Protecci¨®n de Datos rechaza el control de alumnos del instituto de Abastos
La agencia ya se opuso a las c¨¢maras en ba?os y a la identificaci¨®n dactilar
La pol¨¦mica en torno al sistema de control de alumnos del instituto p¨²blico de Abastos subi¨® ayer varios grados: la Agencia de Protecci¨®n de Datos abri¨® una investigaci¨®n de oficio para esclarecer si la red de videovigilancia (24 c¨¢maras que graban, entre otros lugares, dos ba?os de mujeres); y el dispositivo de acceso (que identifica a los alumnos por la huella dactilar) son ilegales. La agencia estatal se?al¨® que las medidas "podr¨ªan resultar desproporcionadas e intrusivas para la privacidad de los alumnos", y "ser constitutivas de infracciones graves y muy graves de la Ley de Protecci¨®n de Datos".
Los sistemas de seguridad fueron denunciados el viernes por el Sindicato de Estudiantes y ayer, coincidiendo con la publicaci¨®n de un reportaje sobre el tema en EL PA?S, el director de la agencia, Artemi Rallo, orden¨® iniciar las investigaciones. El organismo cuenta ya, sin embargo, con dict¨¢menes e informes que analizan casos similares.
En uno de 2006 consider¨® "excesivo y desproporcionado" el uso de la huella dactilar como medio para identificar a los alumnos. En otro de este a?o, en el que participaron las autoridades europeas de protecci¨®n de datos, se establece que la videovigilancia debe "estar limitada" en los centros escolares, "teniendo especial cautela en ¨¢reas como gimnasios o zonas de recreo y existiendo ¨¢reas que no podr¨¢n contar con estos sistemas como vestuarios o ba?os". En t¨¦rminos m¨¢s generales, las c¨¢maras s¨®lo deben usarse cuando resulte imposible "adoptar otros medios menos intrusivos a la intimidad de las personas".
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n se?al¨® que cuando un instituto plantea consultas sobre videovigilancia (cerca de una decena de centros valencianos han instalado c¨¢maras) se limita a "remitir la legislaci¨®n" de protecci¨®n de datos. "No enviamos a un inspector a ver d¨®nde las han colocado", afirm¨® un portavoz del departamento de Educaci¨®n.
El director del Abastos, Alberto P¨¦rez, asegur¨® que el centro actu¨® de buena fe y que comunic¨® a la consejer¨ªa su intenci¨®n de implantar los sistemas antes de hacerlo. "Por supuesto, nosotros estamos a lo que digan los organismos oficiales. Si nos dicen que hay que retirar todas o algunas de las c¨¢maras, lo haremos. Doctores tiene la Iglesia", a?adi¨®.
El plan de la directiva del Abastos, que empez¨® a funcionar a principios de curso, no encontr¨® oposici¨®n en el consejo escolar, pero los profesores exigieron en el claustro no ser sometidos al control de huellas dactilares, y lo consiguieron. El instituto justific¨® la medida por el n¨²mero de alumnos (1.200), y por las grandes diferencias de edad. Al centro acuden chavales de 11 a?os y adultos de m¨®dulos de Formaci¨®n Profesional. Los primeros tienen prohibido abandonar las instalaciones pero, seg¨²n la direcci¨®n, a veces aprovechaban la salida "en tropel" de los mayores para escaparse.
Las c¨¢maras persegu¨ªan acabar con los "actos de vandalismo" y con los robos que se han producido en los ¨²ltimos a?os y, m¨¢s ampliamente, reducir la inseguridad. La asociaci¨®n de padres, que respald¨® las medidas, considera, pese a ello, que el instituto goza, en l¨ªneas generales, de un ambiente "tranquilo".
El Sindicato de Estudiantes convoc¨® ayer una asamblea en el instituto, pidi¨® la retirada de los nuevos sistemas de seguridad y volvi¨® a reclamar la dimisi¨®n "del director, y de los cargos de la consejer¨ªa" que autorizaron que fueran instalados.
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