El primer vuelo del artista joven
Cuatro estudiantes de Bellas Artes que exponen en Ikas Art comentan su vocaci¨®n, sus obras y lo dif¨ªcil que resulta abrirse camino en el oficio
La palabra libertad surge con frecuencia en las conversaciones con algunos de los j¨®venes artistas que participan en la muestra de arte universitario Ikas Art. Quieren ser libres, dicen, del tedio de una rutina impuesta o de sus propios demonios, que terminan conjurados en sus obras. Todos coinciden en que esto de dedicarse al arte no se elige, sino que surge de una necesidad interior. El ¨²nico bien material que les interesa comprar es el tiempo necesario para seguir creando.
350 elegidos exponen sus obras hasta el pr¨®ximo domingo en la muestra de arte universitario Ikas Art. A los cuatro que hablan con EL PA?S no parece inquietarles demasiado que s¨®lo un ¨ªnfimo porcentaje de los participantes podr¨¢ vivir s¨®lo de su obra. "Si me gano la vida con mis cuadros, pues estupendo, pero si no buscar¨¦ algo relacionado con el arte. Y si toca trabajar en un bar, pues se hace. Nadie est¨¢ en esto por el dinero", explica David de Las Heras, de la UPV.
"Es fundamental tener un padrino. ?l te elige, te eleva, y ya est¨¢s dentro"
Quieren liberarse del tedio de una rutina impuesta y de sus demonios
?Qu¨¦ hace falta tener para vivir de su obra? "Talento, trabajo, suerte y conocer a la gente adecuada en el momento adecuado. Aunque sabemos que es poco menos que imposible", resume Alfonso Burgos, de Facultad de Bellas Artes de Murcia. "Es fundamental tener un padrino. ?l te elige, te eleva y ya est¨¢s ah¨ª", apunta Paloma Claver¨ªa, de la Universidad Complutense de Madrid. "Ya en la carrera te das cuenta de que esto no es matem¨¢tico. Todo es tan subjetivo que tienes que aprender a vivir con ello", a?ade. Cr¨ªticos, profesores y galeristas conforman los jurados que conceden premios y becas. Y si la rueda echa a andar, los galardones atraen a su vez otras becas, y los j¨®venes artistas terminan estando dentro del circuito.
Todos coinciden con la m¨¢xima de Picasso: "Cuando baje la inspiraci¨®n, que me pille trabajando". Pasan incontables horas dando forma a sus pensamientos, para que la diferencia entre lo imaginado y lo realizado no les deje sin dormir.
Lara Flux¨¤, de la Universidad de Barcelona, estaba fascinada por la ambig¨¹edad de algo tan simple como la sal, un mineral utilizado durante siglos para conservar los alimentos, pero que, esparcido sobre la tierra, convierte lo f¨¦rtil en ¨¢rido. "Llen¨¦ una mesa con agua y sal, y puse sobre ella algunas herramientas. El agua fue evapor¨¢ndose con el tiempo mientras la sal corro¨ªa las herramientas. La instalaci¨®n", explica, "va de eso: herramientas en estado de hibernaci¨®n, condenadas a no volver a servir".
La obra seleccionada de Alfonso Burgos, Sue?os binarios, surgi¨® como una catarsis al trauma de la muerte de su padre en febrero pasado. "Le empec¨¦ a dar vueltas a la idea de trascender el cuerpo gracias a la tecnolog¨ªa. ?Qu¨¦ pasar¨ªa si ya no tuvi¨¦ramos miedo, si curarse de un c¨¢ncer fuese tan sencillo como ir a comprar un pulm¨®n nuevo al Eroski?", propone.
En Homenaje a Saramago, David de Las Heras quiso trasladar dos conceptos de las novelas del premio Nobel portugu¨¦s a un retrato. "Estamos ciegos, estamos caminando hacia nuestra autodestrucci¨®n porque el progreso no ha sabido modularse", asegura. "No hemos sabido adaptarnos al medio".
Paloma Claver¨ªa propone en Escenarios para un crimen, fotograf¨ªas de espacios urbanos, sin testigos, en blanco y negro, donde el sugerente t¨ªtulo dispara la imaginaci¨®n del espectador. "Quise plasmar una ciudad troceada, representada como naturaleza muerta y derrotada".
![De izquierda a derecha, Alfonso Burgos, Lara Flux¨¤, David de las Heras y Paloma Claver¨ªa, en la muestra de Ikas Art de Sodupe.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/LBFLJS3QQSNTL2QJAA3VMWW5KM.jpg?auth=6b1a35ec155ebfc7b4b74f12ac4d0f1b3b466d33627d5da266be444b93b334f4&width=414)
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