Nostalgias de la ciudad perdida
La transformaci¨®n urbana de China se muestra a trav¨¦s de pel¨ªculas y objetos
Una enorme maqueta de Pek¨ªn realizada en 1999 se exhibe casi como pieza arqueol¨®gica. En menos de diez a?os, gran parte de los hutongs (barrios tradicionales) que en la maqueta rodean a la Ciudad Prohibida han sido demolidos y en su lugar han aparecido rascacielos y descomunales avenidas. Fr¨¦d¨¦ric Edelmann, comisario de la exposici¨®n En la ciudad china, abierta hasta el 22 de febrero en el Centro de Cultura Contempor¨¢nea de Barcelona (CCCB), explica que la Oficina de Urbanismo de Pek¨ªn prest¨® la maqueta, "que estaba sepultada bajo el polvo", a cambio de que tambi¨¦n se explicara la abrumadora transformaci¨®n urban¨ªstica de la ciudad.
"Lo hacemos encantados", dice Edelmann, mientras mira con cierta sorna las fotograf¨ªas de anodinos centros comerciales o las recreaciones hist¨®ricas que aparecen en la pantalla interactiva que explica los cambios de la capital.
Sucede igual, o mucho peor, en casi todas las ciudades -"s¨®lo Shanghai ha mantenido un poco su anterior aspecto en algunos barrios del centro", comenta Edelmann- y el resultado arquitect¨®nico, a?ade el comisario, ha sido hasta ahora de una gran mediocridad, con pocas excepciones, tanto en lo que respecta a los grandes edificios modernos como a las recreaciones tematizadas para turistas... chinos. "Es como si los europeos quisi¨¦ramos recuperar nuestro patrimonio y s¨®lo nos centr¨¢ramos en reconstruir lo que se hizo durante el imperio romano", afirma.
La exposici¨®n no es tanto de arquitectura como de sociolog¨ªa urbana y abundan, tambi¨¦n en el cat¨¢logo, datos interesantes sobre un pa¨ªs complejo en el que, por ejemplo, se calcula que hay unos 23 millones de ni?os que se han criado con sus abuelos y en el que los problemas medioambientales y de gesti¨®n del agua son angustiantes. Endelmann se?ala el mapa de recursos h¨ªdricos: "La mayor¨ªa de reservas est¨¢n en el Tibet; est¨¢ claro que no dejar¨¢n perder este recurso".
Tanto han querido rehuir los organizadores de la fascinaci¨®n que provocan estas megal¨®polis que casi cuesta ver im¨¢genes de las ciudades actuales. Muchas est¨¢n escondidas en los excelentes soportes audiovisuales que salpican esta exposici¨®n en la que abundan fotograf¨ªas de distintas ¨¦pocas, maquetas de arquitectura tradicional, piezas arqueol¨®gicas y gadgets modernos.
Organizada en dos grandes bloques que se entrelazan, uno tem¨¢tico (tierra, caracteres, jard¨ªn, familia, agua, construcci¨®n, fengshui, destrucci¨®n) y otro centrado en cinco ciudades (Pek¨ªn, Shanghai, Suzhou, Xi'an, Chongqing y Canton), la visita debe entenderse tambi¨¦n como una larga sesi¨®n de cine.
Y es que si se suma el tiempo que duran los cinco cortometrajes que otros tantos cineastas chinos -bajo la supervisi¨®n de Jia Zhangke (Le¨®n de Oro en Venecia en 2006 por Still Life)- han realizado para esta exposici¨®n, saldr¨ªa una pel¨ªcula est¨¢ndar que podr¨ªa tener como hilo conductor la soledad y el desarraigo.
En uno de ellos (A?o nuevo, de Li Hongqi), dos agentes de seguros se cruzan en un patio de Cant¨®n. "?Sabe d¨®nde est¨¢ el Norte?", dice uno. "Lo he olvidado", responde el otro. ?sa es la sensaci¨®n.
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