"M¨¦xico me ha dado libertad"
Mujeres bravas, que esconden su miedo, que se crecen en las adversidades. Vengadoras a sangre y fuego en un mundo de g¨¢nsteres y matones mexicanos. F¨¦minas que pelean con los pu?os, que empu?an pistolas para matar. No son hero¨ªnas, son mujeres de carne y hueso que en los momentos de crisis descubren su fuerza y valor, sin estridencias, de manera constante y pensativa, que responden a la brutalidad con la brutalidad, que se rebelan contra el destino que les quieren imponer. As¨ª son las protagonistas de S¨®lo quiero caminar, la cuarta pel¨ªcula de Agust¨ªn D¨ªaz Yanes (Madrid, 1950), que se estrena el pr¨®ximo viernes.
Protagonizada por las actrices espa?olas Victoria Abril, Pilar L¨®pez de Ayala, Ariadna Gil y Elena Anaya y los mexicanos Diego Luna y Jos¨¦ Mar¨ªa Yazpik, S¨®lo quiero caminar es una historia realista, de violencia y acci¨®n, rodada en M¨¦xico y C¨¢diz. El filme narra la vida de cuatro mujeres, cuatro supervivientes unidas por la mala suerte, la pobreza y el miedo, que se dedican a sobrevivir a base de peque?os atracos. Una de ellas, Ana, ejerciendo la prostituci¨®n, conoce en Espa?a a un rico y poderoso g¨¢nster mexicano. Se casar¨¢ en M¨¦xico, un pa¨ªs donde s¨®lo encuentra dolor. Sus tres amigas viajan a M¨¦xico para urdir una venganza cruel.
"La actual es la mejor generaci¨®n de actrices de nuestra historia"
"La violencia en la pantalla, para bien o para mal, tiene que ser expl¨ªcita"
"Si hay alg¨²n homenaje es a Victoria Abril, mi madrina en el cine"
"En Espa?a hay una generaci¨®n de actrices que es probablemente la mejor de la historia de nuestro cine. ?sta es una de las razones por las que pens¨¦, ya durante el rodaje de Alatriste, en hacer una pel¨ªcula de mujeres atracadoras. La otra, probablemente m¨¢s importante, es que en el cine espa?ol este tipo de papeles no son frecuentes. Hemos visto mil veces a hombres atracadores, pero nunca a mujeres. Para m¨ª, es mejor ver a ellas con un rifle en la mano que a ellos, porque te sorprende", asegura D¨ªaz Yanes, que con S¨®lo quiero caminar ha cumplido alguno de sus sue?os: rodar en M¨¦xico, hacer un filme con canciones, tener a Paco de Luc¨ªa y trabajar con Javier Lim¨®n, "el productor y m¨²sico m¨¢s vanguardista de Espa?a".
M¨¦xico dio un vuelco a la historia. "Hacer la pel¨ªcula en Espa?a era complicado porque, aunque es verdad que hay mafias en todo el mundo, nuestro pa¨ªs, afortunadamente, no es violento en s¨ª mismo. Hay incidentes, es verdad, pero nadie viene a Madrid pensando que es una ciudad violenta, aunque luego te roben el bolso en el Museo del Prado. No ten¨ªa muy claro d¨®nde rodar, hasta que Jos¨¦ Manuel Lorenzo [productor del filme] apunt¨® la idea de M¨¦xico. Fue entonces cuando la pel¨ªcula creci¨®".
En M¨¦xico DF, donde rod¨® durante dos meses, encontr¨® el director la joya de las joyas para esta historia de matones, narcotraficantes y violencia. "Veinticinco millones de habitantes, un plat¨® bestial, donde t¨² pones la c¨¢mara y lo encuentras todo. Hay violencia extrema, violencia media, tambi¨¦n peque?a, lujo, pobreza, f¨ªsicos absolutamente diferentes en cada barrio", explica D¨ªaz Yanes, que ha trabajado con un equipo compuesto en su mayor¨ªa por profesionales mexicanos. Y de su voz, reposada pero ronca de puro tabaco, s¨®lo salen alabanzas. "Me he encontrado con una gente trabajadora, inteligente y cosmopolita. He dirigido en otra dimensi¨®n, con personas entusiastas que aman el cine y que lo que quieren es hacer cine de verdad".
En total han sido 90 localizaciones en M¨¦xico DF, una ciudad que ha conservado mucha arquitectura y muy colosal. El peligroso barrio de Tepito -el gran mercado de la droga y de objetos robados-, las colonias Obrero y Doctores, la avenida Reforma, grandes edificios sociales muy emblem¨¢ticos. Ha indagado tambi¨¦n, con la ayuda de Diego Luna y el coproductor mexicano Pablo Cruz, que le hicieron un estudio de m¨¢s de 100 p¨¢ginas de c¨®mo era la delincuencia mexicana, en c¨®mo se mueven, en c¨®mo lavan el dinero, en c¨®mo tratan los negocios, en c¨®mo es el tr¨¢fico en las aduanas. Todo ello para crear esa atm¨®sfera densa y peligrosa que precisaba el largometraje. "Cada pel¨ªcula te da una cosa nueva, y a m¨ª ¨¦sta me ha dado mucha libertad. En M¨¦xico he encontrado una libertad mental para rodar que no hab¨ªa conocido en Espa?a".
Sabe D¨ªaz Yanes que ha hecho una pel¨ªcula violenta, como no pod¨ªa ser de otra manera trat¨¢ndose de una historia en torno al crimen organizado. "La realidad es mucho peor", apunta el realizador, que a?ade que "los grandes g¨¦neros del cine siempre han sido violentos". "Ahora, para bien o para mal, la violencia en el cine tiene que ser expl¨ªcita, porque si no el espectador no se lo cree, pero siempre con la idea de que estamos haciendo cine y no un documental. No estoy especialmente preocupado por ello, porque el espectador est¨¢ suficientemente preparado como para saber que lo que est¨¢ viendo es una pel¨ªcula. A m¨ª me gustan los filmes violentos, encuentro en ellos adrenalina y emoci¨®n. Yo no comparto esa especie de tonter¨ªa que se ha instalado en algunos ambientes que abogan porque el cine es sociolog¨ªa. No, el cine es espect¨¢culo y como tal espect¨¢culo tiene unas reglas, igual que las tienen los toros o el f¨²tbol. El ejemplo m¨¢s b¨¢sico y cl¨¢sico es El Padrino [el filme de Francis Ford Coppola], unos g¨¢nsteres italoamericanos brutales que matan a su propio hermano y que no por ello te dejan de interesar. O Shakespeare, que fue el m¨¢s violento de todos".
Del reparto habla maravillas. De los actores mexicanos no tiene m¨¢s que palabras de admiraci¨®n. "Diego Luna es un actor superdotado, generoso e inteligente. Chema Yazpik es la bomba". De las actrices para qu¨¦ hablar. Despu¨¦s de trabajar con todas ellas, ha ido en su busca de nuevo, escribiendo los papeles expresamente para cada una. A Victoria Abril -"mi madrina en el cine"-, le ha dado un regalo. Su personaje, Gloria Duque, es el mismo, pero con 15 a?os m¨¢s, que realiz¨® en su primer filme, Nadie hablar¨¢ de nosotras cuando hayamos muerto. No hay melancol¨ªa en este recuerdo. "Yo no soy nada de melancol¨ªas, y Victoria menos. Yo no me veo d¨¢ndome homenajes a m¨ª mismo. Si hay alg¨²n homenaje es a Victoria porque yo estoy en el cine gracias a ella".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.