MADRID YA TIENE A SU BANKSY
EL arte de este madrile?o consiste en la reapropiaci¨®n juguetona de elementos urbanos. Su producci¨®n proviene de la observaci¨®n del entorno, un sentido que ha afilado tras a?os de graffitero. Es cuidadoso con el contexto, y su actitud, constructiva, no invasiva". El que as¨ª habla es KanYe West, superestrella del hip hop angelino, blogger y coolhunter ocasional. El madrile?o en cuesti¨®n es SpY, misterioso artista de 33 a?os que algunos llaman —aunque a ¨¦l no le haga demasiada gracia— el Banksy espa?ol. Y como el ingl¨¦s, no se deja ver ni fotografiar. A sabiendas de que, aunque sintamos curiosidad por conocer qu¨¦ mueve a un artista, rara vez la respuesta satisface, ten¨ªamos que abordarle. S¨®lo puede ser v¨ªa e-mail. ?C¨®mo es este artista urbano que con sus inesperadas intervenciones saca a los peatones de la rutina?
EP3. ?Por qu¨¦ tanto empe?o en preservar su anonimato? ?Miedo a represalias legales o halo de misterio?
SpY. El viandante se suele preguntar qui¨¦n habr¨¢ hecho esas intervenciones y prefiero que sea as¨ª. No tienen un aspecto institucional, no parecen autorizadas, queda claro que alguien que se dedica a realizarlas de manera gratuita y espont¨¢nea. Si al receptor le han gustado, lo ve como un acto rom¨¢ntico y se lleva consigo parte de la intervenci¨®n. Como un mago, si desvelara el truco dejar¨ªa de tener inter¨¦s.
EP3. ?Qu¨¦ tal se lleva con la polic¨ªa?
SpY. Una vez, haciendo las fotos de la se?al de la flor [ver en p¨¢gina 13], se me acerc¨® un polic¨ªa y me pregunt¨®: "?La hab¨¦is puesto esta noche?". Le contest¨¦ que no, que s¨®lo quer¨ªa fotografiarla. Y ¨¦l insisti¨®: "Tu cara me suena. ?No nos conocemos?". Y yo pens¨¦: hostia, este poli me conoce y se ha dado cuenta. Le contest¨¦ que no, que no me sonaba de nada. Y ¨¦l: "Creo que nos conocemos del graffiti". Result¨® ser de un conocido grupo de graffiti de M¨®stoles. Le dije que con esas pintas me hab¨ªa mosqueado. Se ri¨® y me dijo: "He pensado que lo hab¨ªan hecho esta noche, est¨¢ muy guapo, a ver cu¨¢nto dura. ?Quieres que te retire el tr¨¢fico para hacer mejor la foto?".
EP3. ?Uno se hace graffitero por rebeld¨ªa o para ligar?
SpY. Creo que, de alguna manera, todos llevamos un graffitero dentro. De peque?os, nuestros padres nos dan pinturas y, de modo instintivo, en vez de pintar sobre papel, pon¨ªamos las paredes de casa perdidas. De adolescente me sent¨ª atra¨ªdo por los graffiti que ve¨ªa por la ciudad, y eso me llev¨® a probar. En los ochenta y noventa le dediqu¨¦ mucho tiempo, me ense?¨® a ver la ciudad como un soporte art¨ªstico con grandes posibilidades. Pero ahora me identifico m¨¢s como artista urbano.
EP3. ?Qu¨¦ diferencia hay entre mostrar tu trabajo en la calle o en una galer¨ªa?
SpY. No expongo en galer¨ªas. Hace tiempo particip¨¦ en una exposici¨®n colectiva y me di cuenta de que ten¨ªa poco sentido. Mis intervenciones se desarrollan en la ciudad: es ah¨ª donde nacen y viven, creando un di¨¢logo con el receptor. Carece de sentido intentar emular eso en una galer¨ªa.
EP3. ?En qu¨¦ se fija cuando llega a una nueva ciudad?
SpY. Suelo recorrerlas, la idea puede surgir en cualquier esquina. Me gusta interpretar el sitio al que voy. En Jap¨®n, por ejemplo, hice una serie de 5.000 carteles en castellano y con letra occidental con un gran impacto visual que nadie entend¨ªa.
EP3. ?Sirve de algo la iron¨ªa en el arte?
SpY. Con mi trabajo me gusta generar alg¨²n tipo de reacci¨®n, procuro despertar y crear conciencia. La iron¨ªa es una manera de hacer c¨®mplice al receptor. Es como peque?os pellizcos de intenci¨®n que detienen la rutina de urbanita.
EP3. ?Hace todo esto usted solo?
SpY. Generalmente, s¨ª, aunque tengo colaboradores que me ayudan a documentar y producir algunas obras.
EP3. El artista urbano tiene algo de superh¨¦roe, de justiciero. De noche, dejando su marca...
SpY. No, quiz¨¢ m¨¢s como el Zorro, ja ja ja. Yo act¨²o tanto de d¨ªa como de noche.
http://spy.org.es/
![<i>Bullfighting</i>.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/Z5M62O2BWEB75UGKH3646VEZCA.jpg?auth=6c398222e540c7aa90e6f6dfbd267c57003929e14ece649292027edd23a969f5&width=414)
![<i>Green fence</i>.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/ZSOH7TBEJFPSCETNRU7NNAXSWI.jpg?auth=4e64fbb2d83c65488586133b34c28afcba86dcb5df91d38ba80d647fabfa903d&width=414)
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.