La casa no es una escuela
M¨¢s de 400 familias reclaman tener la posibilidad de educar a sus hijos en el hogar - Espa?a defiende que la convivencia entre los ni?os es una materia imposible de sustituir
El debate sobre la escolarizaci¨®n en casa se abre paso en Espa?a de la mano del Pa¨ªs Vasco, donde el PP y el Defensor del Pueblo defienden su regulaci¨®n, y de una realidad marcada por extranjeros que habitan parte del a?o en la costa. Buena parte de los socios europeos y EE UU lo permiten.
?Es posible aprender en casa todo lo que se ense?a en el colegio? ?Pueden un padre o una madre sustituir a los profesores en la evaluaci¨®n de sus hijos? Quienes defienden la educaci¨®n en casa o homeschooling sostienen que s¨ª, que los ni?os pueden formarse en el hogar como si fuera un aula, que su madre puede ilustrarles sobre las matem¨¢ticas mientras el padre prepara los dictados de lengua, como ocurre en otros pa¨ªses y como exige un grupo de familias espa?olas que ha llevado el debate al Parlamento vasco.
Ayuntamientos y servicios sociales deben controlar la escolarizaci¨®n
El PP es partidario de estudiar "un fen¨®meno muy nuevo"
"Mis hijas tienen m¨¢s flexibilidad para saber qu¨¦ quieren", dice un padre
El Defensor del Menor: "Los padres tienden a la sobreprotecci¨®n"
En Espa?a la escolarizaci¨®n es obligatoria. Educar en casa -una opci¨®n asociada a ¨¦lites y a familias antisistema- es ilegal salvo en tres supuestos: enfermedad del alumno, vida itinerante o residencia en el extranjero. El resto se equipara al absentismo, un fen¨®meno sin cifras oficiales. La Asociaci¨®n de Libre Educaci¨®n (ALE) cuenta unas 400 familias en Espa?a. Esta agrupaci¨®n, que tiene el respaldo del Defensor del Pueblo, ha conseguido involucrar en su causa al PP vasco, que presentar¨¢ una segunda iniciativa antes de Navidad para su regulaci¨®n. Los que est¨¢n a favor defienden que se puede dar una atenci¨®n m¨¢s personalizada a cada ni?o. Quienes est¨¢n en contra, dicen que la socializaci¨®n se alcanza en la escuela y que ning¨²n padre o madre es competente en todas las disciplinas.
Ketty S¨¢nchez, con cuatro hijos de 7 a 13 a?os, lleva casi dos a?os ense?¨¢ndoles en su casa de Ir¨²n. Quer¨ªa agrupar a sus ni?os en un colegio concertado religioso, pero s¨®lo entraron dos. Y decidi¨® hacerlo por su cuenta. Ayuntamientos y servicios sociales son quienes deben controlar que los ni?os est¨¦n escolarizados. Lo hacen gracias a denuncias policiales o de vecinos que encuentran a los menores en la calle en horario lectivo. Pero no existe un organismo espec¨ªfico que controle a quienes est¨¢n en sus domicilios, seg¨²n un portavoz del Ayuntamiento de Madrid. Adem¨¢s, si el caso acaba en denuncia, lo normal es enfrentarse s¨®lo a sanciones administrativas, como la supresi¨®n de subvenciones, explica una portavoz del Ministerio de Educaci¨®n. La cuesti¨®n dif¨ªcilmente entrar¨¢ en el terreno penal.
"No tengo constancia de sentencias condenatorias", indica Jaime Tapia, ex juez de menores de Vitoria y miembro de Jueces para la Democracia. "Es un tema ilegal pero no implica que se produzca una infracci¨®n penal", a?ade. El caso de Ketty S¨¢nchez lleg¨® a la Fiscal¨ªa de Menores de Guip¨²zcoa por una denuncia de la inspecci¨®n educativa que acab¨® archivada con ese mismo argumento. Esta mujer dirige una academia de idiomas con su marido, el norteamericano Michael Branson. Los primeros meses de homeschoo-ling, sus hijos segu¨ªan las lecciones con el manual de su antiguo colegio desde el sal¨®n. "Eran las asignaturas b¨¢sicas pero ense?adas m¨¢s r¨¢pido", cuenta S¨¢nchez, licenciada en Lengua e Historia. Sus hijos dedican cuatro horas, de 9.00 a 13.00, a matem¨¢ticas, lengua, historia, geograf¨ªa, literatura o conocimiento del medio. Por las tardes van a la academia a aprender ingl¨¦s, alem¨¢n y euskera, dan m¨²sica y juegan. Todos tocan el piano y otro instrumento. En la academia conviven con otros ni?os y un viernes al mes se re¨²nen con m¨¢s familias partidarias del homeschooling. Consideran que es suficiente para que sus hijos se socialicen.
Pero, para distintos expertos, la convivencia no es completa sin pasar por las aulas. "Se trata de que coincidan edades distintas, culturas diferentes, gente con discapacidad, de otros pa¨ªses..., eso s¨®lo lo puede dar la escuela", seg¨²n Miguel Recio, ex miembro del Consejo Escolar del Estado. "La instituci¨®n escolar contribuye a que los estudiantes aprendan a vivir juntos, a respetarse, a ser solidarios, a construir sus propios valores mediante la reflexi¨®n y el encuentro con los valores de los otros. La educaci¨®n en casa tiene el serio riesgo de perder esa posibilidad enriquecedora", a?ade ?lvaro Marchesi, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa Evolutiva y Educaci¨®n y ex secretario de Estado. "No es lo mismo saber que saber ense?ar, ning¨²n padre tiene derecho a dar una asignatura de manera parcial a su hijo", a?ade Arturo Canalda, Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid.
Los expertos establecen cuatro categor¨ªas generales de homeschooler: sectas ideol¨®gicas o religiosas, formas de vida alternativas, desencantados de la escuela que creen que pueden hacerlo mejor o quienes se adaptan, por ejemplo, a un dif¨ªcil horario por estudios art¨ªsticos o deportivos. Y considera que cada forma deber¨ªa considerarse de manera distinta. En lo que s¨ª coinciden casi todos es en que no es lo mismo faltar a clase por ser absentista que por aprender en casa. Y en que deber¨ªa considerarse de forma diferente.
?C¨®mo est¨¢ contemplado hasta ahora? La Constituci¨®n establece la obligaci¨®n de una educaci¨®n b¨¢sica y gratuita. No alude a la escolarizaci¨®n. S¨ª lo hace la Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE) que obliga a 10 a?os de escolaridad. Los padres que educan en casa se aferran a que la Constituci¨®n deja la puerta abierta y a la Declaraci¨®n de Derechos Humanos, que les da un "derecho preferente" para elegir la educaci¨®n de sus hijos. "Dentro del marco educativo existen centros con idearios distintos que garantizan la atenci¨®n a la diversidad sin necesidad de educar en casa", rebate Javier Vidal, director general de Evaluaci¨®n y Ordenaci¨®n del Sistema Educativo del Ministerio de Educaci¨®n. Vidal considera que permitir esta opci¨®n ser¨ªa "muy dif¨ªcil de controlar" porque habr¨ªa que crear un sistema alternativo de seguimiento de esos alumnos.
Los padres que educan en casa se apoyan en los ejemplos de otros pa¨ªses (Francia, Inglaterra, Italia, Portugal o Estados Unidos, entre otros) para reclamar que no es tan dif¨ªcil. Paco Gonz¨¢lez, doctor en Pedagog¨ªa, mantuvo la matr¨ªcula de sus dos hijas, de 17 y 13 a?os, en Inglaterra cuando se mud¨® a Alcal¨¢ de Henares (Madrid). Se educan en casa y se examinan por libre fuera. Asegura que su modelo ha permitido "m¨¢s flexibilidad" a sus hijas para descubrir lo que m¨¢s les gusta. Daniela, la mayor, es una apasionada de la danza, la fotograf¨ªa art¨ªstica y el dise?o. Para el curso que viene buscar¨¢ una universidad inglesa en la que estudiar moda.
La peque?a, Stephanie, se levanta dos horas antes de empezar sus clases para tocar el piano. La familia entera se apunt¨® este verano a un campamento como monitores de ingl¨¦s. Hacen muchas actividades juntos, algo que tampoco aprueban los expertos en educaci¨®n. "Tal vez no sea bueno que coincida a?o tras a?o la autoridad acad¨¦mica y la autoridad familiar", se?ala Marchesi. "En estos modelos hay una tendencia a la sobreprotecci¨®n, el ni?o se tiene que caer en el patio, discutir con los compa?eros..., una familia no puede suplir al profesor ni a los compa?eros de clase", a?ade Canalda.
El Defensor del Pueblo y el Defensor del Pueblo Andaluz piden a las administraciones un estudio detallado y una regularizaci¨®n. El ¨²ltimo en pronunciarse ha sido ??igo Lamarca, el ararteko (Defensor del Pueblo vasco), que en una resoluci¨®n de este a?o resalta "la necesidad" de debatir un posible reconocimiento legal de esta f¨®rmula con una salvedad: los derechos del ni?o. "Los padres no pueden dar la educaci¨®n que quieran a sus hijos porque no son de su propiedad; esa educaci¨®n tambi¨¦n compete a los poderes p¨²blicos y no puede ser un subterfugio para que los padres tengan carta blanca", explica.
El Ararteko recibi¨® una queja de Ketty S¨¢nchez. El PP vasco tambi¨¦n llev¨® su caso al Parlamento en primavera de la mano de su portavoz de Educaci¨®n, I?aki Oyarzabal. "No queremos un vac¨ªo legal que pueda desproteger a las familias", explica Oyarzabal, que pide "una regulaci¨®n que garantice la educaci¨®n del ni?o y la libertad de elecci¨®n de los padres". Medio a?o despu¨¦s de la comparecencia de Ketty S¨¢nchez en el Parlamento, el PP presentar¨¢ otra iniciativa para exigir al Gobierno vasco que se pronuncie sobre la regulaci¨®n antes de diciembre, antes de las elecciones. "Quieren mirar para otro lado y dejar correr la legislatura, pero volveremos a reclamar un debate", asegura Oyarzabal. A escala nacional, el PP va un paso por detr¨¢s. No exige una regulaci¨®n, pero s¨ª abre la puerta a estudiar un fen¨®meno "muy nuevo en Espa?a", seg¨²n Juan Antonio G¨®mez Trinidad, portavoz popular de Educaci¨®n en el Congreso. Los miembros de ALE reclaman que no obliguen a sus hijos a escolarizarse en un modelo que "no puede ofrecer todas las garant¨ªas", seg¨²n Ketty S¨¢nchez. "No da todas las garant¨ªas ni lo pretende, no puede sustituir a los medios de comunicaci¨®n, a la vida, a la familia, pero todo el conjunto es mucho m¨¢s ¨²til para formar ciudadanos", rebate Miguel Recio.

La regulaci¨®n por pa¨ªses
- Espa?a. La Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE) establece 10 a?os de escolaridad obligatoria para todos los alumnos. La Constituci¨®n se?ala que es obligatoria la educaci¨®n, no la escolarizaci¨®n, un extremo al que se aferran los padres que optan por ense?ar en casa para exigir que se regule su opci¨®n.
- Portugal. En el pa¨ªs vecino se reconoce el derecho de los padres a orientar el proceso educativo de los hijos, seg¨²n el Decreto Ley 556-80. Pueden educar en casa someti¨¦ndose a evaluaciones a los cuatro, seis y nueve a?os.
- Francia. El c¨®digo de educaci¨®n franc¨¦s establece que la educaci¨®n es obligatoria entre los 6 y los 16 a?os y que puede ser impartida por instituciones p¨²blicas o privadas y uno de los padres o la persona que ellos elijan.
- Italia. El modelo italiano permite desde 1994 la educaci¨®n en casa, pero establece en un decreto ley la obligaci¨®n de los padres de demostrar que tienen la capacidad t¨¦cnica y econ¨®mica para ejercer de profesores, adem¨¢s de informar cada a?o a la autoridad competente.
- Reino Unido. La educaci¨®n en casa est¨¢ recogida en The Education Act (1996), que se?ala que los padres de hijos en edad escolar deben facilitarles la educaci¨®n a tiempo completo adecuada para su edad, habilidad y aptitudes o necesidades especiales en una escuela "o de otra manera", lo que deja la puerta abierta a quienes optan por el homeschooling.
- B¨¦lgica. Hace m¨¢s de 25 a?os que la educaci¨®n a domicilio est¨¢ permitida para las familias belgas. El art¨ªculo 1 de la Ley sobre la Obligaci¨®n Escolar admite esta opci¨®n, pero se?ala que las condiciones las debe fijar el Gobierno.
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