Notas bals¨¢micas

En la zona de La Rioja, los vinos blancos han sido durante muchos a?os un bien escaso y poco prestigioso, tal vez porque la viura no es uva para grandes elaboraciones. Claro que ah¨ª han estado, rompiendo esquemas, los magistrales crianza de Tondonia y Murrieta, gloriosos en su larga vejez.

La recuperaci¨®n procedi¨® de la fermentaci¨®n en barrica, obra pionera y singular de firmas como Bujanda, C¨¢ceres, Muga, Faustino, Ijalba, Murua... una senda seguida, con resultados ¨®ptimos, por otros bodegueros audaces como Telmo Rodr¨ªguez, Miguel ?ngel de Gregorio, Luis Ca?as o Fernando Rem¨ªrez de Ganuza. Incluso hay blancos soberbios, como el de Jes¨²s Madrazo, en Contino, que, inexplicablemente, los responsables de la bodega no quieren sacar al mercado.

A esta pl¨¦yade se une este blanco portentoso, elaborado con su habitual perfecci¨®n por Marcos Egurem. Una acertada selecci¨®n de varietales acompa?an a la poco expresiva viura en su camino hacia la grandeza... de inspiraci¨®n borgo?ona. Posee un aroma complejo, con buena carga de fruta carnosa sobre la que resuenan las notas bals¨¢micas, florales, herb¨¢ceas en un conjunto arm¨®nico contrapunteado por el leve recuerdo de l¨ªas, roble y tostados. La boca es muy sabrosa pero fresca, de tacto untuoso, con un ligero sabor a mantequilla ahumada que se remata en la elegante mineralidad final.