerienses de pagar m¨¢s caro su exceso de ¨ªmpetu. Pero ni Acosta ni el canterano Armenteros, que debut¨® en la m¨¢xima categor¨ªa con el equipo de Nervi¨®n, consiguieron sentenciar. No fue el mejor partido del Sevilla, pero tir¨® de oficio para sumar una nueva victoria. El Almer¨ªa pec¨® de impetuoso.
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