Las minor¨ªas y los j¨®venes sellaron el triunfo
La baja movilizaci¨®n de los votantes republicanos impidi¨® que se alcanzara un r¨¦cord hist¨®rico de participaci¨®n
Uno de los pilares de la campa?a de Barack Obama ha sido organizar a las bases y sacar de sus casas el d¨ªa de la votaci¨®n a los grupos que menos suelen acudir a las urnas: j¨®venes, negros e hispanos. Los primeros an¨¢lisis indican que la estrategia ha funcionado: la participaci¨®n entre los votantes dem¨®cratas ha aumentado en casi un 3%. A pesar de todo, seg¨²n los primeros datos, no parece que vaya a haber un r¨¦cord hist¨®rico de participaci¨®n este a?o ya que, seg¨²n el Centro para el Estudio del Electorado Americano de la American University, los republicanos han hecho lo contrario y han votado menos que en elecciones pasadas.
Mientras en la polarizada elecci¨®n de 2004 vot¨® un 60% de la poblaci¨®n -una cifra alta para el pa¨ªs-, distintos estudios prev¨¦n que este a?o la participaci¨®n haya aumentado entre uno y tres puntos. Si se confirman estas cifras, no habr¨ªa r¨¦cord hist¨®rico de participaci¨®n en 2008. No se habr¨ªa alcanzado el 67% de 1960, el a?o que John F. Kennedy sali¨® elegido. Tampoco la cifra del 64% de 1964, cuando Lyndon B. Johnson arras¨® frente a Barry Goldwater despu¨¦s del asesinato de Kennedy. A¨²n as¨ª, podr¨ªa ser la participaci¨®n m¨¢s alta desde los a?os 60.
La poblaci¨®n afroamericana que fue a las urnas aument¨® un 11%
Curtis Gans, director del Centro para el Estudio del Electorado Americano de la American University, opina que el hecho de que no se vaya a llegar a un r¨¦cord hist¨®rico se debe a la desmovilizaci¨®n de los votantes republicanos, provocada por tres factores: el nombramiento de Sarah Palin como candidata a la vicepresidencia, que moviliz¨® a los sectores m¨¢s conservadores pero hizo que los republicanos moderados se quedaran en casa; la percepci¨®n de que, seg¨²n las encuestas, no hab¨ªa duda de que Barack Obama iba a ganar por amplia mayor¨ªa; y, finalmente, que John McCain en ning¨²n momento logr¨® levantar el entusiasmo entre sus bases que s¨ª despertaba, y a raudales, su rival dem¨®crata.
No habr¨¢ resultados definitivos hasta principios de diciembre, por lo que todos estos datos son estimaciones y hay que tomarlos con cautela. Se han computado ya 121 millones y medio de votos, a los que habr¨¢ que a?adir algunas papeletas provisionales que todav¨ªa se est¨¢n contando y el voto anticipado (presencial y por correo). Curtis Gans calcula en su informe que se llegar¨¢ a los 126 o 128 millones. El polit¨®logo de la Universidad George Manson Michael McDonald dice en su propio estudio que podr¨ªan alcanzarse los 133 millones. Hasta dentro de unas seis semanas no habr¨¢ datos oficiales.
Si se analiza las cifras por sectores de poblaci¨®n, pueden apreciarse dos grupos entre los que la participaci¨®n s¨ª fue hist¨®rica. El porcentaje de j¨®venes de entre 18 y 29 a?os (el 18% de la poblaci¨®n) que vot¨® fue del 55%. Seis puntos m¨¢s que en las elecciones pasadas, seg¨²n los c¨¢lculos de la asociaci¨®n no partidista Rock the Vote, que realiz¨® durante toda la campa?a un intenso esfuerzo por lograr llevar a los j¨®venes a las urnas. Teniendo en cuenta que los j¨®venes, seg¨²n las encuestas a pie de urna, votaron masivamente a Obama -as¨ª lo hicieron un 66% frente a un 32% que apoy¨® a McCain-, su participaci¨®n podr¨ªa haber sido concluyente en algunos Estados en los que los resultados han sido muy ajustados. Se calcula que entre 20 y 24 millones de menores de 29 a?os salieron a votar el 4 de noviembre.
Otro grupo fundamental ha sido la poblaci¨®n de raza negra. La participaci¨®n entre este grupo, tradicionalmente abstencionista, ha aumentado un 11% respecto a 2004. M¨¢s de 15 millones de votantes depositaron su papeleta, votando masivamente a favor de Obama, en un 95%. Fueron el 13% del electorado, un porcentaje similar a la poblaci¨®n negra del pa¨ªs. Un hecho sin precedentes. Se cumpli¨® el deseo de Martin Luther King, que so?aba con el d¨ªa en el que "el negro de Nueva York" tuviera algo por lo que salir a votar.
Muchos de estos j¨®venes y ciudadanos negros, al igual que muchos hispanos, han sido votantes que ejerc¨ªan su derecho de sufragio por primera vez en su vida. M¨¢s de 13 millones de personas, seg¨²n las encuestas, el 11% del electorado, eran ciudadanos que nunca antes se hab¨ªan registrado para votar. Y el 68% lo hicieron por Obama. El nuevo presidente electo logr¨® un 52,4% de voto popular, el porcentaje m¨¢s alto desde que Bush padre venci¨® a Michael Dukakis en 1988. Es el primer dem¨®crata desde Jimmy Carter en 1976 en pasar del 50% en voto popular.
Estados Unidos es un pa¨ªs que suele registrar elevados ¨ªndices de abstenci¨®n. El r¨¦cord de participaci¨®n est¨¢ en el siglo XIX: en 1860, cuando Abraham Lincoln fue elegido presidente, vot¨® un 81,2% de la poblaci¨®n con derecho a ello; y en 1876, cuando se enfrentaban Samuel Tilden y Rutherford Hayes en una de las elecciones m¨¢s disputadas de la historia, lo hizo un 81,8%. Pero en ambos casos era un momento distinto, con un censo mucho menor, ya que mujeres y negros estaban excluidos del derecho a votar.
A lo largo del siglo XX, especialmente despu¨¦s de los a?os 50, las tasas de participaci¨®n han oscilado entre el 50% y el 60%. Y el porcentaje es a¨²n menor en aquellas elecciones en las que hay un claro ganador desde el principio. Apenas el 49% de la poblaci¨®n vot¨® en 1996, cuando Bill Clinton se present¨® a la reelecci¨®n. En 2008 se esperaban cifras hist¨®ricas. A principios de diciembre se sabr¨¢, con total exactitud, la dimensi¨®n del efecto Obama en la participaci¨®n y se constatar¨¢ si, como parece, muchos republicanos se quedaron en casa el 4 de noviembre.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.