Un historiador del presente
No es cierto que la llamada "memoria hist¨®rica" sea una discusi¨®n ociosa s¨®lo apta para espa?oles desocupados y rencorosos y menos cierto todav¨ªa es que el nuestro sea el ¨²nico pa¨ªs de Europa donde preocupan tales cosas. La historiograf¨ªa del Holocausto y la del Ventennio, el remordimiento en los pa¨ªses ocupados por la Alemania nazi, el recuerdo del Gulag en lo que fue la Uni¨®n Sovi¨¦tica..., todos estos son motivos de autoconocimiento y reflexi¨®n que tienen presentes los grandes historiadores de todo el continente y que inspiran la mejor narrativa europea de hoy mismo.
?Nos extra?ar¨¢, pues, que un espa?ol nacido en Barcelona, en 1953, se preocupe por la fenomenolog¨ªa del fascismo y haya escrito al prop¨®sito algunos libros ya imprescindibles? La ha analizado en sus formas populistas latinoamericanas, o en sus pervivencias de la ultraderecha de ahora mismo, o en el modelo alem¨¢n cl¨¢sico (recu¨¦rdense sus libros De M¨²nich a Auschwitz y De Auschwitz a Berl¨ªn, una impresionante historia de Alemania entre 1945 y 2004, y Todos los hombres del F¨¹hrer). Y lo ha hecho tambi¨¦n en el caso del fascismo espa?ol, como se advierte en una penetrante biograf¨ªa de su l¨ªder, Ramiro Ledesma Ramos.
Gallego -lector bul¨ªmico de novelas y espectador de pel¨ªculas- tiene una brillante capacidad de narrar las cosas, de evocar ambientes y de penetrar razones..., aunque ¨¦stas sean irracionales. Y eso proporciona a su ¨²ltima obra, El mito de la transici¨®n, su excepcional importancia: adem¨¢s de una apabullante taracea de lecturas de peri¨®dicos y de an¨¢lisis de intenciones, esta monograf¨ªa densa y casi agobiante est¨¢ escrita desde la orilla de la independencia pero nunca desde los riscos de la autosuficiencia o del infantilismo radical. Y por eso ha venido a ser un libro necesario, como lo fue hace a?o y pico el escrito por Nicol¨¢s Sartorius y Alberto Sabio, pero como no lo ser¨¢n, sin duda, las repetidas historias almibaradas de periodistas y de testigos, tan encantados, sin duda, de haberse conocido.
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