Diez a?os sin reglamento regulador del ocio nocturno

Mientras en Madrid se cerraban ocho locales en los diez d¨ªas posteriores a la muerte de ?lvaro Uss¨ªa en la discoteca Balc¨®n de Rosales (tambi¨¦n cerrada), en el Palacio de Congresos de la capital se celebraba el tercer simposio de actividades l¨²dicas y recreativas, que se clausur¨® ayer. Parad¨®jicamente, el evento estaba patrocinado por la Comunidad y el Ayuntamiento.

Dos cosas han quedado claras en ese centro de debate. La primera, "la inacci¨®n de la Administraci¨®n", explicada por juristas (como Edilberto Narb¨®n Lainez, presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Valencia) y abogados (como Salvador Domenech, del servicio jur¨ªdico de la Asociaci¨®n por la Calidad del Ocio Nocturno, ECO) y reconocida por el propio jefe del ?rea de Espect¨¢culos P¨²blicos y Actividades de la Comunidad, Antonio Pi?ol, al admitir que la Comunidad no ha desarrollado la ley que regula el sector de ocio nocturno (la Ley de Espect¨¢culos P¨²blicos y Actividades Recreativas de julio de 1997). "No quisimos precipitarnos", dijo Pi?ol, asumiendo que 10 a?os era tiempo suficiente. "Se han elaborado algunas normas que han desarrollado la ley parcialmente, como por ejemplo las que tienen que ver con horarios y con los n¨²meros identificativos de los locales; y ahora ya hay un boceto de la futura ley de control de admisi¨®n para los porteros". Pi?ol agreg¨® que "es intenci¨®n del Gobierno sacar un reglamento general que agilice los procedimientos de licencias y defina mejor al sector".

"Lo peor del asunto", se?alaba Alberto Delgado, responsable de la sala Moby Dick, "es que la ley tambi¨¦n se ha quedado obsoleta y no responde a las demandas del sector y de sus usuarios". Algo que reconoci¨® Pi?ol, al admitir que "la ley actual no permite que se usen de maneras distintas los locales, es decir, que el mismo sitio donde te puedes tomar una copa por la noche pueda dar comidas por el d¨ªa y cosas as¨ª", resumi¨®.

La segunda cosa que qued¨® clara en el Congreso fue que esa falta de regulaci¨®n del sector aboca a los empresarios a una "inseguridad jur¨ªdica" ("la imposibilidad de exigir que la Administraci¨®n cumpla la ley en unos plazos determinados", explic¨® el letrado) debido a los silencios administrativos y a la lentitud de los procedimientos para obtener licencias de actividad o funcionamiento (entre 5 y 17 meses en la Comunidad de Madrid, seg¨²n explic¨® Domenech).

Muchos de esos tr¨¢mites acaban en los tribunales: "Se est¨¢n judicializando los procedimientos de concesi¨®n de licencias, que son competencia de la Administraci¨®n", explic¨® el magistrado Narb¨®n Lainez. Seg¨²n Pi?ol, "el tema de las licencias es muy complejo porque entran las dos administraciones, el Ayuntamiento por la parte que afecta a la Ley del Suelo, y la Comunidad en temas de Medio Ambiente, y hay muchas ordenanzas municipales... Estamos poni¨¦ndonos a legalizar licencias al ritmo que sea. ?C¨®mo agilizarlas? No lo s¨¦, pero se est¨¢ en ello", dijo, sin referirse a la propuesta de los empresarios de que las licencias se obtengan a trav¨¦s de empresas certificadoras, siguiendo el ejemplo de las ITV de los autom¨®viles.