Europa pide que el FMI sea el guardi¨¢n del sistema financiero internacional

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Uni¨®n acordar¨¢n hoy proponer medidas concretas y precisas para refundar el Fondo Monetario Internacional (FMI). El objetivo es dotarle de los instrumentos necesarios para el gobierno efectivo de las finanzas mundiales. Ante el calado sin precedentes de la crisis financiera, el Consejo Europeo quiere huir de declaraciones ret¨®ricas del estilo "refundar el capitalismo" u otras por el estilo del presidente franc¨¦s Nicolas Sarkozy, y en su lugar plantear medidas precisas y efectivas que aseguren la estabilidad financiera internacional.

Los acuerdos de la cumbre se llevar¨¢n como propuesta de la UE a la reuni¨®n del G-20 que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo 15 de noviembre en Washington. Al encuentro, adem¨¢s de los l¨ªderes de los pa¨ªses avanzados y emergentes, asistir¨¢n el presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso; el comisario de Asuntos Econ¨®micos y Monetarios, Joaqu¨ªn Almunia; el director gerente del FMI, Dominique Straus-Khan, y el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick.

Las conclusiones del Consejo Europeo proponen "confiar al FMI un papel central en una arquitectura financiera m¨¢s eficaz y m¨¢s incluyente", seg¨²n la ¨²ltima versi¨®n a la que ha tenido acceso este peri¨®dico. Con este prop¨®sito se propone "articular mejor los trabajos del FMI y del Foro de Estabilidad Financiera (FSE) con el objetivo de prevenir las crisis financieras" y "extender la competencia del FMI al conjunto de cuentas de capital". La propuesta se?ala que el FMI debe estar dotado de los recursos necesarios y de los instrumentos apropiados para "apoyar a los pa¨ªses en dificultades".

La UE promueve que las nuevas funciones de supervisi¨®n se asignen a instituciones, como el FMI, con los recursos e instrumentos suficientes y sobre todo con el control pol¨ªtico necesario para asegurar su eficiencia. Una tarea que hasta ahora estaba s¨®lo en manos del FSE, cuyas competencias son exclusivamente de tipo t¨¦cnico, pero que carece del poder pol¨ªtico necesario para adoptar las medidas convenientes ante crisis como la presente.

En el FSE, presidido por el gobernador del Banco de Italia, Mario Draghi, participan altos funcionarios de los bancos centrales de Australia, Canad¨¢, Francia, Alemania, Hong Kong, Italia, Jap¨®n, Holanda, Singapur, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos; organismos de supervisi¨®n como el Banco Internacional de Pagos de Basilea y el Consejo de Est¨¢ndares Internacionales de Contabilidad, y otros organismos como el FMI, Banco Mundial, Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo y Banco Central Europeo.

La cumbre deber¨¢ "fijar las orientaciones inmediatas sobre gobierno internacional (de las finanzas), poner en marcha el programa de trabajo preciso, para que sean presentadas en 100 d¨ªas, las propuestas concretas y operacionales sobre los asuntos identificados como prioritarios".

Junto a la refundaci¨®n del FMI, proponen otras iniciativas:

- Agencias de calificaci¨®n. Ser¨¢n sometidas a una vigilancia, as¨ª como a reglas de gobierno.

- Normas contables. Se promover¨¢ la convergencia de normas contables y "revisar¨¢ la aplicaci¨®n en el campo financiero la regla del valor razonable con el fin de mejorar su coherencia con el principio de prudencial".

- Supervisi¨®n de todo el mercado. Se tomar¨¢n medidas para que "ning¨²n sector del mercado, ning¨²n territorio, ni ninguna instituci¨®n escape a la regulaci¨®n o a la supervisi¨®n".

- C¨®digo de conducta. Se trata de evitar la toma de riesgos excesivos en la industria financiera, incluyendo los sistemas de remuneraci¨®n. Estos c¨®digos ser¨¢n analizados por los supervisores para evaluar el perfil de riesgo de las instituciones financieras.

Estas iniciativas estar¨¢n orientadas por unos principios que incluyen la coordinaci¨®n de la supervisi¨®n de los grupos financieros internacionales a trav¨¦s de colegios; la puesta marcha de un sistema de alerta temprana para identificar los riesgos; el reforzamiento de la vigilancia multilateral para prevenir y reabsorber los riesgos mundiales; armonizaci¨®n de las normas de prudencia aplicables, reforzar la transparencia de las operaciones y promover la responsabilidad de las operaciones de titulizaci¨®n y evitar la concentraci¨®n de riesgos a corto plazo, entre otros.