A Coru?a se viste de Wagner con 'La Valquiria'
La Orquesta Sinf¨®nica de Galicia inaugur¨® su temporada de abono con La Valquiria de Wagner. Aun en versi¨®n concierto es una obra monumental y requiere cien m¨²sicos y 14 solistas vocales. Sus grandes dificultades, su calidad musical y dram¨¢tica, suponen un reto que muy pocas orquestas pueden afrontar con tan s¨®lo 16 a?os de historia. Los aficionados coru?eses vivieron sus cinco horas, contando m¨²sica y pausas, con la intensidad emanada de este drama b¨¦lico e incestuoso de dioses y guerreros.
Desde el preludio del primer acto, el sonido compacto de la cuerda o el brillo y expresi¨®n de su excelente secci¨®n de trompas demostraron que la Sinf¨®nica est¨¢ a la altura de cualquier reto. A lo largo del concierto lo refrend¨® con solos extraordinarios e intervenciones entregad¨ªsimas de cada una de sus secciones.
Anja Kampe mostr¨® desde su comienzo por qu¨¦ es una Sieglinde de referencia en el actual paisaje wagneriano, siempre necesitado de voces adecuadas. La suya es un instrumento perfecto para el papel y en su interpretaci¨®n desarrolla una extensa gama de matices expresivos, de la duda a la pasi¨®n o de la ternura a la fiereza. Para los o¨ªdos m¨¢s exigentes fue la triunfadora de la noche. Attila Jun es un Hunding de libro, con voz potente y algo oscura e interpretaci¨®n sobria y seria de su dif¨ªcil personaje.
El Siegmund de John Treleaven mostr¨® gran bravura en los pasajes que la requieren. Por excesiva tensi¨®n en los agudos y unos pianos dif¨ªcilmente audibles, result¨® la voz m¨¢s floja del reparto. La de Juha Uusitalo le permite hacer un Wotan serio y cre¨ªble, sobre todo porque tiene el papel muy bien montado vocal y teatralmente. Elena Zaremba sali¨® a escena con una emisi¨®n ligeramente gutural, tal vez su voz estaba a¨²n algo fr¨ªa. Luego, su Fricka tuvo todo el car¨¢cter de diosa intolerante con las aventuras de cama de su esposo e inclemente con ¨¦ste, al que arrastra con sus exigencias a hechos de terribles consecuencias.
La B¨¹nhilde de Jennifer Wilson fue a m¨¢s. Su voz se crece en el esfuerzo y fue m¨¢s redonda en el tercer acto que en el segundo, mejor en la s¨²plica a Wotan que en la rebeld¨ªa, con agudos en forte algo escasos de aire, siempre de puntillas. Las valquirias: Sandra Fern¨¢ndez, Laura Alonso, Pilar V¨¢zquez, Teresa Novoa, Raquel Lojendio, M? Jos¨¦ Su¨¢rez, Manuela Bress y Francisca Beaumont mostraron su solidez actual y un esperanzador futuro. Dieron sobradamente la talla requerida.
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