Nace la Oficina Antifraude para agilizar la lucha contra la corrupci¨®n

El Parlament dio luz verde ayer, tras cuatro a?os de tensas negociaciones, a la ley de la Oficina Antifraude de Catalu?a, con los votos de las tres formaciones del tripartito y de Ciutadans. Este organismo nace con la misi¨®n de "luchar contra la corrupci¨®n" tal como se encarg¨® de subrayar el parlamentario de Esquerra Republicana, Xavier Vendrell, padrino de la ley. Esta oficina, pionera en las comunidades aut¨®nomas, se encargar¨¢ de prevenir e investigar posibles casos de corrupci¨®n no s¨®lo de la Generalitat, sino de todas las administraciones p¨²blicas catalanas, elemento que fue motivo de controversia entre socialistas y republicanos. Los primeros quer¨ªan limitar sus competencias a la Administraci¨®n auton¨®mica.

Tras el hundimiento en el barrio del Carmel de Barcelona, en enero de 2005 y las veladas sospechas de corrupci¨®n entre PSC y CiU, el tripartito del socialista Pasqual Maragall, auspiciado por ERC, se impuso la creaci¨®n de este organismo fiscalizador. El proceso judicial del Carmel se sald¨® sin responsables y en la actualidad, los vecinos se benefician de ayudas y realojamientos.

Ante los recelos de CiU y PP por el posible solapamiento entre las funciones de la oficina y la Sindicatura de Cuentas, el mismo Xavier Vendrell precis¨® que la primera podr¨¢ actuar ex ante, es decir, antes de la materializaci¨®n del presunto delito. La ley especifica que, al menor indicio delictivo, los responsables de la Oficina Antifraude deber¨¢n acudir a la Justicia. Ante las cr¨ªticas de nacionalistas y populares, los portavoces del tripartito destacaron que la ley preserva la independencia de este organismo al hacerlo depender del Parlament y no del Gobierno. "Es un organismo independiente, no gubernamental", subray¨® el republicano.

Para remarcar la independencia de la oficina, el puesto de director tendr¨¢ un mandato de nueve a?os -no prorrogable- que sobrepasa el periodo de dos legislaturas auton¨®micas. Adem¨¢s, ser¨¢ el Parlament el que refrende su nombramiento por una mayor¨ªa de tres quintas partes, despu¨¦s de que el aspirante supere una criba de una comisi¨®n de la C¨¢mara. La Oficina Antifraude dispondr¨¢ de un presupuesto aproximado de 4,2 millones de euros para 2009 y ocupar¨¢ a 41 personas.

La aprobaci¨®n de la norma ha tenido que superar casi cuatro a?os de negociaciones, sobre todo entre los socios del tripartito, y dos dict¨¢menes del Consejo Consultivo. En el primer informe se despoj¨® a la oficina de cualquier potestad penal, pues se otorgaba algunas funciones propias de la fiscal¨ªa y ten¨ªa adscritos 15 agentes de los Mossos. En el segundo dictamen, el Consultivo certific¨® la subsidiariedad de la oficina respecto a la Sindicatura de Cuentas y el Tribunal de Cuentas.

En el debate parlamentario de ayer, el convergente Llu¨ªs Corominas denunci¨® que la Oficina Antifraude carece de "espacio competencial", mientras que la popular Bel¨¦n Pajares augur¨® "conflictividad permanente" y "trifulcas" con otros organismos, como la Sindicatura.